Cura

Capítulo único

Otro día había sido salvado por los héroes de París, pero nadie puso salvar al superhéroe gatuno del pequeño incidente aquella tarde.

El héroe estrelló su rostro contra un poste al caer mientras intentaba impresionar a Ladybug con algunas piruetas. Ahora se encontraban lejos del público, sentados en algún tejado alto. Ella limpiaba sus raspones mientras él reprochaba por el ardor que aquello le causaba.

-Esto es tu culpa, ¿sabes?- dijo Cat Noir a su compañera.

-Lo... ¿siento?- respondió ella ante la acusación antes de pasar el pañuelo húmedo una vez más por su mejilla.

-¡Auch!- gritó él.

-Calma, ya terminé.- aseguró la chica, riendo de los pucheros que hacía el herido.

-Es bueno oir eso...- murmuró Cat Noir. LadyBug sonrió y colocó una bandida sobre su mejilla.

-Ya está. Ahora solo intenta ser un buen gatito y quítala hasta que sane.- dijo ella poniéndose de pie.

-Sí, señora.- respondió él levantándose también.

-Bien, ahora debo irme. Tengo mil cosas que hacer.- dijo ella mirando al rededor en busca de una ruta a su casa.

-P-Pero... estoy mal herido.- reclamó el chico con el tono de voz de un niño pequeño.- No puedes dejarme aquí.

-Descuida. Vivirás.- dijo ella colocando una mano en su hombro.

-No me convence completamente su diagnóstico, doctora.- dijo él cruzándose de brazos. Ladybug sonrió divertida de su expresión.

-Entonces tendré que recetarle algún medicamento.

-¿Cuál?- preguntó Cat Noir antes de ella le plantara un suave beso en su mejilla lastimada. El muchacho cerró sus ojos fascinado antes de que ella se alejara.- Yo... creo que necesitaré más de una dosis...- aseguró

-Hasta luego, gatito.- dijo ella entre risas antes de irse.

-Con una doctora así, no me molestaría estrellarme todos los días...- dijo para sí.