Reglamento Roto {Wigetta}

Núm. 2

Narra Samuel

Era raro ver así a Guillermo, pero realmente esperaba que mantenga esa postura, me haría la situación más sencilla, eso creo.

Empezamos a caminar directo al salón. Pero en el camino nos distrajo la voz del director.

- Jóvenes, esperen un momento, tengo que comentarles algo.

Nos detuvimos para ver que es lo qué sucedía.

- Este semestre se inscribieron nuevos alumnos, por lo que tuve que acomodar a los alumnos a nuevos grupos, su horario seguirá igual pero algunos compañeros serán de otras aulas. Uds dejan de ser el grupo III para ser el grupo IV, por ende, sus casilleros cambian.

No me molesta la idea, es el grupo en el cual está Guillermo y sus amigos, todo estará bien.

- De acuerdo, nos podría dar los números de los casilleros y llaves, por favor.

- Claro, ten Alejandro, aquí están las llaves con los números. Espero no les moleste cambiar de grupo.

Claro que no, le agradezco que me cambie, bueno nos cambie ya que cada quien quiere estar con el chico que le gusta.

- Bueno les dejo solos -dio vuelta y se retiró.

Falta poco tiempo para que las clases iniciaran, entonces prácticamente corrimos hacía los casilleros que por mucha casualidad o esta hecho aposta, que nuestros lugares estaban junto a los otros chicos.

Estaban este orden: lugar 77: yo, lugar 76: Guille, lugar 75: Rubius, lugar 74: Mangel, lugar 73: Frank y el lugar 72: Alex.

¿Es raro que me sepa el número de casillero de los demás? Lo dudo, pues cuando alguien te gusta investigas un poco.

Terminamos de meter los útiles y nos dirigimos al nuevo salón, vi la hora en la cual faltaban dieciséis minutos. Al entrar los alumnos en el aula nos miraron sorprendidos pero luego entro el director entonces todos se acomodaron, típico, entra alguna autoridad y todos se vuelven ángeles.

- Veo que ya entraron, escuchen estudiantes, por favor. Como se han dado cuenta, tres de sus compañeros ingresan a este salón, unos ya se conocen pero bueno los cambiaré de asiento. No importa si están en universidad, se necesita un orden.

Narra Guillermo

Después de salir riendo de ahí, fui directo a mi casillero para sacar mis cuadernos pero escuché a alguien gritar mi nombre.

- ¡GUILLERMO! ¿Qué pasó allá fuera? - mencionó Frank.

- Lo dije, ya no dejaré que me traten mal, que nos traten como su fuéramos idiotas. Les pondré un alto para que se alejen.

Cuando dije eso Mangel y Frank me miraron raro por un momento, sabía lo que podrían estar pensando pero no quería tocar el tema, después ello me felicitaron por mi valentía.

- Vámonos, que falta casi nada para la clase de diseño - mencioné rápido al ver cómo unas chicas nos veían a unos cuantos pasos.

Los tomé del brazo a ambos al ver que se aproximaban las tres chicas: Vanessa, Julieta y Paulina.

Apresuramos paso pero fue en vano, ya que me alcanzó Paulina, pues las otras dos chicas tenían tacones, les fue difícil correr.

- Hola, amor. ¿Cómo estás, guapo? - me intentó besar pero me quité un poco.

- Hola, Pau. Por favor déjame de decir así.

Me la quité por completo y me fui de ahí, llegué al salón y me senté junto a los chicos.

Estuvimos hablando hasta que Mangel dijo algo que no me gustó.

- Saben me acabo de enterar que Samuel, Rubén y Alejandro los cambiaron de salón y para mala suerte este es su salón.

- No me jodas ahora también m- bueno nos molestarán a los tres aquí.

Seguimos riendo y discutiendo del tema hasta que entraron los idiotas al salón, y después el director.

Dijo algo que no presté atención; pero nos empezó acomodar y nos sentó con nuestro gran amigo:

Yo en el ultimo asiento superior, adelante de mi Frank y adelante de el Mangel y pues al lado mío Samuel, delante de él Alex y luego Ruben

Que bien, gracias.

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Aquí otro capitulo y bueno perdón por la ortografía, al igual que no sé narrar bien, perdón.

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