No confíes en mí (Fanfic Road Trip)

El anillo

Laia y Brooklyn nos están esperando al pie de la escalera. No hacen preguntas cuando nos ven bajar a Mikey y a mí, despeinados y con las mejillas sonrojadas, y yo se lo agradezco mentalmente.

-Tranquila. -le digo a la morena, que parece a punto de echarse a llorar.

-Nos van a expulsar. -solloza, abrazándose a Brook. -Y yo voy a pasarme el resto de mi adolescencia en un colegio privado, rodeada de monjas.

El rubio la mira con una sonrisa divertida, lo que hace que se gane una colleja por parte de Laia.

-No tiene gracia. -dice con un puchero.

-Nadie va a expulsarnos. -intenta tranquilizarla Brooklyn. -¿Verdad? -ahora nos mira a nosotros, esperando a que le demos la razón, pero ninguno tiene el valor para mentirle.

-Vosotros seis, a mi despacho. Ahora mismo. -la voz de Blair resuena por todo el pasillo. Nunca lo había visto tan enfadado. Nunca lo había visto enfadado, para ser justos.

Todos entramos en la habitación con la cabeza gacha.

Madison también está dentro, con el maquillaje corrido alrededor de los ojos y escoltada por varios policías.

Blair les hace un gesto con la cabeza y los hombres salen del despacho, dejándonos a los ocho solos.

-Creo que no hace falta que diga lo decepcionado que estoy -posa su mirada en Jack, que se encoje sobre si mismo, empezando a sonrojarse y después nos mira a Mikey y a mí. -con todos vosotros. -hace énfasis en las dos últimas palabras, dirigiéndose a Brook, Laia y Madison que está mordiéndose las uñas con la mirada perdida en algún lugar de la habitación.

-Las pastillas no eran nuestras. -dice Madison alzando la vista.

-Me sorprende que diga eso señorita Smith, -Blair la mira con severidad. -teniendo en cuenta lo que hemos encontrado en...

-Eso sí era mío. -reconoce con la voz quebrada, pero en seguida se recompone. -Expúlseme. Solo a mí.

-Estoy de acuerdo con ella. -Laia le lanza una mirada de odio a la chica y después se dirige a Blair. -Nosotros no hemos hecho nada.

-No seas injusta. -se queja Rye. -Si expulsan a Madison nos expulsan a todos.

-Hablaré con vuestros padres y...

-Blair, ¿puedes salir un momento? -Anna, la limpiadora, asoma la cabeza por el marco de la puerta, interrumpiendo al director.

-Ni se os ocurra moveros. -nos advierte antes de marcharse.

-Hijo de puta. -murmura Madison con rabia, levantándose y empezando a rebuscar en las estanterías de Blair.

-¿Estás loca? -la pregunto sujetándola del brazo. -¿Qué estás buscando?

-Esto. -sonríe triunfal al desenterrar una caja fuerte bajo una pila de libros. -¡Será cabrón!

Todos la miramos sin comprender y ella señala con la cabeza a la cerradura: es circular y tiene grabado el escudo del internado.

-¡¿Con que se supone que se abre eso?! -protesta, de mal humor.

-Con un anillo. -susurra Jack, dando un paso al frente. -Más concretamente con el que tú escondiste.

-¿Por qué tenía Andy el anillo de la caja fuerte de Blair? -no soy consciente de que he hablado en voz alta hasta que veo cómo me miran todos.

-Por que estaba harto de este maldito sitio y estaba pensando en robar algo de dinero y largarse. -responde Madison como si fuera obvio.