cheerleading him»baekyeon.

007 > iluso

Tras haber dicho eso, había quitado lentamente sus manos de mi boca, dejándome respirar claramente. Tomé un bocanada de aire mientras cerraba los ojos a causa de mi flequillo, se me estaba entrando entre los ojos y me picaban. Traté de soplarlo hacia arriba, pero fue en vano, seguían haciendo su trabajo de dejarme ciega. Él notó lo incomoda que estaba a causa de eso, y dejó salir un gran suspiro antes de peinar mi flequillo hacia un lado. Lo miré a los ojos mientras lo hacía. ¿Por que lo hacía? ¿No se supone que debía hacerme sufrir?

Hicimos contacto visual por dos segundos, hasta que él lo rompió. Algo en él hizo que me detuviera un segundo a verlo. Su cabello negro estaba desorganizado, las capas que habían en él siendo alzadas. Sus pequeños ojos rasgados estaban más grandes de la cuenta, y sus pupilas dilatadas llamaban la atención. Pero volví a la realidad cuando sus ojos dejaron de ver los míos y mis manos me empezaban a arder debido a su peso sobre ellas.

—Si no me sueltas las manos, no podré hacerlo gran idiota —dije mientras ponía los ojos en blanco. Se estaba haciendo prominente el hecho de que él estaba encima de mi. Era embarazoso, y no sé porqué, si antes había gozado de estar así con un chico, con Baekhyun se sentía diferente, tal vez era la vergüenza de haber sido encontrada husmeando.

Él se movió un poco, dejando caer un poco más su peso trasero para que así sus piernas se pudieran levantar y así yo podría sacar mis manos. Pero ese movimiento fue que hizo que mis mejillas se tornaran rosa. ¡Qué está pasando! Vamos Taeyeon, no es la primera vez que te encuentras así, por qué diablos estás tan nerviosa. Cuando volvió a su posición original, se arrastró hasta que su peso quedara en sus piernas, halando de mi pantalón hacia arriba. Si fuera un desconocido juro que sería intento de violación. Para que mis piernas no fueran tan descubiertas intenté bajármelos aún estando en esa posición tan estúpida, pero no pude, simplemente no llegué. Me bajé la camisa, aunque no estuviera enseñando nada, y tomé mi celular. Él se había cruzado de brazos como si la situación fuera la más normal del mundo.

—¿Cómo sabrás que las habré borrado cuando tú estás encima de mí como si fuera la posición más normal del mundo? —yo también mi crucé de brazos. Estaba indignada, cómo era posible que yo, Kim Taeyeon, estuviera bajo él como si pudiera hacer conmigo lo que quisiera.

—¿Te incomoda la posición, eh? Hasta que no la borres, no me pararé.

Suspiré con furia antes de pasar a borrar todas las fotos. Una por una. Sabía que estaban en la conversación con Tiffany, así que no estaba para nada preocupada. Las borré también de eliminados recientemente, y archivé la conversación con Tiffany por si quería pasarse de listo. Mientras hacía todo el proceso, me miraba fijamente, como si estuviera admirando mi cara. No lo culpo, quién se resistiría. Cuando ya había acabado, le dejé el celular en las manos para que revisara todo. Él, con el ceño fruncido, comenzó a inspeccionar todo con suma paciencia, también era cauteloso por si yo me había inventado algo para que las fotos pasaran desapercibidas. Me fui lejos, pensando en lo iluso que podría llegar a ser éste idiota, pero tan lejos, que no lo vi moviendo sus dedos, pasando por mis fotos. Yo me paré rápidamente, para así arrebatarle el celular, pero eso solo hizo que la situación fuera más horrible e incómoda: estaba sentado sobre mí, nuestras caras estaban cercas, muy cerca. Su respiración daba en mi nuca y yo hacía todo por concentrarme en el celular y más nada. Cuando miré el celular, iba justamente por una de mis fotos en BoraBora el año pasado, paseaba en bikini por la blanca arena del Océano Pacífico junto a Stephanie. Ahí fue cuando me puse más roja todavía.

—Eres un descarado, Byun —lo miré con odio.

—Solo me aseguraba de que no estuvieran las fotos —se alzó de hombros.

—Bien, ¿ya me puedo ir? —pregunté. No esperé su respuesta y rodé mis piernas hasta el final de la cama, pero él tomó mi muñeca, impidiéndome dar otro paso más.