Brighton Nights

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Sonrío a Zack,pero me da poco tiempo a reaccionar, porque empieza el concierto y me pongo los tapones en las orejas cuando me meto en el foso.

Voy echando fotos y veo como Brendon da todo en el escenario. Dallon simula caerse y Kenneth va cambiando de guitarra sin parar. 

Brendon cada vez va más sudado y se quita la camiseta, cosa que hace enloquecer a las fans. 

Acaba el concierto después de unos bises y yo debo haber tomado más de 150 fotos.  

Mientras él se despide del público, yo me meto discretamente por detrás del escenario hasta el edificio y llegar a la sala dónde estábamos antes del concierto, donde por fin encuentro algo de tranquilidad. Tengo los oídos un poco taponados y me doy cuenta que estoy sudando. 

Dejo la cámara encima de la mesa y me saco el hoodie por la cabeza. Abro mi portátil y dejo que se encienda. Tiro la pieza de ropa por el suelo y me dejo caer encima de la silla. Estoy cansadísima. Cierro un momento los ojos y respiro. Aunque oigo los gritos del público a lo lejos, me alegro de poder tener un momento a solas. Entro en mi usuario y conecto la cámara para empezar a editar alguna  foto para que la puedan subir en Instagram. 

Empiezo a mirar las fotos y noto que sonrío, como una enamorada. Y luego se me remueve el estómago, queda poco tiempo para quedarme a solas con Brendon y tengo que armarme de valor para decírselo todo. Para quitarme el mal gusto de los nervios, encuentro una botella de agua cerrada cerca de mi portátil y bebo un poco. Pero mi cabeza sigue dándole vueltas mientras a la vez empiezo a editar una foto que me gusta, Brendon cantando con Dallon y Kenneth tocando muy cerca de él. 

Le quiero. He llegado a esa conclusión. Él cuida de mí y hace muchísimo tiempo que no me siento tan a gusto con alguien, me hace sonreír como hacía meses que no lo hacía, supongo que después de Marc me dedicaba a atender mis necesidades sexuales y no quería sentir nada. Con Brendon no hago más que sentir paz y reírme. Y con poco me hace sentir querida.  Pero sólo hace un mes que lo conozco y nos vemos, tengo miedo de estar precipitándome. Lo que tengo claro es que siento algo fuerte por él y que me gustaría llevar las cosas al siguiente nivel y al menos intentarlo, pero se acaba de separar, ni ha firmado el divorcio e imagino que lo menos que le apetece es tener una relación y si ¿cambia de opinión y decide perdonar a Sarah? No nos han visto nunca en público juntos, ¿Tendrá razón Holly y él se avergüenza de mí? Suspiro profundamente intentando anirmarme y oigo unos pasos que se acercan a la sala. 

La puerta se abre y aparecen los chicos, les acompaña un olor a sudor, como el que debo estar desprendiendo  yo. Empiezan a recoger sus cosas y Zack llama para que en un par de horas acaben de recoger el material. 

Brendon, que aún va sin camiseta se estira en el suelo y respira muy fuerte. 

-¿Estás bien?-le pregunto extrañada mientras me giro, él me mira y saca la lengua en respuesta.

Sacudo la cabeza sonriendo y me vuelvo a concentrar en editar la foto. 

Zack, Kenneth y Dallon se despiden de nosotros y nos desean un buen fin de semana y yo he tenido un déjà vu de cuando me quedé a solas por primera vez con Brendon en un concierto a los pocos días de conocerle. 

Él sigue tumbado en el suelo, mirando al infinito y yo sigo peleándome con los colores de la foto.

Sin darme cuenta, noto que su brazo me rodea el cuello y me da un beso en la sien y otro en la mejilla. 

-¿Te queda mucho, T/N?-me susurra en el oído-¿Te apetece que vayamos a cenar por ahí?

-Sí, necesito una cena, me queda más o menos media hora de edición y mandársela a Zack. 

-Vale,-me responde- necesito una ducha...

-Y yo también- le interrumpo-aunque tú has sudado más que yo.

-Bueno, a ver quién suda más esta noche, preciosa-me guiña un ojo y yo río- me adelanto a ducharme. ¿Sabes en qué número de habitación estamos,¿no?

-Sí. La 301. Te veo luego cariño- él sonríe con esa última palabra, me tira una copia de las llaves de la habitación y se va. 

Me quedo otra vez sola y edito tranquilamente durante un cuarto de hora, le mando por mail la foto a Zack y recojo mis cosas. 

Salgo del cuarto dónde estaba y cojo el ascensor hasta el tercer piso y veo una habitación  con una puerta más bonita que las demás al fondo del pasillo. Y cómo no, es la 301. Cargada con mi portátil y mi cámara, llego a la puerta y pruebo a llamar,  no sea caso que Brendon aún esté dentro y así no tengo que abrir con mis llaves. 

Llamo y por suerte me abre, mientras entro, Brendon se está ajustando los puños de una camisa negra. Veo que lleva unos pantalones negros efecto cuero y zapatos de vestir. Sonrío en mis adentros al pensar lo guapo que está, pero él está muy serio. 

-Te espero cerca de recepción, ¿vale? tengo que hacer una llamada-me dice, seco.

Asiento y espero a que se vaya. ¿Y ese tono? Pienso en tranquilizarme, deben ser mis nervios e imaginaciones mías.  Busco con la vista mi maleta y la encuentro en una punta de la habitación, junto al armario. Rodeo la cama para ir ahí y me fijo en que tiene unas sábanas preciosas de color burdeos satinadas. Justo delante de la cama hay unas cortinas negras, las retiro y hay unas vistas impresionantes al mar. 

Abro mi maleta y saco las cosas para el aseo. Cuando termino de ducharme, me seco el cabello y  lo dejo suelto, tener la melena larga y lisa, aunque da calor acaba siendo para lucir. 

Escojo un vestido negro que me llega a medio muslo y cae sobre mis hombros en dos pequeñas mangas de encaje. No me complico mucho para los zapatos y me acabo poniendo unas bailarinas negras. 

Salgo del baño a por el maquillaje y vibra mi teléfono, es un mensaje de José de que Evie está bien y que sólo ha necesitado mimos. Le respondo con un gracias y un smiley y vuelvo al baño a maquillarme.

Me aplico un poco de base, iluminador, bronceador, me hago un cat eye en negro y aplico un pintalabios rojo en barra, total, al comer se irá. Acabo rematando el look con máscara de pestañas.

Me echo un poco de perfume floral y preparo un pequeño bolso a conjunto para llevar. 

Cierro la puerta de la habitación y suelto un suspiro. Es la hora de la verdad. 

Victorious (Brendon Urie y tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora