INITIUM (#1 La legión de los infectados)

Capítulo XI

Capítulo XI

Había amanecido por completo, el cielo había recobrado su color celeste y el bosque, a pesar de las criaturas que habitaban en el, ya no lucía tan tenebroso. Mis quemaduras aún estaban presentes, no eran muchas pero las pocas que habían dolían como un demonio.

- Los chicos en el coliseo te admiran, ¿Lo sabes? - Dijo de pronto el pequeño niño, que caminaba a mi lado.- No lo admiten pero lo hacen y otros te envidian. - Lo miré confundida.- Eres una mujer y le pateaste el trasero al más fuerte de los gladiadores.

- Yo...- miré el piso, algo complicada con el tema.- No le pateé el trasero a Elijah, creo solo fue una reacción. - Expliqué.

- Pero has derrotado a varios olvidados, algunos jamás hemos visto uno.

- ¿No viste uno anoche? - pregunté extrañada.

- No. - Aseguró.- los escuché pero logré esconderme y caminar sin hacer mucho ruido. - Me sonrió pero luego todo atisbo de felicidad se esfumó de su rostro.- ¿Que va a pasar conmigo? - preguntó.- Noah y el consejo jamás dejarán que vuelva.

- No dejaré que te hagan daño. - Aseguré con voz cálida.- Ademas no es "Noah y el consejo" a lo mucho es "Tamara y el consejo" pero en realidad es solo "El consejo".- Hice una mueca ya que, ni siquiera yo había logrado comprender lo que había dicho.

- Lo entiendo. -Aseguró.- Nick y Tamara son los lideres del coliseo... - me observó.- Temporales. Hasta que tú asumas tu cargo, ¿verdad? - Le sonreí.- Y Elijah es el líder del consejo...

- Si, creo que eso lo resume bastante bien. - Simón suspiró con la mirada perdida.-

-Bueno, supongo que estoy perdido. - Dijo resignado, mientras yo le sonreía.

- Elijah...- comencé a decir.- No es tan malo como parece, de hecho él fue el primero en oponerse cuando di ésta estúpida idea. - expliqué.- No confía en mi pero también puede ser nuestra única oportunidad de ser escuchados cuando vuelva allá.

- ¿Crees que Elijah quiera ayudarme? - Asentí.- Ustedes dos son extraños. - mencionó con total seguridad, algo que me hizo reír por lo bajo.

- ¿Por que lo dices? - Pregunté observándolo mientras caminábamos entre ramas y hojas caídas.

- Elijah y tú. - Explicó.- se llevan mal, luego bien y luego se vuelven a odiar.

- Yo no lo odio, de hecho lo respeto mucho pero es una persona difícil. - Levanté una ceja y boté la respiración que había estado conteniendo.-

- Si, aveces me parece un idiota. - dijo.

- Hablaré con él apenas lleguemos, para poder arreglar esta situación.- Dije poniéndome seria.- Tú no tendrías porque haber entrado al bosque. - No pude evitar preguntar.- ¿Que te dijo Noah exactamente, Simon?

- Dijo que mi nombre había salido de la caja – Comenzó a decir - que debía adentrarme en el bosque después que tú, no antes. - Explicó.- y que debía seguir las reglas.

- Noah le había tendido una trampa y solo para molestarme a mi. Simón me miró con una expresión que no logré comprender.

- Siempre supe que yo sería el perdedor – Comentó.- pero debemos seguir las ordenes que están escritas en la pizarra y la primera es "Siempre obedecer a tu líder".

- ¿De que reglas estás hablando? - pregunté confundida.

- Las reglas de la pizarra que está en la muralla bajo la pantalla. - Dijo como si fuese algo que todos sabían.

- No tenía idea. - comenté.

- Si tu serás nuestra líder, entonces te seguiremos a ti. -Dijo.- pero creo que sería buena que te aprendieras las reglas primero.- Me miró divertido.- O al menos que sepas donde se encuentra la pizarra...