Petra jugaba con la comida frente a ella, mientras era observada en todo momento por su acompañante, de vez en cuando chocaban sus miradas y ella esbozaba tímidas sonrisas que eran recibidas de buena manera.-¿Ya te sientes mejor? Yo también me lesioné de esa manera hace unos años, es bastante doloroso y tardaras unas cuantas semanas en volver a entrenar. Fue la chica frente a ella quien inició la conversación de una manera casual, Petra se sorprendió pues no esperaba que llegaran a tanto, pero llena de confianza en sí misma, decidió conversar de lo más normal con aquella chica de cabello negro.
-Sí, es bastante molesto no poder caminar de manera normal, pero con algo de terapia sé que volveré cuanto antes a la alberca, gracias por preguntar señorita Mikasa. La chica daba un sorbo a su bebida y al escuchar aquella manera tan formal por la que era llamada, solamente levantó una ceja y fijó sus oscuros ojos en Petra.
-Solamente dime Mikasa, es muy anticuado que te refieras a mí de esa manera, solo soy un año mayor que tú, yo te llamaré Petra ¿está bien así? La peli naranja sonrió ampliamente y luego acomodo su cabello detrás de su oreja.
Todos en el comedor estaban curiosos y expectantes de aquellas chicas, ellas conversaban armoniosamente y la mayoría de estudiantes formulaban teorías del porque Mikasa hablaba con la oji miel, pero nadie entendía si aquello era un enfrentamiento o una simple charla casual.
-Petra, quiero la revancha... así que recupérate cuanto antes. Mikasa era directa y hablaba con mucha naturalidad, para Petra era como ver una copia femenina de Levi, solo que sin las palabrotas ni las miradas asesinas. Mikasa en verdad era amable y muy tranquila, eso le agradaba, pues ya no le hacía sentir incomoda, pero con aquellas palabras, todo su interior se desequilibró y ella intentaba entender a qué se refería la pelinegra ¿porque quería la revancha si ella era la ganadora?
-Mikasa, no comprendo a que te refieres, tú fuiste quien ganó... debería ser yo quien te rete a competir de nuevo. Mikasa apartó los restos de su almuerzo y puso el codo sobre la mesa para luego recargar su delicado rostro de porcelana sobre su mano. Veía a Petra con seriedad y un tanto molesta, ella no era muy sociable y sus pocas amigas lo sabían, su prima Isabel y Hanji eran las únicas que la conocían a la perfección y las chicas de su salón, nada más eran conocidas, excepto Sasha Braus, ella era su mejor amiga por así decirlo, pero por alguna extraña razón, Petra le agradaba demasiado y si antes no encontró la ocasión para acercarse a ella, usaría los acontecimientos anteriores para entablar comunicación con aquella que era su rival, una a la cual admiraba mucho.
-Ambas sabemos quién fue la ganadora, la ventaja que tenías sobre mí fue evidente, el desgarre de tus músculos cuenta mucho para mí, si eso no hubiese ocurrido, tú hubieses llegado a la meta dejándome varios metros atrás, por eso quiero que vuelvas a competir conmigo, quiero ganarte como debe ser Petra. La oji miel agacho la mirada y sonrió internamente, se sentía muy halagada en ese momento, pues ella consideraba a Mikasa como a alguien insuperable y sumamente orgullosa, pero se dio cuenta en segundos, de que ella era tan competidora como modesta y muy agradable.
-Bien, acepto Mikasa, competiré contra ti y no será en un evento escolar, será una competencia para ver quien es mejor, si así lo quieres ver tú. Mikasa asintió y luego ofreció su mano a Petra en señal de que aquello era una cuestión seria, algo que hizo que los estudiantes le prestaran aún más atención, pues Petra estrechó la mano de la pelinegra con mucho entusiasmo y luego comenzaron a hablar muy animadamente ignorando a todos a su alrededor.
-Oye cerda, cierra la boca mientras masticas o al menos usa las servilletas adecuadamente, no sé por qué demonios me siento con ustedes, no tienen modales, son sucios y me avergüenzan. Levi discutía con Hanji como normalmente lo hacía, pero la castaña de lentes ni siquiera le prestaba atención a las palabras de Levi y solamente se concentraba en la hamburguesa que tenía entre sus manos, pero a pesar de todo, había sido un tanto observadora durante el recreo y se dio cuenta de que Levi no despegaba la vista de cierta esquina y eso le llamo la atención de inmediato, pues incluso mientras la insultaba, su gélida mirada se encontraba en aquel punto fijo, no los despegaba de ahí y apenas parpadeaba.
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La pervertida de ojos color miel.
Fiksi PenggemarLevi Ackerman es un estudiante de preparatoria bastante popular , las chicas no son un problema pero simplemente no le interesa el tema del amor y dicha característica lo hace el típico rompecorazones , su vida entera cambia cuando cierta pervertida...