¿¡Muy Parecido al Amor!?

Capítulo I: Primer Dia.

Desperté muy temprano en la mañana, por lo general, tardaba una eternidad quitarme mi cara de Zombie adolescente. Toque una parte de mi mejilla y estaba completamente llena de saliva pegada - ¡Rayos! - Corrí lo mas rápido que pude al baño.

- ¡Eco, eco, asco, asco! -Me quejé.

Acabe por fin de quitar todo la saliva pegada, tomé una larga ducha refrescante, me vestí muy casual -Camisa de cuadros (Bajo esta una franela) y Jeans ajustados - finalmente bajé las escaleras encontrándome con una grandiosa sorpresa -Es sarcasmo, por si no lo habían notado -.

- ¿Ya iras al instituto? -Pregunto mi madre, mientras leía una revista de amas de hogar.

- Si. -Respondí fría.

- Y... -Dudó.- ¿En que iras al instituto? - Cuestionó.

Giré mis ojos -Con Liam, el me llevará en su auto.

-Perfecto. -Me observó hasta que me acerque a la puerta. - Adiós.

-Adiós. -Susurré entre dientes.

Abrí la puerta principal y me retiré de la casa, corrí lentamente hasta donde se encontraba Liam - Correr lento ¿Existe eso? - Él abrió la puerta trasera, dándome acceso al automóvil. Subí a éste y observé por la ventana como el viento que corría movía la naturaleza, en los arboles apenas se lograban visualizar pocas unas de color naranja. El invierno estaba próximo a aparecer.

Mi madre y yo no compartimos las mismas metas -Por metas, me refiero a: Opiniones, punto de vista, expectativas, aspiraciones- Ella era obstinada conmigo, al igual que yo con ella. ¿A qué se debía esto?; mamá permanecía la mayoría del tiempo en el trabajo, y cuando lográbamos hablar, lo hacíamos con las mínimas palabras posibles. Creo que ambas nos atacamos indirectamente. Y con respecto al resto de mi familia, Zoe -Mi madre- se comprometió hacia algunos menos con Jhon. Un hombre caballeroso y atento que tenia un solo defecto, su hijo. Liam era un imbécil soportable, imbécil soportable que ahora me sirve de chofer y transporte matutino.

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Al llegar a mi lugar de estudios, bajé corriendo del vehículo, ya que rápidamente logré visualizar entre los estudiantes a tres personalidades que llamaba amigos.

- ¡Tris! -Grité fuerte. Me escuchó y volteó.

- Sara -Sonrió y se acercó plantando un beso un mi mejilla - Llegas tarde.

- Lo se, Lo se. ¿Entramos ya?

- Por supuesto.- Respondió.

Se quedó en silencio por algunos minutos, en un estado de inquietud y confusión. Su mirada se quedo plantada en un solo momento. La observé muy confundida.

- ¿Tris? -Agite mi mano sobre su rostro - ¡El planeta tierra llamando a Tris Edwards!.

- Quitate de mi camino -Dijo una voz graves desde mi espalda.

Gire circularmente mis ojos, ese voz la conocía perfectamente. ¡Esto es lo que me faltaba!.

-Hay mucho más espacio para caminar y entrar al instituto. Ciego -Musité furiosa.

-No quieres problemas conmigo, Parker. Apártate -Ordenó.

-¿Quién diablos te crees tú para decirme qué hacer? -Pregunté acercando mi rostro al suyo. Logré sentir su fría respiración.

-Hija de..

-De perra -Sonreí-. Lo sé, sí, mi madre es una perra sin remedio -Frunció el ceño y apretó sus dientes-. Oh, vaya. El "chico malo" está enfadado -Reí en su cara.

- Sara, vámonos -Murmuró Tris tomando de mi camisa.

-No. Este chico necesita que alguien le enseñe un buen comportamiento.

-¿Quieres sufrir? -Cuestionó él formando su mano en un puño.

-¿Me golpearás? -Reí irónica-. Por favor, que poco hombre eres, Styles.

-¡Sara! -Oí que alguien mencionaba mi nombre y un brazo masculino rodeaba mis hombros-. Vamos ya pequeña -Sonrió alejándome del chico ondeado-. ¡¿Pero qué diablos crees que haces Sara?! -Elevó la voz cuando ya estábamos lo bastante lejos para que nos oyera alguien.

-Deberías dejar de adentrarte en asuntos que no son de tu incumbencia -Bufé.

-Tendrás problemas si ocurre algo desagradable entre Harry y tú. Además, es mi deber como hermano mayor.

-Hermanastro -Corregí rápidamente.

La campana sonó.

-Debo ir a clase. Adiós Liam -Besé su mejilla secamente.

-Adiós.

Quité algunos libros de mi casillero y me dirigí al aula número cuatro. Tomé asiento a un lado de Tris.

-Gracias por ser la mejor amiga del mundo y dejarme sola con aquel chico -Bufó bajando el libro que leía.

-Lo siento. Liam nuevamente -Suspire aburrida.

-Él siempre al rescate de tus casi muertes, Sara -Rió.

-¡Hey!, ¡No soy débil, podía contra él! -Me defendí. Sonreí y me volteé para recorrer el aula con la mirada. No sabía por qué demonios realizaba esta acción.

Frené al encontrarme con los últimos asientos a la izquierda. Allí permanecían ellos, desde que llegué a "Black". Zayn Malik, Louis Tomlinson y por último, Harry Styles. Cualquier estudiante del edificio les llamaría "La pandilla de chicos malos", ya que se rumorea de que han cometido asesinatos entre otras barbaridades.

El fuerte sonido de los tacones que llevaba la maestra Hudson hizo que volteara rápidamente para atender al pizarrón y hacer el saludo diario a ella.

-Buenos días estudiantes -Saludó.

-Buenos días señorita Hudson -Hablamos al unisono.

-Señor Styles, buenos días.

-¿Qué hay Ella? -Harry dijo con desinterés.

-Usted jamás cambia alumno -Suspiró pesadamente.

-Tampoco tú Ella -Continuó él-. Estás igual de vieja como hace cinco años.

La clase completa rió, a excepción de mi.

Era extraño que rieran con algo dicho por Harry Styles. Principalmente guardaban silencio y temblaban en sus asientos. La maestra solo frunció el ceño y comenzó a escribir sobre el blanco pizarrón, comenzando con su aburrida clase.

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