Todo por accidente.

Nunca en mi vida me había sentido de esta forma. Mirarla dolía. Dolía tanto que yo, la persona más insensible del mundo, sentía pena por ella. Era eso posible? Al parecer sí.
Todo comenzó mucho antes de lo que todos piensan. A comienzos del otoño de 2007, la conocí. En ese momento pensaba que era una mujer muy amable, dulce.
Solíamos ir a tomar un café en Starbucks antes de ir a trabajar. No creía que todo fuera a cambiar con el paso de los años.
Nuestras charlas en el trabajo solían ser normales... Hasta que llegó él. Mariela era tan feliz antes del accidente. Ojala esa mujer nunca se hubiera topado con ese hombre.. Fernando se llamaba, si mal no recuerdo tendría 45 años cuando lo conoció. Voy a admitir que Fernando era un buen hombre, su apariencia era de un hombre fuerte y joven para su edad.
Una noche del 2009 empecé a sospechar que había algo raro en él. Ya hacia un año y medio que estaban juntos, parecían una pareja estable, feliz. Pero todo eso cambió.
Mariela llegaba mínimo 3 veces por semana con un moretón, un rasguño u otro tipo de golpe. Inventaba excusas pero con el paso de los días me lo dijo. Noté aquel dolor en su mirada, nunca había visto una mirada como aquella. Ella estaba embarazada.
El mismo día que se lo contó a él, empezó a actuar diferente. Estaba más agresivo, la maltrataba, tanto verbalmente como físicamente..
No lo podía creer en su momento, fue un gran shock. No sabía cómo ayudarla, qué hacer, nada..
Hasta que por fin se me ocurrió algo. Le dije que pidiera ayuda y que lo denunciara. Se negó rotundamente a denunciar al padre de su futura hija, la cual en solo 3 meses nacería.
- Tengo miedo de no poder sola.. es mucha presión. No puedo trabajar y dejarla sola. Quién lo cuidaría?
Esas fueron exactamente sus excusas para no denunciarlo. Le dije que yo la ayudaría como pueda, que íbamos a buscar una solución a eso. Estaba su familia además. No era un problema.
- Y si se pone más violento si lo denunció? Mira si me mata! O al bebé! No no no no.. es una muy mala idea.
No lo denunció... Pero yo sí.
Al enterarse se enojó muchísimo conmigo, y se distanció. Desde ahí mi única forma de saber de ellos era por las redes sociales, o por nuestros amigos en común y el trabajo.
Pasaron tres meses y como ya suponen rompió bolsa. Según me contaron, estaban yendo al hospital y pasó.
Él discutía en el auto, ella lloraba, ninguno de los dos la vió pasar. Pobre niña, tan inofensiva, tan inocente.. Ella no tenía la culpa, por qué a ella?
Manejando por la ruta Fernando se puso agresivo, comenzó a discutir con Mariela, y al no estar en condiciones, su cuerpo expulsó al bebé inmediatamente, debía de haber sido por los nervios y el estrés que ella sentía.. Pobre mujer..
Al ver a Mariela sangrando y en situación de parto, Fernando soltó el volante y una niña que cruzaba inocentemente fue atropellada. No fue algo conciente, ni estaba alcoholizado, pero la atropelló.
Esta niña estaba en terapia intensiva, su cabeza sufrió muchos daños graves, Fernando acumuló dos denuncias, una de la madre y otra mía. Ellos no sufrieron muchos daños por el choque, Mariela se desmayó y él se quebró el brazo.
El bebé murió. No aguantó el choque ni el parto. Ella estaba devastada, por esa misma razón, lo denunció.
-Y después de eso?- Preguntó el abogado de Serena
- Nada que no sea obvio, la policia se hizo cargo y acá estamos, dentro de un sincero juicio.
- Muchas gracias Serena, puede venir la otra testigo
*Llamen a la madre de la mujer* se escuchó.