-Estrés, eso es lo único que parecía describir mi vida ahora, claro, el idiota de Esteban no me ayuda con las maletas, y no, no hablo de las mías, si no de las de él, podrá ser mi hermano pero es un vago, no hace nada, y aparte tiene el descaro de irse a tomar con sus amigos diciendo "esta será mi despedida, hermana cubreme, haz mis maletas plis, te traeré un cupcake de chocolate" ahg, lo detesto, él sabe perfectamente que los cupcakes de chocolate son mi debilidad, es un maldito controlador, no haría nada si por mí fuera, pero en serio necesito chocolate en mi vida...
– Hola bebé— listo. Es el colmo, yo no soy una bebé y mi mamá no ha dejado de decirme así nunca, ni siquiera porque ya tengo 16.
– MAMÁÁ—ok admito que si parezco una bebé cuando chillo por cualquier cosa como... Ahora.
-ah ah, no no no no, no voy a dejar de decirte así, eres mi bebé.— la verdad es que siempre me ha molestado que me digan así, "bebé" pero es mi mamá así que tendré que tolerarlo— Esa es la maleta de Esteban?— Ay no, ay no, ay no, ay no, muerdo mi labio nerviosa, no puedo decirle que sí, aunque debería, pero si lo hago, no me darán mi cupkace, sí "darán" en plural, Esteban tiene un amigo que se llama Adriano y el es muy cizañero, y metiche, además casi siempre aboga por Esteban, me cae mal porque mi cupcake depende de él, ahg.
-De quién? Esteban? Nooooo, él ya empacó sus cosas, pero le pedí prestada su maleta porque me faltó espacio, ya sabes... Él no tiene tantas cosas como yo, y... Eso.— no es por nada pero su cara me dice que no me creyó...
- Sí, Edith, sabes? No te creo, y te diré por qué, numero uno, estamos en el cuarto de él, y tú aquí no tienes nada, además, todo esta desempacado, donde está tu hermano Edith?— sip, lo confirmo, definitivamente no me creyó. Me muevo por la habitación porque estaba en una esquina y ella estaba intimidandome y empezaba a sofocarme.
–Mamá, él... — vuelvo a morder mi labio esta vez mas desesperadamente, miro al suelo esperando una respuesta y...— fue a comprarme un cupcake y dijo que no tardaba, además se fue a despedir de Adriano, lo va a extrañar, y yo le dije que lo iba a ayudar con sus cosas— bueno, en parte todo lo que dije era cierto, porque yo si le dije a Esteban que lo iba a ayudar... Obligada claro, pero lo dije, sólo ignore que esteban si tardaría y mucho, y que además iba a tomar, Esteban no era un alcohólico y sabia beber, además mañana nos vamos y dudo mucho que él se volviera loco porque es muy responsable.
–Lo podré así Edith, si Esteban no llega en 2 horas yo me comeré tu cupcake por mentirosa y además los dos estarán castigados por deberían tener todo listo desde ayer, y estas advertida.— entiendo que mi mamá pueda estar estresada por el viaje, pero no puede comerse mi cupcake solo por eso, es mucho castigo para mí, lo siento.— y recogete el cabello.
Mi cabello es muy largo, dorado y pesado, debería cortarlo porque me duele la cabeza, no recogermelo, 16 años y ni siquiera en mi cabello tengo derecho, mi mamá no deja que me lo corte, ella no entiende que por muy dorado que sea mi cabello yo no soy rapunzel, ojalá lo fuera, y mi cabello tuviese poderes, porque cada vez que me corto o me golpeo, mi piel pálida se ve terriblemente mal, y con poderes podría volver las heridas a su estado natural, pero no, sería súper estresante intentar peinarlo, tardaría mucho, me quedo así, es mejor.
Recogí mi cabello en una cola alta y lo sujete con una liga azúl que tenía en mi muñeca, siempre la tenía, aunque tuviese cualquier peinado y no la necesitara, mi liga azúl estaba ahí, recorrí la habitación para asegurarme de que no hubiera más ropa por guardar, cuando me aseguro de que efectivamente no hay nada cierro la maleta y me dispongo a guardar cuadernos y libros, Esteban tiene muchos libros, él lee bastante al igual que yo, muchas veces leemos juntos pero no siempre compartimos el mismo gusto por algunos libros, él casi siempre opta por leer libros de ficción, y a mí me gustan más que todo novelas policiacas y románticas, yo particularmente nunca he experimentado romance, a pesar de que sí me han coqueteado no he demostrado interés y a la final terminan por aburrirse, no me pasa ser de esas protagonistas de libros que tienen una historia perfecta con el chico perfecto, esta es la vida real, y yo no estoy enamorada de ningún chico perfecto, y aunque lo estuviera no lo estarían de mí, no por mi apariencia física, porque la verdad es que considero que soy bonita, no tengo el mejor cuerpo, pero... No estoy tan mal, es sólo que aveces suelo ser muy aburrida, y no soy muy sociable, en eso culpo a mi hermano, que es muy celoso y no me deja hablar con muchos chicos, él no entiende, yo no soy tonta y sé elegir con quien tener amistades, los verdaderos idiotas son sus amigos, ah, pero con ellos si puedo estar, es realmente estúpido.
***
– Pst, Edith, chiquita, bebé, abreme porfis.
–Esteban deja de ser tan estúpido, quieres? La próxima vez que me digas bebé te dejaré por fuera.
–Mamá se dio cuenta?—me asomo por la ventana para abrirle, tiene suerte de tener su cuarto en el primer piso, yo no podría hacer esas cosas porque seria muy difícil subir hasta mi cuarto— Gracias— dice, cuando logra entrar— y?, se dio cuenta o no?
–Sí, sí se dio cuenta de que no estabas, pero le dije que ibas a comprarme un cupcake y a despedirte de Adriano, y me dijo que si no llegabas en dos horas iba a castigarnos por no tener todo listo, y que además se comería mi cupcake, puedes creerlo? En fin, pasaron las dos horas y ella vino a tocar la puerta y tuve que fingir que estaba hablando contigo, además de buscar unas grabaciones tuyas en la computadora, no sé cómo pero dejo de insistir y creo que me creyó, pero hace un rato dijo que fuéramos a cenar, así que vamos, sólo faltan esos discos por guardar, los vas a llevar?— él en realidad no parecía haber tomado, de hecho se veía reluciente y fresco, y su aliento olía a mentas, lo noté porque estaba muy cerca, para poder susurrar— por cierto deberías cambiarte, para que no sospeche, porque supuestamente llegaste hace dos horas.
–No, esos se los daré a papá y él sabrá si llevarlos o botarlos, yo no los quiero.— Esteban no conservaba muchas cosas, si no quería o no necesitaba algo, lo desechaba— ten tu cupcake, muchas gracias bebé. — le metí una patada por la espinilla, tenía que dejar de decirme así, porque ya me estaba cansando— auch— él se lo busco, que ni me chille.— perdón, en serio muchas gracias, y lo digo en serio, siempre me cubres en este tipo de cosas, te amo.
–Yo te amo más, te veo en el comedor, de prisa, cambiate.— salí de la habitación para darle espacio, y que se cambiara.
Me detuve un momento para mirar la sala y pensar en todos los recuerdos que tengo aquí, iba a extrañar este lugar, había pasado la mayoría de mis mejores recuerdos aquí, pero siempre eran buenos los cambios y yo realmente quería ir, y volver a ver a mis amigas, no hablaba con ellas desde hace mucho tiempo, sttephany es rubia y con ojos verdes, fresa y súper bonita, se parecía a mí, sólo que mis ojos son azules y mi cabello es mucho mas claro, Yuliana es morena y su cabello es extremadamente rizo, me encanta, ella es realmente hermosa, las tres lo somos, y no, no sólo hablo de físico, me gustaba estar con ellas y hablar, saben escuchar y son súper amables, ojalá no hayan cambiado nada.
Después de la cena me duché para irme a dormir, estaba muy agotaba y mañana iba a ser una día largo, lo único que quería era descansar.
————————
+ HOLAAAAAA BEBÉS, como pueden ver la historia tiene oficialmente su primer capitulo, porque como lo prometí, obviamente van a existir bastantes cambios, y me quedaré con partes muy mínimas de lo que anteriormente solía ser "Y... te conocí" porque la verdad es que tengo nuevas ideas, y con lo que iba anteriormente yo estaba realmente bloqueada, espero que les gusten los cambios, les mando un besote, y nos leemos luego babes <3.
ESTÁS LEYENDO
Yo te encontré.
RomanceEn una mirada rápida, fugaz, descubrí mi perdición, te descubrí, tanto tiempo esperé, tantas decepciones, hasta que por fin, pasó Y... Te conocí.