Harry Potter y La Maldicion del Sueño Oscuro.

Cap 4 La Nueva Madriguera

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La nueva Madriguera

- Al fin llegamos!! -exclamó Hermione con gesto de cansancio.

- Oye, no pensé que ir a tu casa fuera tan complicado! -dijo Harry.

- Ni yo! -apoyó Halley.

- Bueno, yo tampoco. Pero que quieren, papá decidió que éste era un lugar seguro -se explicó Ron- Siéntense! Voy por unas bebidas!

Los reproches de Harry, Halley y Hermione, no eran para menos.

Tuvieron que caminar hasta el final del callejón Diagon, viajaron por los polvos flu y salieron en una chimenea en Hogsmeade. Después tuvieron que caminar un largo rato, hasta llegar a una gruta cerca del pueblo, se metieron dentro de ella y caminaron por un largo túnel bastante oscuro. Luego, Ron tocó varias estalactitas con cierto orden y una gran roca redonda se movió, como si fuera una gran puerta de piedra. Entraron y del otro lado salieron debajo de una cascada de agua azul. Caminaron por la orilla, justo detrás de la cascada para no mojarse, tomaron un bote que estaba esperándolos, flotando en la superficie de un gran lago.

Los 3 chicos abordaron el bote y este comenzó a navegar por todo el lago, lo atravesó y finalmente llegó a un muelle. Después de bajar del bote, caminaron otro rato y al fin llegaron a la casa de Ron.

Era una enorme casa, muy bonita. Tenía tres pisos y un gran jardín.

En el interior de la casa, todo era nuevo. Harry, Halley y Hermione, comenzaron a ver todo lo que había alrededor.

En las paredes, había fotografías de todos los Weasley en diferentes etapas de su vida. Todas tenían movimiento. A Hermione le encantó una, en donde se veía a un pequeño pelirrojo jugando con un oso de peluche. También estaba la fotografía de bodas de los señores Weasley. Un par de pelirrojos muy enamorados y muy jóvenes.

En una de las esquinas de la sala, había una mesita de madera que sostenía una flor muy hermosa.

Era un gran girasol. Estaba flotando en el aire y de él emanaba una especie de luces brillantes, alrededor tenía un halo luminoso y estaba protegido por un capelo de cristal.

Los muchachos se quedaron impresionados ante aquella flor tan hermosa.

Hermione se acercó a la flor y con mucho cuidado, quitó el capelo que la protegía, de pronto un olor delicioso invadió todo el ambiente.

- Que hermosa! -exclamó Halley muy impresionada.

En ese momento, Ron llegó con las bebidas.

- Que es? -preguntó Harry.

- Ah, es una flor mágica que papá le regaló a mamá! -respondió Ron.

- Es muy bella! -dijo Hermione, volviendo a cubrir la flor.

- Si, a mamá le gusta mucho! -dijo Ron- Vengan! Vamos al jardín!