La Novia de Ian || Paul Wesley || [Editando]

Capitulo 5 *EDITADO*

Ella se recuesta en mi cama y me observa detenidamente, su mirada no deja ni un espacio sin recorrer de mi anatomía, como era posible que esta mujer me ensendiera tanto con tan solo una mirada, su mirada.

–Sabes que eres demaciado sexy, no debe ser ilegal ser tan candente como lo eres tu –sonrio de lado alzando una ceja– y ahora eso, tus facciones, dios Paul Wesley más te vale que me cogas muy bien hoy.

Suelto una ligera risa y ella frunce el ceño, amo cuando ella se convierte en la ___________ sexy y pervertida, sabia lo que le haria hoy, le haria tocar el cielo, hoy sobre todo, quiero que sienta que soy mucho mejor que mi amigo, mucho mejor, por que si en algo le gano a Ian es hacerla mia de maneras que ni yo mismo habia experimentado, pero con ella simplemente eran mágicas y excitantes.

–Claro que lo haré –me acerco a la cama donde ella sige observando mi torso desnudo, le tomo la boca fundiendonos en un exquisito beso, le robo un gemido de sus labios cuando uno de mis dedos entra en su sexo, vuelve a gemir cuando lo saco rápidamente y dejo de besarla levantándome de su cama.

–Eres un maldito –dice con la voz entre cortada, suelto una carcajada y la miro haciendo muecas, vuelvo a reír y desabrocho mis pantalones tranquilamente.

–Tranquila nena, se que soy irresistible –quito mis pantalones y saco de la bolsa trasera un condon, me acerco a ella que sigue con el ceño fruncido– te prometo que le espera valdra más que la pena.
Le sonrió de la lado y tomo sus mejillas entre mis manos y solo doy un roce de nuestros labios, vuelve a gruñir en desesperación, me recorro a su cuello tomando de su cuello ese olor embrujante, suaves caricias a sus piernas desnudas mientras disfrutó de saborear su piel, ella se remueve bajo de mi apretando su cuerpo al mío, jalando mi cabello con sus manos.

Me permito avanzar más abajo de cuello, pasando por sus pechos totalmente expuestos a mi, admiro su cuerpo, el mismo cuerpo que pienso disfrutar hasta la ultima parte.

Es totalmente hermosa, su cabello esta tan revuelto y su rostro con un rubor adorable, sus sonrojos provienen de que me ha sorprendido viéndola sin disimulo, beso sus labios ligeramente.

Mis manos totalmente inquietas acarician sus largas piernas, despegó mis labios de los suyos dandole un ligero ultimo beso, para seguir mi deleite con su demás cuerpo, beso desde su pechos hasta su vientre.

La observo y le doy una ligera sonrisa, bajo hasta su sexo y abriendo un poco sus piernas le vuelvo a sonreir.

Doy suaves besos a su muslo derecho, el contacto de mis manos en su pierna hace que se estremezca y yo disfrute de su suave piel en contacto con mis manos, un beso el muslo izquierdo y siga hasta su sexo rozandolo con mis labios con ansias, logro mi primer objetivo, hacerla remover en su lugar mientras gruñe por más, sus gemidos son la más hermosa melodía para mis oídos , siento el poder correr por mis venas, puedo hacerle lo quiera cosa que me resulta condenamente excitante, lo dijo afirmando al ver el grave problemas de mis boxer que me pide a gritos cogermela ya mismo, pero tengo que aguantar, quiero disfrutar y que ella disfrute.

Poso mi vista en ella y cuando escucho su respiración controlarse me doy a mi segunda tarea planeada, "siempre tenerla sin aliento", poniendo manos a la obra mi lengua se unde en su exquisito sexo que esta más que listo.

–Maldita sea Paul, eres un desgraciado –mumura con los ojos cerrados apretando las sabanas blancas de la cama, sus manos estan en puños y de su garganta solo salen gemidos agudos y exitantes para mi.

Provoco su furia-placer de nuevo, y es que mi lengua astuta y muy...muy maldita comienza a lamer todo lo que encuentra a su alcance. Es que enserio es una maldita, solo lame e impregna con mi saliva toda su femidad, pasando por sus plieges que se encarga de saborear a la perfección, recorriendo mas abajo chupando sus dulces nectar, su sabor quedandose en mis labios y dejandome soberearlo asta el ultimo rastro.