Conozcan a Josh

Capítulo VI: It's (Morning Edition) Showtime!

Josh y Oliver vieron la terrible recepción de la comedia del primero por parte de los medios, y las consecuencias que eso acarrearía eran potencialmente letales ¿Cómo resarcir lo desecho? Oliver tenía una simple idea: presentarse en televisión para una entrevista, y ciertamente, no sobraban las ofertas de los medios; toda la mañana habían estado tratando de comunicarse tanto con él como con el propio Josh, pero sin duda, sea cual sea la decisión que decidan tomar, algo era una constante: se necesitaba manejar este escenario de la manera más fría y calmada posible.

—Oliver ¡Esto es tú culpa, maldita rata polaca! —Josh le gritaba después de arrinconarlo y amenazarlo con una silla ovalada que se robo del set de "Hombres de Negro VI: ¿Acaso a alguien le importa?"

—¡Quieres calmarte! ¡Tengo familia, una esposa, hijos!

—¡Tú no tienes familia!

—¡Tengo dos amantes, otros clientes...la chica de Transformers quiere dejar de quitarse la ropa en las peliculas! ¿Quién verá por ella Josh? ¡¿QUIÉN?!

Josh se tranquilizó un poco, en parte por lastima y en parte porque...

—¿Conoces a la chica de Transformers? —Josh preguntó

—Sí...

—¿Me puedes dar su número?

—Como gustes, pero primero: Josh, amigo, suelta la silla...

Josh aceptó aquella condición, se calmó y dejo la silla a un lado.

—Ahora, vamos a ser adultos y profesionales. ¿Estás dispuesto a escucharme? ¡Tengo un plan! —dijo Oliver

—Mira, sólo te recuerdo que ninguno de los has sugerido ha funcionado hasta ahora.

—Todo depende del ángulo en que lo mires; después del accidente con caballos, Christopher Reeve se volvió una figura aún más querida que un simple actor.

—Sí, pero no estoy dispuesto a perder la movilidad; menos de la cintura para abajo.

—Bien, eso arruina el "plan A"...pero, hay otra posibilidad.

—¿Cuál? ¿Acudir a la prensa? Sabes muy bien como son: me van a acorralar con sus preguntas difíciles, sus luces fuertes y sus investigaciones en antecedentes penales...

—Lo sé, pero creo tener la ayuda de alguien a nuestro favor...

Oliver tomó su celular, y realizó una llamada a aquella persona con quien podría contar siempre: su última amante en turno, y esa en cuestión era...

—¿Oliver? ¿Eres tú? —Samantha Delacroix respondió en su oficina a través del intercomunicador.

—Hola Sammy, ¿cómo esta mi pelirroja favorita?

—¿Qué quieres? —Samantha respondió cortadamente.

— ¿Qué sucede? ¿Por qué me contestas en ese tono?

—Bueno, no me llamaste la mañana después de nuestra "reunión", y cuando un hombre de pronto llama varios días después, he descubierto que es por una de dos cosas: quiere algo, o me informa que necesito hacerme un análisis por enfermedades venéreas.

—¡Momento! ¿Tú tienes enfermedades...?

— ¡Claro que no Oliver! Pero cuando me mude a esta ciudad, me dijeron que no me sorprendiera...en fin ¿necesito hacer cita con mi doctor o...?

—No, no, mira: probablemente ya escuchaste sobre los desafortunados acontecimientos que ocurrieron ayer en cierto club de comedia...

— ¿La reverenda estupidez de tu cliente al hacer comentarios racistas contra una comunidad que es más de la mitad en la ciudad dónde vive? Sí, creo que algo escuché por ahí...—Samantha dijo mientras se servía una copa de brandi.