Bad Boy, Innocent Girl

29: Vete

Capítulo Veintinueve: Vete

Park Jae Beom

Domingo 13 de octubre, 2013

Cuando entramos a la casa de nuevo veo como los Sres. Song están asomados en la ventana mirando a quien sabe qué.

La Sra. Song se voltea y me ve con preocupación

-¿Sucede algo? -pregunto preocupado.

-Afuera... -comienza a decir, pero es cortada de golpe cuando tocan la puerta.

Esta vez es el Sr. Song quien se gira.

-Toma a Ryu, Nina, vete con Jay y olvida que alguna vez fuimos tus padres. Esto será lo último que haré por ti -se gira hacia la Sra. Song con un rostro serio. -Llévalos por el túnel, ya.

La Sra. Song asiente preocupada mientras que Nina los ve confundida, yo ni siquiera lo pienso, es algo que habíamos hablando tiempo atrás, ellos me habían contado su versión de la historia y al parecer sabían que esto ocurriría en algún momento.

Corro por las escaleras y tomo todo lo que puedo en un bolso para Ryu, aunque está dormido lo tomo apegándolo a mi pecho y corro hacia abajo otra vez.

Nina aún sigue confundida y petrificada mirando a su padre.

-Puedo detener esto, puedo irme con ellos y así ustedes serán felices -trata de decir.

-No, Nih Nah, tú mereces algo mejor que esa vida.

La puerta vuelve a sonar y esta vez no es algo muy agradable, los golpes van aumentando desesperando el momento.

-Vámonos ya -le pido a Nina tomando su mano.

-Pero...

-Pero nada pequeña -dice la Sra. Song tomando su rostro, ella está llorando, pero solo se encarga de secar las lágrimas que salen de su hija. -Todo estará bien y tú podrás ser libre de tu pasado.

La puerta comienza a temblar cuando una voz grave y fuerte se alza en la casa.

-Sé que están ahí, derribare la puerta -gritan desde afuera.

-Es Frank -dice Nina. -Viene por mí.

-Vete, hija, vamos vete.

La Sra. Song toma la mano de Nina obligándola a caminar hacia la puerta trasera, pero en vez de salir abre un pasadizo que está escondido en el suelo.

-Ten una buena vida, mi niña -dice la Sra. Song besando la frente de Nina.

La obliga a entrar al túnel mientras que yo me acerco a ella escuchando los gritos de la puerta otra vez.

-¿Estarán bien? -pregunto preocupado.

-Solo procura cuidarlos ¿De acuerdo? Cumple tu promesa, Jay, confío en ti.

Besa la frente de Ryu y luego mi mejilla, al tiempo en que me adentro al túnel finalmente la puerta de entrada se abre y solo por instinto tomo la mano de Nina y comenzamos a correr.

No me detengo aun estando exhausto con Ryu en mis brazos y a ratos tirando de Nina, pero cuando un disparo se escucha a lo lejos parece que todo se detiene.

-Mis padres -llora de pronto Nina. -Necesito volver.

-No -la detengo. La tomo de los hombros como puedo y la obligo a mirarme. -Necesitas pensar con claridad, por favor, por Ryu -ruego.

-Pero son mis padres, y lo último que les dije fue pura mierda, los herí, y ahora ellos podrían... -niega con su cabeza cerrando los ojos. -Soy la única que puede detener esto, por favor.

-No, tienes que estar bien, es mi deber protegerte, no harás esto, no arruinaras todo lo que ellos planearon para salvarte, ellos te amaron, aman y te amaran, NihNah, no los decepciones tomando decisiones sin pensar.

-Mierda -masculla.

-Debemos irnos, nos encontraran.

Trato de comenzar a correr otra vez, pero Nina se detiene otra vez.

-Nos perseguirán toda la vida, ellos nos buscarán, no acabará nunca, Jay, viviremos arrancando.

Suspiro pesadamente para volver hasta donde está ella, tomo su rostro como puedo mientras Ryu se remueve en mi pecho.

-No importa la forma en que vivamos si es que estamos juntos, los tres como familia, todo estará bien, te lo prometo.

-Jay...

-Nada, Nina, todo estará bien, ahora debemos alejarnos de aquí para que pueda cumplir mi promesa. ¿Podrías ayudarme con eso? -pido suplicante.

Me mira por largos segundos, pero al final asiente, toma mi mano y comenzamos a correr otra vez. Cuando llegamos al final del túnel subimos hasta darnos cuenta que estamos a solo unas calles de los buses.

-Vamos, iremos a Seúl con los chicos, ellos nos ayudarán y luego iremos a un lugar más seguro -digo tirando de ella.

Ryu me mira con los ojos muy abiertos, observando todo, pero no dice nada.

-Meteremos en problemas a los chicos -dice Nina.

-No, solo será una noche para que podamos organizar todo, no ocurrirá nada peligroso, Nina, confía en mí.

-Intento creerte, pero...

-Pero nada, vamos.

Tiro de ella hasta entrar en el terminal de buses, tomamos los pasajes para la primera salida y cuando ya estamos en él por fin siento que puedo suspirar en paz, aunque no me lo permito del todo, ahora tengo a cuestas todo lo que no quise en mi vida y todo por proteger a una mujer que al parecer está hecha un manojo de nervios.

Miro a mi lado a Nina quien observa hacia el frente pareciendo recitar desenfrenadamente un rosario, mese sus manos una y otra vez. Ryu va mirando por la ventana las luces que se ven de los autos, así que aprovecho de estirar mi mano hasta las de Nina, ella encuentra mi mirada con su labio temblando y los ojos rojos por retener lágrimas.

-No hay forma de que esto se detenga, Jay -dice temblando. -Ellos no acabarán hasta que te tenga muerto y a mí, obligada a estar con ellos.

-¿Cuál es el afán de Frank de tenerte? Tiene a su hijo, ¿Por qué te necesita a ti?

-Quiere dejar todo entre familia, quiere que el dinero no se esparza en manos equivocadas -responde como si fuera una ley.

-No te quiere como hija, solo te quiere para su beneficio.

-Él dejo de sentir cuando la mujer que decía amar lo odió, fue la primera que no le dio lo que él quería por las buenas y yo estoy siguiendo las mismas acciones que mi madre.

Cierra la boca apretando sus labios con fuerza, baja la cabeza y su cuerpo comienza a temblar haciendo que Ryu lo note y se gire a verla.

-Mamá -llama Ryu a Nina estirando su cuerpo.

De un momento a otro Nina se tira a los brazos a de Ryu y cómo puedo la sostengo mientras se abrazan. Escucho sus sollozos haciendo que las personas que van alrededor nos presten atención. Trato de ignorarlos pasando mi mano por la espalda de Nina.

Deben haber sido meses horribles para que haya quedado tan afectada, mientras que yo estaba dándome la vida de buen padre ella seguramente estaba sufriendo viendo la peor cara del tráfico de drogas.

La comprendo y este es momento en que necesito ser su pilar, su contención, para así darle un futuro aunque sea un poco extenuante, necesito prometerle un buen futuro, una esperanza, algo en que el destino no diga que todo está marcado.

Una nueva opción.

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Ufff siento que no respiro mientras leo. Ayayayai 😭 ojalá no ocurra nada grave.

Changsegi