Se dice que todos poseemos una luz en nuestro interior, algunos la describen como una flama, otros la llaman esperanza, yo le digo sol. La razón se encuentra en que el sol ilumina toda nuestra existencia al igual que aquella luz, hace que las personas avancen en sus vidas y progresen debido a ello, pero yo... nací sin el.
Nunca, desde que tengo memoria, he sentido que debo progresar, ni siquiera el mas mínimo anhelo de seguir viviendo, simplemente no siento nada. Estoy vacío, no hay siquiera tristeza en mi. Hasta ahora siempre habían sido mis padres quienes con total autoridad decidían, sobre mis siguientes pasos, pero... no están mas...fue repentino pero... están muertos.
¿ Que debería hacer? . No sabia donde debería ir, a que debería aspirar, todo eso, todo era decidido por mis padres y ahora que ya no están; pienso que no hay nada que me ate a este mundo, que no hay nada que me haga seguir estando en un lugar vacío.
La decisión correcta seria morir lo antes posible.
Miles de recuerdos me invaden a medida que pongo en marcha mi plan, miles de recuerdos carentes de sentido que por alguna razón llegan a mi como si hubieran sido la gran cosa. Aun así no me siento flaquear y me dispongo a entrar al elevador. Exacto, saltare de un edificio, el mas grande de la zona, un edificio comercial, veinte pisos de altura, perfectos para acabar todo de un solo golpe y sin dolencias.
Cuatro pisos arriba en el elevador alguien decide subir, no me molesta..
- Oye, ¿ te encuentras bien?- pregunta, pero yo no le contesto y en su lugar sigo enfocando la mirada en el piso. las puertas se cierran y empieza a andar de nuevo el elevador.
- veo que no te gusta hablar- dice mientras repentinamente cruza su rostro con el mío haciéndome retroceder hasta dar con la pared del ascensor y de paso verme obligado a observarlo. Un joven alto, rubio y fornido poseedor de unos ojos bastante peculiares.
- que quieres- digo secamente, no deseo alargar aquella conversación forzada
- veo que si puedes hablar- comenta alegremente - y yo aquí pensando que tal vez eras mudo- dice formando un extraño puchero- dime, tengo curiosidad, ¿ porque te diriges a la terraza?- termina de decir esta vez usando un tono serio. por primera vez me siento acorralado.
El elevador llega al piso diez.
- voy a admirar la vista- parte de ello es verdad, ya no quiero decir mas pero sus ojos me miran acusadores y me estremecen, no quiero seguir la conversación pero mi boca no me obedece- quiero confirmar algo.
- en otras palabras, tu vas a saltar- sentencia dejándome sorprendido, no puedo hablar, mi silencio lo termina por confirmar. Este extraño sabe leer entre líneas.
El elevador llega al piso trece.
- ¿ intentaras detenerme?- pregunto al final.
- Ciertamente no es algo que sea de mi incumbencia, pero puede serlo si así lo quieres, solo toma mi mano- el extiende su mano hacia mi justo cuando llegamos al quinceavo piso y las puertas se abren, esta es su parada. yo solo lo miro un tanto extrañado y sorprendido, No se que decir, mis propias manos tiemblan y parecen querer tomar la oportunidad guiadas por aquella expresión de confianza en el rostro del muchacho. sin embargo mi conciencia es mucho mas fuerte, y antes de que se cierren las puertas de nuevo, el se ve obligado a bajar del ascensor.
Una extraña culpa me invade mientras las puertas se van cerrando, sin pensarlo mas decido extender mi mano hacia él en el ultimo segundo pero ya es tarde. las puertas están cerradas y el elevador sigue su camino, y junto a el mi resolución vuelve a su estado normal, como si nunca hubiera tenido esa conversación antes...
ESTÁS LEYENDO
Miritama: Anhelo el sol
Fanfictiontodas las personas poseen su propia luz o como gusta decirle tamaki, su propio sol. ¿porque tamaki parece no poseerlo? oneshot miritama historia 100% original