Internado Zodiacal

Capítulo 2

Narra Leo:

Después de pasar toda la tarde en la habitación de Géminis y con ahora mis nuevos amigos mejor me fui a mi cuarto, eran las 10:24 y en cualquier momento pasaría el maestro inspeccionando que estemos todos en nuestros cuarto.

-Hey.- Saludó Sagitario al verme entrar por la puerta.

-Hola.- Le dije mientras me sentaba en mi cama.

-¿Qué tal esa mini reunión? ¿Hiciste nuevos amigos?- Preguntó guardando su teléfono.

-Sí, hice un par.. Ah oye ¿Te puedo preguntar algo?- Le dije mientras abría una botella de agua.

-Dime.- Me dijo mientras el bebía de otra botella.

-¿Conoces una tal Libra?- Pregunté y al finalizar la pregunta este escupió el agua nervioso.

-¡¿LIBRA?! ¿Libra qué?- Preguntó alterado.

-Creo que era Benson.- Le dije con duda.

-Bueno, digamos que he hablado con ella.- Dijo de una manera en la que obviamente era obvio que mentía. -¿Estaba ahí contigo y tus amigos? ¿Preguntó por mi? ¿Hablaron de mi?- Preguntaba muy alterado mientras me agitaba de los hombros para que le respondiera.

-Tranquilo..- Dije quitándole las manos de encima de mi. -No, no estábamos hablando de ti.-

-Ahh..- Dijo más tranquilo volviéndose sentar en su cama. -¿Entonces por qué me preguntaste si la conocía?-

-Ella me preguntó cuál era el nombre de mi compañero de cuarto, le dije tu nombre y se comportó como loca, igual que tú justo ahora.- Le dije tomando de mi agua. -Y después huyó.-

-Dios, no sabía que ella estaba aquí.-

-Dime qué pasa entre ustedes.- Dije suplicando.

-Bueno pues, es una larga historia.- Dijo nervioso.

-Sagitario, somos compañeros de cuarto, tenemos toda la noche.- Dije obvio.

-Es que, bueno es que ella es un poco malvada y siempre me hablaba mal y así, pero yo por alguna razón la seguía queriendo, y pues le dije que me gustaba y no me dijo nada, después de unas semanas seguimos actuando como si no hubiera dicho nada pero el día de nuestra graduación ella me robó un beso y cuando llegué a mi casa me había bloqueado de todas mis redes sociales y desde entonces no volvimos a hablar.- Dijo triste.

-¿Enserio?- Pregunté asombrado.

-Sí, ¿crees que yo hice algo mal?- Preguntó triste.

-Por Dios, claro que no.- Dije seguro. -Las mujeres son muy muy raras aveces y supongo que como te robó un beso se sintió avergonzada o se arrepintió o quizá solo quería que le rogaras.-

-Sí, puede ser.-

-¡Todos apaguen las luces y a dormir!- Se escuchó un grito desde el pasillo, supongo que era el maestro que se encarga de ver que nadie haga ruido.

-Mejor durmamos, no pienses en ella, no merece que le ruegues.- Dije animándolo.

-Moriría si estuviera en mi mismo salón.-

-Ojalá y no, buenas noches.- Dije apagando la luz.

-Buenas noches.- Dijo este acomodándose bajo las sábanas de su cama.

Pobre Sagitario, no lo conozco mucho pero me agrada y no creo que se merezca sufrir por una mujer que no sabe lo que quiere.

Yo jamás me enamoraré.