En un latido [ChanBaek / BaekYeol]

Capitulo Único

BaekHyun llegó corriendo hasta el edificio de su facultad, muy temprano en la mañana, como venía haciéndolo cada día desde hacía un poco más de un año. La razón era simple, sencilla y al mismo tiempo, complicada y atemorizante.

Escuchó el sonido hojas y ramas crujiendo detrás de él, provocando que se lanzara hacia los matorrales que bordeaban el camino hacia su facultad. Los arbustos solían ser sus más grandes cómplices cada mañana, especialmente cuando ese momento llegaba inminentemente a su rutina mientras observaba a través de las hojas.

Alto, ligeramente fornido y con su característico caminar confiado que siempre le acompañaba mientras se paseaba por todo el campus universitario. Park ChanYeol era el capitán del equipo de baloncesto de su facultad; era todo lo que cualquier persona pudiese desear. Inteligente, atlético, amable y considerado.

También, fuera del alcance de BaekHyun.

No era un secreto para él, que el alto chico de cabello azabache nunca sería capaz de corresponder sus sentimientos por más que el corazón de BaekHyun se acelerase cada vez que el tipo estuviese a menos de veinte metros a la redonda cerca de él. No obstante, para el más bajo era suficiente el ser capaz de observar a ChanYeol cada mañana desde su lugar seguro, rodeado por las confidentes hojas de los arbustos y la dureza de los viejos troncos de ficus que yacían sobre todo el campus.

El gigante solía tener esta especie de aura que hacía vibrar cada fibra en el cuerpo de BaekHyun; con su porte erguido mientras sostenía el libro que leía en su diestra y lanzaba una manzana al aire con la contraria, atrapándola fácilmente mientras hacía su camino hasta su respectiva aula.

El pelirrojo no pudo evitar soltar un lamentable suspiro mientras apoyaba su rostro sobre una de sus manos, observando como ChanYeol avanzaba con cada paso que daba, cada vez más cerca de la entrada del viejo edificio.

Subió hasta una de las ramas del árbol más cercano, golpeando su cabeza estrepitosamente en el trayecto y llamando torpemente la atención de todos alrededor, pero sus ojos solo podían observar a ChanYeol y un temor se instaló en lo más profundo de su pecho, haciendo que su corazón se acelerase aún más y preguntándose cómo es que aún no sufría un ataque cardiaco.

Logró esconderse detrás del tronco rápidamente y esperó un tiempo prudencial para poder asegurarse que ChanYeol había seguido su camino y así era. El alto había continuado con su tranquila caminata, sumamente concentrado en su lectura.

BaekHyun sentía como si su corazón había salido finalmente de su pecho luego de aquella larga y exhaustiva carrera que llevaba teniendo después de un largo año. Lo creía así porque no era capaz de controlar su cuerpo por más resistencia que pusiese.

Sus pies lo llevaron rápidamente más cerca del capitán de baloncesto, observando cada detalle de la espalda ancha y brazos trabajados que poseía el tipo. BaekHyun tragó grueso, preguntándose como sería el ser estrechado entre el cuerpo del hombre. Sacudió su cabeza reprendiéndose por siquiera permitirse aquellos pensamientos y se asustó nuevamente cuando sus pies se levantaron abruptamente, echando una carrera hasta posicionarse detrás de ChanYeol, quien seguía sin percatarse de su presencia.

Observó la manzana que era lanzada al aire y era atrapada por las masculinas manos de ChanYeol en un trance, como si su vida dependiese de eso.

¿Cómo se sentiría estrechar la mano de ChanYeol?

Y en un abrir y cerrar de ojos, su mano había tomado la del gigante en el momento preciso en el que la fruta debía hacer su retorno hacia su dueño. Se ganó la mirada sorprendida del gigante al mismo tiempo que sentía su rostro teñirse de escarlata violentamente.