Keep Me Away (Henjei fanfic)

La maldita luz naranja

- Herman, Herman, venga ya, despierta – dijo una ronca voz, que hizo que comenzara a despertarme

- ¿Qué quieres? – dije haciendo un puchero y revolviéndome en la cama, dándole así la espalda y con los ojos cerrados

- Me voy a ir, para que no te preocupes si no me ves después cuando suene tu despertador, ¿sí? – dijo la voz entonces, acariciando con sus labios mi oído, lo que hizo que me estremeciera del gusto que me dio que lo hiciera

- Hm... - dije haciendo un puchero y abriendo los ojos, girándome hacia Alex por fin – Se supone que deberías haberme dado los buenos días – dije lloriqueando

- ¿Y cómo se supone que se da eso? – dijo entonces riendo, ante lo que puse una sonrisa socarrona, sin querer perderme su reacción

- Una mamada de buenos días, ¿quizás? - dije entonces, ante lo que Alex abrió mucho los ojos, escandalizado, y me tiró la almohada en la cara

- Eres un puto cochino, no debí haberte despertado – dijo chillando mientras comenzaba a salir de la habitación

- Aleeeeeex – dije alargando su nombre, mientras hacia un puchero y me sentaba en la cama - ¿No me darás un beso de despedida siquiera?

Él se giró apenas unos momentos para mirarme con una ceja elevada

- No, por haber sido un cochino – dijo intentando mantenerse serio, aunque no lo consiguió, pues una pequeña sonrisa escapó de sus labios

- Sabes perfectamente que estaba bromeando – dije, ante lo que él rodó los ojos y se acercó a mí

Depositó un casto beso en mis labios y rápidamente fue a huir, pero yo, perfectamente consciente de lo que él tenía pensado hacer, agarré con fuerza sus caderas, obligándole a caer encima de mí. Una vez que quedó totalmente tumbado encima de mí, ambos reímos porque nos habíamos dado un pequeño golpe durante el proceso

- Eres un idiota – dijo él entonces, revolviéndose en mis brazos – Me di en la cabeza. En la cabeza. Así me podrías dejar tonto, ¿lo sabias? – dijo entonces mirándome y haciendo un pequeño puchero

- Oh no, no lo sabía. No es como si estudiara medicina – dije entonces sarcástico, ante lo que me dio un suave golpe en el hombro, aun con el pucherito en los labios

Le miré dolido durante algunos segundos, tras los que ambos reímos. Luego me volví a acercar a él para darle un beso más profundo esta vez, que él recibió gustoso. Luego deposité un suave beso en su cabeza, mientras acariciaba sus rizos suavemente

- Me encantaría quedarme aquí Herman, de veras – dijo separándose un poco de mí y acariciando mi mejilla – Pero de veras que me tengo que ir

- Vale – dije suspirando pesadamente y dejando que se fuera

- Nos vemos después – dijo a punto de cerrar la puerta

- ¿Vendrás por la tarde? – dije con una amplia sonrisa

- Lo más seguro es que si – dijo entonces, asintiendo con una sonrisa, tras lo que se fue

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- Woah, te veo mucho más guapo hoy, ¿algún motivo oculto para ello? – dije elevando mis cejas mientras me acercaba a Alex, sentado, como siempre, a mi derecha

Estaba en su pose habitual, un pie sobre la silla, la parte anterior de su muslo pegado al pecho y la rodilla derecha mirando al techo. Sobre esta se apoyaba su antebrazo derecho y mordisqueaba un lápiz distraído, mirando hacia el frente