R&M 1: Un ser inerte.

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NARRADO POR LEVI ACKEARMAN
El reloj seguía su ritmo segundo por segundo, el ruido era molesto para mis oídos por lo que decidí por mí mismo apagarlo. Volví mi mirada a aquel cielo oscurecido suspirando mientras reflexionaba aquel sacrificio de parte de se individuo, Eren Jeager. Ese niño solo se caracterizaba por poseer ese poder del titán cambiante, pero debo admitir que me atrajo más por aquel odio y deseo de querer aniquilar a todos esos seres y cumplir con la venganza y los sueños de esas 2 personas cercanas, Mikasa y Armin. Ahora es reconocido como héroe para todos aquellos que lo conocieron y aquellos que fueron salvados, y siento un agradecimiento de que consiguiese este paz en esta nación.
Hace 2 meses conseguimos terminar con este maldito ciclo infernal ensangrienta derrotando a los partidarios de Mare y abrir los ojos de la cruel idea que han sido sometidos a todos los erdianos que residían también entre las murallas de Mare.
La gente llama paz a todo este silencio diario, pero para los de legión de reconocimiento aún tenemos un gran trabajo que realizar. Los únicos sobrevivientes que habían sido de la tropa de recluta 104, Sasha, Connie, Jean, Armin y Mikasa, fueron ascendidos de puesto. Hanji siguió siendo el comandante. Este paz sólo reside para los habitantes de estas tierras. Cabe mencionar que derrumbaron la gran parte de las murallas de esta isla solamente conservando una quinta parte, para recordar nuestro pasado y evitar cometerlo por una segunda vez. El terreno comenzó a extenderse, la productividad aumentó y los ciudadanos recuperaron sus viviendas pérdidas. Historia siguió siendo nuestra reina, y comenzó a firmar tratados con otros países.
El deber actual de la legión de reconocimiento cambió, ya no habrá más sacrificios y muertes causados por esos desagradables y asquerosos titanes. Ahora hemos cumplido con nuestro antiguo misión, ya hemos liberado las alas, ya somos libres por estas tierras. Pero todo está tranquilidad solo resistirá aquí, en la isla Paradis y parte de la antigua Mare. No podemos bajar la guardia en ningún momento por lo que ahora nos encargamos de los asuntos de exteriores, negociaciones y proteger estas tierra junto a Historia. Tal vez sea un poco raro, pero extraño esos días de expedición, al menos para salir e ir en busca de algo y no sentarme en esta maldita silla tan dura escribiendo y leyendo todos los textos, me aburre. Estúpido Erwin, si tan solo hubieras resistido un poco más hubieras sabido el final o tal vez lo conoces en el otro mundo que dicen.
-Anda Levi, ¿ya has leído todo ese papeleo?- me intervino Hanji.
-Dime cuatro ojos, ¿porque esto no lo haces tu?- le pregunté molesto.
-Prefiero encargarme sobre temas relacionadas con las investigaciones y los avances tecnológicos,experimentos. Después de todo este país necesita una buena reforma.
Suspiré mientras pronunció la ultima palabra, su cabeza está hecha de experimentos o que. En la puerta se escucharon pasos hasta que golpeó la puerta dicha persona.
-Buenas tardes capitán, Armin Arlet, quiero hablarle sobre un asunto en concreto.
-Entra.
Ese muchacho como siempre lucia como un niño inocente pero al igual que todos, sus cerebros fueron lavados por esas memorias y recuerdos que marcaron su personalidad actual. No hay que subestimar a este niño de aquí, gracias también a sus estrategias pudimos lograr este paz parcial.
-Oh...Armin, no te he visto desde esta mañana, ¿Donde te metiste?.- interrumpió Hanji mientras quería preguntarle sobre ese asunto.
-Fui a visitar a Historia, ella me pidió que viajara con Jean por los 5 principales países que me mencionó para poder empezar a fortalecer y consolidar esta paz entre nosotros.
-¿y Mikasa?- preguntó Hanji con un tono preocupada. Unos segundo después vi como la cara de aquel niño comenzó a ser más entristecido y preocupado.
-Estoy preocupado por ella, aún no cree que Eren haya dejado de existir en este mundo. Además, cada día que entro en su cuarto luce más pálida y esbelta, no parece a la Mikasa que conocía antes fuerte y valiente, si sigue así me preocupo por su estado de salud. ¿Cree que hay alguna medicina para ello?
-No sabía que esta Mikasa escondiera esta parte tan débil- respondió Hanji preocupada- Come muy poco de lo que le llevamos a su cuarto además de que no sale al exterior. Antes no comíamos bien y nos bastaba cualquier alimento del día aunque nuestro querido estomago pedía más y ahora que todo es estable...
-¿Pero quien se cree que es esa niña? No le llevaréis comida a ella, así ahorramos de tirar toda esa comida que desperdicia. Que muera de hambre- estaba preocupado por ella pero a la vez me sentía molesto por el desperdicio de comida.
-Deja de esconder lo que hay detrás de esa mirada sé que estás preocupado por ella- me miró cuatro ojos con una sonrisa leve mientras se dirigía su mirada a Armin- No te preocupes yo le cuidare, puedes estar seguro durante tu deber. Si ocurriese algún incidente con Mikasa te contactaré lo antes posible.
Salí de aquel sala, pero no sabía a dónde dirigirme después. No sabía lo que tenía que hacer en ese momento, y sin saberlo pasé por la puerta de Mikasa. Ciertamente no soy una persona que le agrada manifestar otro tipo de sentimientos como añoranza, alegría....hasta el amor. No me gusta vivir ya está asquerosa vida, pero tampoco voy a renunciar las muertes que causé por mí. Pensé aquel día en desaparecer con mi madre y morirme de hambre, pero la vida no me dejó hacerlo y mi corazón pedía ayuda para seguir viviendo. Aún sigo preguntado, ¿que será de mí en un futuro?.
Después de unos minutos enfrente de la puerta de esa niña, pensé en aprovechar la ocasión para sacarle de esa aura oscura que ha sido sometida por ella misma hace 62 días exactamente. Abrí la puerta y pude contemplar lo oscuro que estaba el dormitorio, la visibilidad era nula, pero pude localizarla por esos sollozos que comenzaron en un tiempo atrás. Me dirigí hacia las cortinas mientras tocaba la pared para no tropezarme con nada. Los rayos de luz al fin pudo traspasar esos cristales sucios que había. El olor era desagradable, la habitación necesitaba ser ventilada, es estar en una antigua prisión sin serlo pensé. Me acerqué a aquella figura cubierta por manto y una bufanda roja en la parte superior.
-¿Cuando piensas limpiar y ordenar todo esto?- le pregunté seriamente, pero aún no pude recibir su respuesta. Los sollozos continuaban, al parecer no quería hablar.
-¿Cuando piensas asearte?- insistí- Estas hecha una basura, de hecho ahora ya no tienes tanta utilidad sin titanes, por lo que puedo hacer lo que quiera contigo.
-Eren...- pronunció al fin mientras sollozaba entre mantas. El vocabulario de esta niña al parecer solo está comprendida por Eren.
-Ya no está.- le dije en un tono relajado.
-Mentirosos, él no puede morir ahora...
-Veo que lo comprendes, no puede morir ahora porque ya no está aquí- le dije en respuesta a aquella afirmación.
-¡Cállate! No juegues conmigo- Mikasa estaba enfurecida por aquel comentario que realice pero no me molestaba, de hecho....
-No tengo tiempo para estupideces, ¡Sal de allí!- le grité. Una figura fue descubierta rápidamente de la manta y se acercó a mí, mientras que por la gravedad nos caímos al suelo. Esta niña había perdido peso, no sentía nada aunque estuviese encima mío.
-¿Que tramas?- le dije frunciendo mi ceño. No conocía su actual objetivo, y perdió su razón en aquel momento.
-¿Ya no existe? ¿Me dejó sola? ¿Que hice mal? No cumplí con mi deber, soy la peor pe....- sus lágrimas caían sobre mi cara, pude observar el dolor a través de ella con claridad, pero aún no encontraba ese valor de mostrar afecto y compasión.
-¿Sabias que es un héroe para esta nación?- le respondí mientras me acerqué un brazo a mi frente- Ahora es admirado como un héroe que nos ha salvado de este ciclo sin fin.
Mikasa cayó hacia mi pecho para seguir llorando, me desagradaba aquella situación, lo detestaba, estaba sucia junto con la habitación, pero... conocía aquel situación en el pasado.
-Deja libre esta tristeza- le dije.
-¿Libre?
-Déjalos escapar y no lo reprimas más, ¿o piensas convivir con ello hasta que se desgaste tu vida?- cada vez que comenzaba a hablar me hacía ya imposible de soportar la suciedad de ese suelo, estaba cubierto de polvo- ¿Puedes quitarte encima de mi? Ahora?!
Di a entender que no me escuchó y seguí escuchando sollozos hasta que comencé a vivir con un momento de silencio, se durmió. Le llevé hacia su cama y le miré por un instante, sus lagrimas aún no cesaban. Después comencé a mirar alrededor de la cama y decidí limpiarlo, tal vez de este modo pueda recobrar algún tipo de conciencia razonada en ella si el ambiente cambiase. Salí de aquella sala y mi pensamiento en ese instante fue....
"Protección y soledad"

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