La chica del Dragón II: Creer es poder.

Capítulo 4. Segunda oportunidad

Capítulo IV. Segunda oportunidad

Que Marcus decidiera honrarles con su presencia podía significar dos cosas: grandes noticias o malas noticias. En aquel momento, por suerte para ellos, parecía ser por una gran noticia. Todos lamentaron que León no hubiera regresado, pues creían que se trataría de Selene. Pero no fue así.

Cuando Marcus se apartó para que todos pudieran ver bien a la persona que iba a entrar, todos miraron hacia la puerta con una sonrisa en sus labios, sonrisa que se perdió un poco al ver de quién se trataba. No es que no les hiciera ilusión verlo, puesto que llevaban incluso más tiempo sin saber de él que de Selene, pero se habían hecho esperanzas con el regreso de Selene. Ante sus ojos apareció Drake.

–Ha regresado de su exilio –bromeó Marcus con una sonrisa amplia.

Todos se alegraron mucho de volver a verlo y tenerlo allí. Hacía más tiempo que no le veían a él que a Selene. Pero, cuando se fue, ella al menos se despidió y daba noticias a Marcus de su paradero.

–¡Qué alegría tenerte otra vez con nosotros! –exclamó Oliver acercándose a él para darle un abrazo.

–Ha regresado el pequeño de la casa –se burló Michael acercándose a él para darle un fuerte abrazo.

Logan y Katsa estaban contentos de volver a verle, pero se quedaron quietos, esperando que el otro fuera el primero en acercarse.

El asunto con Drake no acabó mal, sobre todo porque él supo apartarse deportivamente y porque, cuando él decidió marcharse de LAMO, Logan y Katsa no estaban en el continente. Cuando se fue únicamente se despidió de Marcus y Selene, quien meses más tarde, estando ya ellos en la ciudad, decidió imitarle. Katsa desconocía la razón por la que Selene se había ido, pero estaba segura de que Drake no tendría la misma.

Cuando Michael terminó de estrujarlo, Logan fue el siguiente en avanzar hasta él.

–Me alegra que hayas vuelto –le dijo con una sonrisa mientras lo abrazaba.

Katsa estaba nerviosa por la situación. Todo estaba bien con Drake, o eso suponía dado que hacía meses que no lo veía, pero su vuelta le hacía pensar en todo lo que había ocurrido. No quería pasar otra vez por lo mismo: rechazarlo y volver a perderlo.

Cuando se fue, todo el mundo notó su ausencia. Drake siempre era el primero en aparecer por las salas de entrenamiento y el último en irse para despedirse de todos. Estaba a la disposición de todos, ya fuera como enfermero o como amigo. Katsa y Logan también notaron su falta, y Michael y Oliver se hicieron muy buenos amigos de él tras el pequeño enfrentamiento en la carretera. Cuando Logan y Katsa se fueron de viaje, ellos estuvieron ahí para apoyarlo. Él tenía muy claro que nunca habría conseguido tener algo con Katsa, pero le dolía.

Mientras Logan abrazaba a Drake y se daban palmadas en la espalda, Katsa no pudo evitar pensar en aquel momento que vivió con él sentados en la escalera de su casa.

FLASHBACK

–Drake –llamó para que éste le prestara atención–, ¿tú estás enamorado de mí?

–No lo sé –le respondió Drake tras un suspiro y alzando un poco la cabeza.

–Pero sí sabes que yo no podría corresponderte, ¿verdad? –le preguntó con voz dulce y poniendo su mano derecha sobre el brazo izquierdo de Drake.

–Sí, sí que lo sé, tranquila –le dijo Drake girándose hacia ella con una sonrisa dibujada en sus labios y poniendo su mano derecha sobre la de Katsa.

Katsa le sonrió y se inclinó hacia delante para abrazarlo, a lo que él no se opuso, pues le correspondió con gusto al abrazo.

Cuando se separaron, Drake le sonrió y le apartó un mechón de pelo que tenía tapándole uno de esos preciosos ojos que tanto le gustaba contemplar.