Capítulo 10

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-Argh.

-¿Quieres dejar de moverte?

Jiyong puso los ojos en blanco antes de volver a fruncir el ceño.

El príncipe se encontraba a un lado, restregándose las manos y dando pequeños saltos cuando la aguja penetraba en la piel del capitán.

-Vuelves a hacer esa mueca y te patearé el trasero- gruñó el moreno al momento que su carne tocó el hilo.

Seunghyun desvió la vista y se encontró con los ojos de GD, penetrantes, oscuros, furiosos. –Lo siento- balbuceó, mirando a un lado.

-¡¿Quieres quedarte quieto?! ¡Si sigues moviéndote no voy a poder cerrarte la herida! Argh este chico- T.O.P se apretó el puente de la nariz con dos dedos cubiertos por un guante y se acomodó los anteojos. –En serio, alguien debería pagarme por soportar tanto.

-Perdóname hyung- hizo un puchero. –Es que ese niño me distrae.

Dicho niño le sacó la lengua antes de gesticular un "imbécil" en su dirección.

El mayor puso los brazos en jarras y desvió su atención de uno al otro. -¿Cuántos años tienen? Uno es un príncipe del que dependerá toda una nación en el futuro y el otro es el capitán del barco más temido de los siete mares-. Sonrió de lado. –Les aseguro que si los vieran en este momento, harían reír a todo el mundo y no los volverían a tomar en serio en lo que les queda de vida.

Jiyong se encogió de hombros, haciendo que el hilo se tense estirándole la piel y gruñó cerrando los ojos con fuerza.

-Disfrutaría de esta situación si no tuviera a media tripulación más por atender. Por favor GD, coopera conmigo- dijo el médico, antes de seguir su labor.

Seunghyun vaciló un momento antes de acercarse lentamente, observando la herida por encima del hombro del mayor.

-¿De verdad se pondrá bien?- preguntó en un murmullo.

El capitán lo miró por el rabillo del ojo, con una media sonrisa en los labios.

-Ya te lo he dicho- contestó T.O.P –No es la primera vez que las sirenas dañan su cuerpo, no te asustes por lo terrible que se ve.

El príncipe no pudo evitar repetir la mueca de asco cuando vio que una burbuja espesa y negra, explotaba al ser atravesada por la aguja.

Por poco, la herida llegaba a ocupar todo el lado exterior del antebrazo del capitán, dejando expuesta una capa de carne, ahora cubierta por un moho negro de olor nauseabundo. Casi toda la piel alrededor se encontraba del mismo color, cubierta por ampollas que se rompían como pompas de aire intentando escapar por debajo del lodo.

Su ceño se frunció considerablemente.

-¿Qué?- quiso saber GD, observándolo detenidamente.

Dio un pequeño salto al ser descubierto y se aclaró la garganta. -¿Por qué no estás sangrando? Ni siquiera lo hiciste cuando fuiste herido.

El médico y su paciente compartieron un rápido cruce de miradas.

-Kirara sabrá explicárselo mejor- respondió el mayor de los dos, regalándole una sonrisa. –Hay muchas cosas que no podemos decirle, alteza. No es nada personal.

-¡Oye!- se quejó Jiyong, pegándole con la palma de la mano en la nuca, lo que provocó que el otro se encorvara por el impacto. –Nadie dijo que él iría con nosotros a verla. Lo cual, te aviso desde ya, está terminantemente denegado.

-Oh, ¡claro que si voy a ir!-exclamó Seunghyun, cruzándose de brazos.

-No, no lo harás.

-Sí lo haré.

De frente al mar ~ [Nyongtory]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora