Jimin esperó a que la puerta frente a él se abriera, siempre lo hacía a la misma ahora todas las mañanas, detrás de ella apareció un Min Yoongi muy adormilado, con su pelo rubio alborotado y las mejillas coloradas.
-¿Costó levantarse hoy, eh?
Yoongi soltó un gruñido inconscientemente y caminó hacia la sala, pasando de esta a la cocina, con el chico rosado detrás de él. Jimin se sentó en el mesón mientas veía al otro hacer el desayuno, sacando la leche del refrigerador y abriendo el mueble para buscar el cereal.
-Nope, ahí no.- El pelirosado indicaba con sus pies colgando adelante y atrás.- Lo dejaste en el gabinete ayer, en la puerta de la derecha. Tu otra derecha.- Cuando el rubio encontró el cereal, sirvió las hojuelas de colores en un bowl, vertió la leche y llevándose una cuchara a la boca, salió de la cocina a la sala. Cuando se sentó en el sofá, Jimin ya ocupada el otro extremo de este esperando que se encendiera la tele.
-Hoy es miércoles, en el 57 están dando la repetición de 'Show me the money', creo que es un capítulo de la temporada pasada pero es uno bueno.
El rubio siguió cambiando de canal hasta que soltó una expresión de sorpresa al encontrar el programa y comenzó a comer el contenido del bowl, claramente no había escuchado lo que Jimin dijo. Todas la mañanas era lo mismo, Yoongi se levantaba, desayunaba luego se ducharía y se quedaría escuchando música toda la tarde o saldría a comprar algo, todo dependía de la necesidad del muchacho; esa era la rutina de Min Yoongi desde hace un año, rara vez cambiaba pero no era algo del cual Jimin se sorprendía, el rubio no había escrito o compuesto una canción desde hace meses y no parecía que lo haría en algún tiempo.
El grupo decidió tomar un descanso luego de todos los sucesos tan agitados ocurridos entre ellos, pero aquel 'descanso' parecía no tener un final cercano ya que muchos habían salido del país para buscar nuevas cosas, otros volvieron a casa mientras que los más jóvenes quedaron perdidos en algún lugar del gran Seúl, Yoongi no se había movido del apartamento, lo habían comprado antes del accidente de Jimin como un espacio para los dos, pero ahora solo uno de ellos lo utilizaba -físicamente hablando.-
Jimin había desistido a buscar respuestas en Yoongi, intentó en un principio con la esperanza que el rubio lo tomara en cuenta, y sucumbía a los gritos cuando este lloraba por él en el suelo del apartamento, pero aquella esperanza había disminuido y había dejado de atraer la atención de su -ex- novio a quedarse a su lado a pesar de no ser tomado en cuenta. Pero algunas veces salía a las calles de la ciudad, mayormente de noche, cuando se aseguraba de que Yoongi dormía plácidamente entre las sábanas y no corría algún riesgo del cual debía preocuparse, había recorrido todos los rincones de la ciudad y actualmente pasaba en los sectores bajos de esta. En vida hubiera sido casi imposible que visitara aquellos callejones llenos de ratas y sombras sospechosas, pero ya estaba muerto, no le preocupaba que alguien viniera y lo apuñalaría ya que nadie podía verlo, inevitablemente en uno de sus recorridos descubrió que no era el único en aquel mundo del 'Limbo'.
Nanami fue una joven japonesa que había salido de la universidad y vino a Corea con la idea de laborar como enfermera, lamentable nadie le dijo de los riesgos de vivir en aquellos barrios la llevaría a la muerte solo a dos cuadras del pequeño parque; había salido de un turno nocturno que había cambiado con una compañera y llegaba pasada las once al parque del sector, tenía dos opciones, ir por el camino largo que normalmente tomaba, o el otro que era más corto, la chica hizo la elección equivocada y fue asaltada por unos hombres mas adelante, ocasionándole serias lesiones y seis apuñaladas en el pecho, llevándola a la muerte. Jimin la conoció una vez que estaba sentado en el parque y se encontró con la muchacha, el principio fue solo de vista y ella ignorando su presencia, logrando que el de rosado cabello dedujera que era una persona más, pero luego de encontrársela las semanas siguientes y entablar una conversación con ella, tachando por completo la idea de sea humana, la acompañó por la ruta corta que ella siempre tomaba. Nada alertó a Jimin que unas cuadras adelante el cuerpo de Nanami comenzaría a mostrar las heridas y golpes de ese día finalizando con ella sangrando en el piso hasta desaparecer.
Fue ahí cuando Jimin decidió que cada vez que la viera solo conversaría y dejaría que tomará su camino, sola como lo quiso el destino.
Esperaba a que fueran más de las 1:00 AM para salir de la casa, atravesar las paredes había sido una de las partes más extrañas de estar muerto .-Aunque la situación en sí ya lo es.- se había dado cuenta que no podía hacer tantas cosas con sus "superpoderes fantasmas", atravesar las paredes, aparecer en un lugar cuando lo pensara y ser invisible era lo único que hacía, aunque esto último no era algo de su opción, si le hubiera dado a elegir entre atravesar las paredes y ser visto cuando quisiera, hubiera elegido la última opción, para que Yoongi lo viera por última vez.
Su acompañante más común en las noches era, Dong, castaño y notablemente mas alto que Jimin, siempre lo esperaba fuera del edificio de Yoongi.- No me gusta entrar a casas de extraños.- dijo cuando Jimin lo interrogó del porqué no lo iba a buscar adentro.- Quiero mantener lo poco de "humanidad" que me queda.- Su respuesta hizo sentir a Jimin como un pésimo ser humano por lo cual decidió no volver a preguntar. No tenia ni idea de qué era Dong, pero sospechaba desde hace tiempo que no era tan fantasma como él.
-¿Eres un ángel? -Preguntó una vez.
-Si fuera un ángel, ten claro que no estaría contigo ahora.
-Ouch, eso fue para nada grosero.
La mayor parte del tiempo corrían por las calles de Seúl como si fueran niños pequeños, no molestaban a nadie pero le gustaba sentir el viento en su cara, porque aún podía sentir algunas cosas y la brisa le hacía sentir libre. En vida fueron muy pocas veces cuando el sentimiento lo invadió, las últimas veces que lo recuerda es cuando comenzó a salir con el rubio, y podría jurar que hasta antes de eso, el hecho de ver a Yoongi sonreír le hacía cosquillas en los pies hasta la cabeza, ocasionando un retortijón de felicidad en su estómago y una sonrisa para aliviar su cuerpo, ahora en su estado astral, lo único que lo hacía sentir de esa forma era sus aventuras por las noches.
Yoongi ya no sonreía como para buscar libertad con él.
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I'm still here • Yoonmin (Three Shot)
Fanfiction«Sigo a tu lado, a pesar de que me hayas olvidado» Hombre x Hombre. Corta. Sad. Historia original.