Inestable [FrandralxLoki]

❃Capítulo 4

— La paz total nunca existirá como tal. Siempre habrá quien trate de perturbarla. Para nosotros la paz es el vencer a los insensatos continuamente y otorgar la seguridad alrededor de los nueve mundos. Esta es una guerra universal que no terminará hasta el día del Ragnarök —decía Odín mientras paseaba con elegancia de un lado y a otro frente a su trono. Se detuvo a lo poco, girándose para poder ver a Loki, quien aguardaba al pie de los escalones que tenía por delante—. Estos días han sido tranquilos porque no hay alguna amenaza mayor, aunque no significa que haya que ignorar las amenazas menores e insustanciales, pues de estas puede nacer una mayor destrucción. Por eso nuestros mejores guerreros partieron a Vanaheim hace ya unos días para arreglar los disturbios y por eso mismo hoy te pido que visites Jötumheim.

Loki había estado escuchando con atención todo lo que Padre de Todo decía, sopesando las ideas de su cabeza para hacer concordar el motivo por el cual le había llamado con lo que le explicaba en un principio, queriendo descifrar antes de tiempo lo que quería llegar Odín con todo eso, mas nunca esperó que le pidiera ir al último lugar al que querría pisar en su vida.

— ¿Jötuheim? —inquirió Loki como si no hubiese escuchado bien, buscando alguna explicación más clara con su expresión desconcertada.

— Sí, Jötunheim —repitió Odín con seguridad y una breve sonrisa—. Como has sabido antes, Laufey se ha proclamado siempre como un enemigo mío y de mi gente. Tengo algo que le pertenece y, además, a su propio hijo y eso es más que suficiente para que permanezca enojado conmigo. Hay que mantenerlo vigilado para evitar que pueda crear alguna rebelión en un futuro, por eso pensé que en esta ocasión podrías hacer una corta visita. Él no podrá hacerte daño puesto que eso lo tomaríamos como una declaración de guerra y yo sé bien que no están listos para enfrentar una. No correrías ningún peligro, además de que sería favorable para ti hacer una pasada y dar un vistazo a las tierras congeladas.

Loki seguía cuestionándose internamente el porqué de aquella decisión. Pensó que podría ser una ligera prueba que Odín le ponía para comprobar donde estaba su lealtad, pero después de meditarlo un poco llegó a la sabia conclusión de que todo aquello no era mas que algo para hacerlo más fuerte; no podría huir de sus orígenes para siempre y evitar la verdad. En algún momento tendría que enfrentarla a carne viva.

De esta manera, Loki no pudo negar la petición de Odín. Aquello le serviría para demostrar su utilidad, no sólo en el castillo, sino también fuera de éste. A veces llegaba a sentir que necesitaba demostrar el potencial que la magia tenía al luchar. Eso no era duda alguna cuando se trataba de Frigga, pero cuando se trataba de él siempre había inseguridad y ahora el mismo Odín le daba la oportunidad de hacer algo por su cuenta. No iba a desperdiciar tal oportunidad.

Fue a la mañana siguiente cuando fue destinada su partida hacia el mundo helado. Loki caminaba a todo lo largo del puente arco iris hasta llegar al borde donde aguardaba Heimdall con su apariencia estática y disciplinada, preparando todo para el traslado en cuanto Loki se puso en posición.

— Siempre te has de esconder de mi ojo, Loki, y supongo que tienes tus motivos, pero si llega a pasarte algo del otro lado igual no podré preparar tu traslado de vuelta con rapidez —comentó Heidall con su voz grave, forzando su empuñadura en la base para abrir las puertas de Bifrost.

No había nada que se escapase de la aguda visión que poseía el guardián del puente y esto por supuesto era algo que había podido prevenir Loki desde que pudo dominar su magia. Era en especial algo de utilidad ahora con la relación clandestina que llevaba con Fandral. Si daba el caso de que alguien se interesara en lo hacía a veces, sería de forma obsoleta acudir a Heimdall.

— Estaré bien. Mantendré todo controlado —pronunció con confianza el azabache antes de avanzar un par de pasos y desaparecer de allí, viajando a la velocidad de la luz y aterrizando en poco tiempo en las tierras de Jötumheim.