Cap 8 "segundo dia"

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Todo estaba normal la mañana del día siguiente, cuando llegué al colegio, no habían abierto las puertas, así que me senté en la acera a leer un libro que tenía en mi mochila: "Buscando Alaska". Es un libro de uno de mis escritores favoritos, John Green, su forma de culminar un libro tan trágicamente me cautivaba. Cuando pasó un auto muy cerca de mi decidí a cerrar el libro y subir a la acera antes de que me aplastaran los pies. Después de unos minutos vi a Matías a lo lejos con los demás compañeros de clase, me acerco para saludarlo.

–Hola Matías. –saludé metiéndome en medio del círculo de personas donde él se encontraba.

–Hola Ronnie –contesta mientras hace un gesto como para chocar las palmas, yo le correspondo –. Te presentare a los chicos.

–Está bien. –contesto de manera antipática.

Mientras me presenta a todos los chicos ahí presentes pensé que sería mejor recordar los nombres que las caras. Para mi sorpresa, cuando abren las puertas del colegio, me di cuenta que no recordaba ningún nombre. Pero me daba igual, de todos modos, al tiempo los recordaría; una vez que entramos me di cuenta que tenía más compañeros de clases de lo que imaginaba, sólo que el día lunes tienden a asistir muy pocos.

Luego entramos a clase de biología, mientras los demás hablaban, la profesora me dijo que debía inscribirme en un club, me explicó que la mayoría de mis compañeros estaban en el club de fútbol, pero yo odio el futbol. (no se ofendan queridos lectores, pero no le veo el sentido a correr detrás de una pelota :3)

Cuando termino la clase me dijo que fuera a la dirección ya que allí estaba una lista de todos los clubes que tenían en el colegio. Le pedí a Matías que me acompañara, cuando llegamos y vimos la lista, había muchos clubes para elegir: de tenis, fútbol, basquetbol, química, matemáticas... De entre todos me decidí por el de ajedrez.

El que dirigía dicho club era mi profesor de matemáticas, conocido por su muy mal carácter y ser muy estricto. Cuando fui a su aula de clases el no dijo ni una sola palabra, simplemente me dio una hoja donde tenía que escribir mi nombre y mi e-mail. Después me entrego una especie de normas y reglas que debía aprender si quería jugar ajedrez, me entregó los requisitos para jugar y me dijo que debía jugar con alguien para demostrar que tenía la "capacidad" para estar ahí; como no había un jugador disponible en ese momento, el profesor me pidió que jugara con él, a lo que accedí.

–Vamos a ver si tienes espacio libre dentro de ese cráneo –dijo en tono arrogante –, ordena las piezas.

Yo hago lo que me pide, después de terminar de ordenarlas, el rectifica que estén bien organizadas y distribuidas como lo pide el tablero. Al ver que están perfectamente ordenadas decide empezar el juego.

Después de varios minutos y varias piezas fuera, tanto el como yo estábamos contra la espada y la pared. Un profesor de Educación Física se le acerca y le recuerda que debe dar clases en pocos minutos. Después de unas 2 jugadas me doy cuenta que solo me hacen faltan pocos movimientos para lograr el jaque-mate, él también se da cuenta de su inminente derrota y decide irse a su clase.

–¿A dónde va? –le pregunto mientras él se levanta de la mesa.

–Tengo otras cosas que hacer aparte de jugar con un niñato como tú. –alega el arrogante profesor.

–¿Está muy ocupado o se dio cuenta del jaque-mate? –le pregunto con una sonrisa maliciosa en mi rostro.

–No tengo por qué responder eso. –responde mientras toma su maletín y se aleja.

Un chico, que supuse que era una especie de segundo al mando, se dirigió a la mesa donde me encontraba, después de ver un momento las piezas, analizar las jugadas y sacar unas cuentas en su mente dijo asombrado:

–¡Increíble, el nuevo venció a Salazar!

Todos los demás jugadores escucharon lo que dijo y una ronda de aplausos invadió en aula. Varios comentarios surgieron, entre ellos la pregunta era casi la misma: ¿De dónde venía el nuevo? Yo, preocupado de que algún curioso me iba a hacer esa pregunta, decidí retirarme

Llegue a mi casa satisfecho de mi trabajo, ya tenía un enemigo y lo peor es que era mi profesor de ajedrez xD. Pero me sentía extraño, casi mi identidad fue revelada, aunque se sintió bien que por un momento tomaran en cuenta una de mis capacidades.

Ser tan frio y calculador no es tan malo después de todo...

Después de un rato y de tener que hacer una fila interminable para tomar un bus a mi casa, llegué a mi santuario y pude descansar la mente un momento.

Después en la noche me llega una notificación de Facebook.

<<MENSAJE DE MERCEDES>>

<Ola ¿kea ce?>

–¿En serio? ¿No se te ocurrió otra forma de hacer enojar a los trabajadores de la DRAE*?

<Aún eres tú, frio y antipático, es el Ronnie de siempre>

–Lo sé bebe, lo sé. Nadie cambiara eso.

<No, si yo no me lo propongo>

–¿Estas amenazándome?

<Tómalo como quieras>

–No importa... ¿Qué haces?

< ¿Ahora? Acostada, aburrida y con hambre>

–Hambre, eres tú. Ya me empezaba a extrañar que mencionaras eso.

<Jajaja>

–Fue sarcasmo mujer.

<Lo sé bebe, lo sé>

–Deja de copiarme.

<Diji di cipiirmi>

–Ahg ¿Cómo están los chicos? ¿Los extraños?

<Los chicos están bien, espera... ¿Por qué pusiste un signo de interrogación después de "los extraño"?>

–Porqué me preguntaba si los extrañaba.

<¡Idiota! ¿Viste que Santi tiene novia?>

–¡JA! Cuando los pacman's conquisten el mundo.

<Yo también pensé eso, pero es verdad, yo misma lo confirmé >

–¡Rayos! ¿Cómo es?

<Es fea, es lo único que te puedo decir >

–Jajaja, debí suponerlo.

<Oye, hablamos mañana, tengo que hacer tarea y luego dormir, adiós >

–Ok, hasta mañana.

Después de hablar con Mercedes, decidí tomar una ducha e irme a dormir.

*DRAE: Diccionario de la Real Academia Española. Ronnie dijo que Mercedes hace enojar a los trabajadores de la DRAE por los errores ortográficos que en el mensaje que recibió.

Cuando los pacmans conquisten el mundo Donde viven las historias. Descúbrelo ahora