Capítulo XIV

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Star Wars y sus personajes no son propiedad mía sino de Lucas Films, lo único de mi intelecto es la historia aquí presentada.

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— ¿entonces Finn? ¿Con Snoke? — Preguntó Jessika mientras observaba a Rey recargada con aire cansando en unos rollos de tela pertenecientes a Maz Kanata, la dueña de ellos y Varish Vicly estaban de brazos cruzados en el estudio – Su nuevo centro de reunión – analizando la situación que había pasado en la caballeriza — No puedo creerlo, nos conocemos de años —

— Tal vez lo que me dijo fue debido a que escuchó algo — Intentó razonar Rey.

— Snoke no es tonto para dejar que alguien escuche sus pláticas si no tiene un motivo oculto — Respondió Varish mientras veía al vacío — Nunca le había conocido antes pero su mirada es de una persona astuta —

— Yo tampoco sé del pasado de Snoke, como tampoco lo sé de Finn — Comenzó Maz Kanata con aire dudoso — Chicas ustedes convivieron con él, deben de sospechar algo —

— ¡Mientras más lo pienso menos lo puedo creer! — Dejó escapar Jessika con los ojos llorosos — Es Finn del que estamos hablando: nuestro amigo y compañero ¡Él que nos ha ayudado en tantas cosas durante tanto tiempo! ¿Cómo es posible que dudemos de él? —

Rey estuvo de darle la razón, sin embargo recordó a otra persona que también creía conocer y al final la trató como basura, si él había mentido sobre su amor hasta el punto de casarse, Finn podía fingir su amistad muy bien: a fin de cuentas los dos venían del mismo saco.

Esa mentalidad hizo sentir vacía a Rey, estaba sospechando del que había considerado su mejor amigo, tal vez no era tan buena en las relaciones después de todo, tal vez había sido demasiado ingenua con las personas a su alrededor.

— ¡Baja la voz! — Regañó Varish a la chica que ya había empezado a sollozar — Sé que es difícil pero debemos de ser objetivas, ¿Puede ser cierto o no? No nos queda otra opción más que protegernos nosotras mismas —

Jessika siguió lagrimeando, la situación era demasiado para ella, pensar en que había vivido en una mentira le hería más de lo que hubiera imaginado, Rey comprendía muy bien ese dolor.

— No hay alternativa — Siguió Maz Kanata — Tenemos que esperar a ver quien llega mañana, porque además del Señor Luke, también fue nombrada otra persona —

Y así fue.

Pasó un día mientras las mujeres esperaban aquella visita, Varish y Jessika estuvieron ocupadas en la cocina, Snoke había confirmado que los invitado deberían llegar al anochecer, así que se mandó a preparar un gran festín de bienvenida con la mayor cantidad de platillos que se pudieran elaborar a pesar de que en la cena sólo iban a estar unas pocas personas.

Aquella decisión había entristecido a los asistentes que ansiaban ver al Señor Luke, Jessika incluida, estaba segura que la servidumbre no iba a estar en ninguna cena – ¿Para qué lo estarían? – Así que posiblemente solo podrían ver al Señor Luke a lo lejos. A aquel hombre conocido por sus grandes hazañas en todo el país, por sus luchas sin temor a la muerte sólo por seguir sus ideales.

"Era un hombre increíble" Pensaba Jessika que lo admiraba desde pequeña a pesar de no conocerlo. Estaba segura que nunca lo conocería del todo, ella era una mujer común y corriente, parte de la servidumbre del lugar, los patrones nunca prestaban atención a chicas como ella.
Sin embargo le tranquilizaba saber que ella le iba a ver y escuchar cuándo sirviera los platos.

Muñeca De Trapo [Reylo] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora