JADE:
Voy a serles totalmente sincera, me encanta el alcohol, también fumar pero siempre que puedo me emborracho, amo sentir la libertad corriendo por mis venas.No se porque había asistido a esta fiesta llena de niños pijos, había más gente borracha que sobria y el aire estaba contaminado con un asqueroso olor a una mezcla entre transpiración y humo de cigarrillo.
Una vez que había tomado una buena cantidad de alcohol y ya me sentía satisfecha, me dirigí al patio trasero a fumar un cigarrillo, mis piernas estaban un poco torpes, pero mi resistencia al alcohol era demasiado buena como para estar ebria perdida.
Llegue a una pequeña pared y tome asiento en ella observando a mi alrededor, solo había una pareja casi teniendo relaciones y un ebrio vomitando junto a un árbol. Saque un cigarrillo de la cajetilla y mi encendedor, cuando lo prendí se me dio por mirar a mi costado derecho, me encontré una escena que en un primer momento no me gustó, sentí una punzada pero la ignoré completamente.
Matthew estaba a algunos metros de mí besando a una rubia divina de la muerte.
Suspire y me pare, rendida a que no iba a encontrar ningún lugar aquí donde podría fumar tranquila me retire.
Esa escena había sido grabada en mi mente, no se porque había creído que entre Mathew y yo quizá podría haber algo, tonta de mi.
Últimamente habíamos estado más cercanos, pero no deja de ser un imbecil mujeriego, como todos los hombres. Me aleje de allí y de la única persona con la que habría estado en toda la maldita fiesta.
Di una pitada al cigarrillo y oí mi nombre saliendo de sus labios. Pero no tenía tiempo para él ahora. Entre a la casa y tracé un semicírculo gigante para que Mathew me perdiera de vista antes de volver a salir.
Cuando por fin dejo de perseguirme me senté en la piscina y remoje mis pies en ella.
Sentí como alguien se sentó a mi lado, creí que era Matthew y suspire con cansancio ¿que quería? ¿Acaso no tenía cosas que hacer con esa rubia? pero era imposible, había tanta gente que dudo que me encontrara.
Cuando me di la vuelta era algo parecido, su estupido hermano.
—¿Que sucede Jade? ¿Te has peleado con mi hermano porque está con Shirley?
Lo mire extrañada ¿como sabia él eso?
—Escucha Idiota dos, entre tu hermano y yo no hay absolutamente nada ni nunca lo habrá, por lo tanto por mí se puede besar con Megan Fox que ni un pelo me moverá— refunfuñe dolida. Un pellizco en mi corazón hizo presencia.
El solo río ante mi respuesta.
—¿Sabes? Me encanta tu nombre— lo mire—va con tu personalidad— reí ante su imaginación. ¿Que tenía que ver mi nombre con mi personalidad? —Vaya... te he hecho reír, soy bueno en esto— se burlo y mi sonrisa desapareció — mira, nosotros hemos comenzado con mal pie ¿que te parece conocernos mejor?
—No— dije mirándolo a los ojos, él, sorprendido, no se dio por vencido y siguió parloteando por un rato.
Volví a reír ante un comentario absurdo suyo, no le había dado una oportunidad a John, sólo lo había golpeado y nada más, pero creo que puede llegar a ser un buen compañero de cama.
MATTHEW:
Salí corriendo tras Jade para buscarla, quería hablar con ella de cómo se encontraba con lo de su hermana, últimamente estamos más confidentes entre nosotros y la considero una amiga, pero al ver que se alejaba de mí aunque estaba oyéndome mi ceño se frunció ¿que le ocurría?Seguí buscándola para preguntarle que le ocurría pero de repente la encontré riendo junto a mi estupido hermano en la piscina. No sé bien porque pero lo sentí como una pequeña traición. De mi hermano me lo esperaba pero ¿de ella?
Su risa llegó a mis oídos y una furia azoto mi cuerpo de pies a cabeza.
Le dije a John que se alejara de Jade, maldicion, ese idiota me las va a pagar.
Me acerqué a ellos y empuje a mi hermano al agua, él se quejó y nado hasta la orilla mientras Jade se descostillaba de la risa. La miré furioso.
Vi como John saliendo de la piscina le sonreía con gracia.
— ¡Pareces un pollito mojado!— gritó ella tirándose en el pasto y agarrando su panza. Fruncí mi ceño ¿que mierda ocurría entre ellos?
Note que ambos llevaban alcohol y marihuana encima y me enojo la posibilidad de que lo hayan hecho juntos.
—Tenemos que hablar— Solté agarrando su cigarrillo para tirarlo por ahí e ignorando sus gritos amenazándome la cargue en mi hombro derecho hasta una pequeña pared donde la senté y me metí entre sus piernas, ella evitaba mi mirada como si estuviera ofendida conmigo.
—¡JADE!—la llame más fuerte—escúchame ¿qué haces con él? ¿Estás enfadada conmigo?
—Tu y yo no somos nada. Ahora déjame en paz y vete de mi vida para que pueda ser feliz, imbecil—dijo cruelmente influenciada por las drogas y el alcohol, se levantó y se fue de mi lado, quede atónito con su arranque de histeria ¿Porque había dicho todo eso?
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Quintillizas
RomanceTodo comenzó una noche de borrachera, Ellie Swift y Adam Connor estaban oficialmente casados, aunque eso no les había impedido tener antes al pequeño Austin de tan solo dos años de edad. Esa noche saldrían a divertirse debido a que pensaban ponerse...