Intercambio de Vidas [en edición]

(capítulo 11)

ホラーコメディー

comedia de terror

Sakura

7日目 (día)

se escuchan risas de fondo.

-¡ven, atrápame! –exclamo una joven mujer entre risas, la cual llevaba puesto un vestido largo azul turquesa pálido, de muy buen parecer, tez blanca y una melena dorada.

-¡no te muevas!, te alcanzare oded, ya veras –contesto un joven también entre risas, el cual el rostro no se mostraba.

Puedo observar a la mujer correr con velocidad hacia un...¿vivero?.

-¡¡Oded!! –exclamo el joven aterrado.

La mujer caía de un abismo mientras el joven la observaba aterrado y con lagrimas por todo su rostro.

-¡Oded, no me dejes así! –exclama el joven con la voz entrecortada y tapando su rostro sollozando.

Todo lo observaba desde lejos, como un recuerdo, pero... no eran mis memorias, de pronto un dolor punzante invadió mi cabeza.

Cerré mis ojos con fuerza y al abrirlos me percate que ya no seguía en la misma pesadilla sin embargo, me encontraba otra vez en estas pesadillas constantes, al parecer seguía en una. Seguía caminando hasta encontrarme en un cementerio, ¿qué o quien me trajo hasta aquí?, todos los lugares a los que llegaba a parar solían ser lugares desolados y lúgubres. Algo a lo lejos llamo mi atención , era un lapida la cual llevaba algo inscrita en ella, me acerque mas para poder ver que era y al hacerlo pude observar el nombre en ella inscrito "Hisao Takamura". Mi piel se erizó y un escalofrió recorrió toda mi espalda porque ese apellido también le pertenecía al señor Akira entonces... mientras divagaba entre mis pensamientos mi vista se desvió hacia una joven que se aproximaba a mi la cual capté que era la joven Naho, me quedo viendo con sorpresa, traía un ramo de flores entre sus brazos.

-Señorita Naho...¿qué la trae por aquí? –le pregunte.

-Yo... vengo a darle mis condolencias a cierta persona, ¿y usted? –pregunto la joven Naho.

Porque la pregunta, ¿acaso no me encontraba en una pesadilla?, pero si esto no era una pesadilla y me encontraba por decirlo así, en la vida real, ¿cómo había llegado hasta aquí?, pensé.

La señorita Naho y yo caminamos un rato en silencio el cual decidí romperlo.

-¿El señor Subaru sabe que esta aquí? –le pregunte con una cálida sonrisa, sin quitar mi vista de enfrente.

-De hecho si, pero no sabe a que...-contesto apenada.

-¿Vive con el? –le pregunte viéndola por un momento y después continúe con mi mirada al frente.

-Si, por ahora –contesto.

-Me alegra, ¿sus padres están de acuerdo? –le pregunte a lo que ella se detuvo.

-Ellos... están muertos –contesto con el semblante lleno de dolor.

Suspire

-Al parecer tenemos algo en común –le conteste, tratando de aliviar el ambiente y consolarla a lo que rápidamente dirigió su mirada hacia mi.

-¿Usted, es...? –quiso preguntar a lo que la interrumpí.

-¿Huérfana?, si lo soy, pero a pesar de ello, nunca me sentí sola. ¿sabe porque? –le pregunte observándola con una cálida sonrisa.