Capítulo 5

2.5K 121 7
                                    

Entré en la habitación asomando mi cabeza por la puerta, ella estaba sentada en la silla de su escritorio leyendo un libro con una coleta baja despeinada y con sus gafas, recostando su cara en su puño, parecía muy centrada en la lectura ya que no se daba cuenta de que estaba ahí, observándola. Pude ver como una leve sonrisa se le formaba en el rostro mientras que sus ojos se movían al compás de su lectura, entré un poco más en su habitación, lenta y silenciosamente pero ella se percató de mi presencia y se sobresaltó de la silla, poniendo su mano en su pecho por el susto, no pude evitar reírme.

¿Qué estás haciendo aquí? ¿Acaso no sabes llamar? - dijo molesta y levantándose de la silla.

Yo sonreí por su actitud, nunca la había visto molesta y me gustaba como se le enrojecían sus mejillas al hablarme.

Me han dicho que venga a saludarte como las personas educadas y eso es lo que estoy haciendo, saludar a mi nueva vecina- dije con una sonrisa.

Vale, hola, ahora ¿te puedes ir? - dijo sentándose cogiendo su libro entre sus manos.

¿Por qué tan borde ahora conmigo?- dije sentándome en los pies de su cama.

¿Por qué tanta confianza ahora conmigo? - dijo quitándome de su cama con un leve empujón.

Touché - dije gracioso, pero ella ni se molestó en dedicarme una sonrisa. ¿Qué te pasa? - dije mirándole inocente.

¿Que qué me pasa? ¿A mí? - dijo auto señalándose.

Sí, a ti, yo no te he hecho nada para que me trates así - dije defendiéndome.

Si, tienes razón tu a mi no me has hecho nada - dijo dándome la espalda.

Pero ¿Qué le pasa a esta chica? La habitación quedó en silencio, con solo los susurros de Jessica leyendo en voz baja su libro, de que unos golpes en la casa de al lado nos sorprendió, Jess miró por la ventana.

¿Pero qué...? - dijo observando a los chicos de la mudanza, poniendo muebles en la habitación en frente de la suya.

Vaya, al parecer están colocando los muebles en mi habitación - dije sonriendo.

*Jessica's POV*

Joder, ¿enserio? Su habitación en frente de la mía, la mejor cosa que me podía pasar, mi ironía empezó a notarse. Le miré, él solo sonreía mirando por la ventana su habitación, se giró inesperadamente y me miró sin dejar de lado esa preciosa sonrisa coqueta, mierda, me había pillado, aparté mi mirada de él rápidamente y soltó una pequeña risilla.

Ahora tienes que tener más cuidado con las cosas que haces en tu habitación cuando estás sola, puedo estar yo observándote desde mi ventana - dijo con una sonrisa pícara.

Eres un...- dije golpeándole con mi puño en su hombro, él rió. Ni se te ocurra espiarme - dije lanzándole una mirada fulminante.

Bueno, ya que vamos a ser vecinos...pasaremos más tiempo juntos y eso... - dijo mirando al suelo.

Yo hice una mueca de asco.

Puag, qué tortura. Que seamos vecinos no quiere decir que pasemos más tiempo juntos, yo voy a seguir con mi camino y tú con tu vida -dije seria.

¿Qué vida? ¿Quedarte en tu casa leyendo un libro? ¿A eso lo llamas vida? - dijo mirándome.

Y por supuesto, me lo tomé como un insulto.

Pues, ¿sabes qué? Prefiero quedarme en mi casa con mis libros en vez de ir a cualquier fiesta y tirarme a la primera que pase por delante... - dije mirándole de reojo. Él me miró serio y callado.

¿Qué acabas de insinuar? - dijo mirando al suelo apretando sus puños.

Que eres un mujeriego de mierda - dije casi en un susurro. Él se levantó rápidamente de mi cama y me inmovilizó en la silla haciendo que el libro caiga de mis manos, mientras me miraba con unos ojos verdes brillosos penetrantes.

Tú no sabes nada, no tienes derecho a decir nada.

Por favor Harry... - dije rodando los ojos. Lo sabe todo el mundo, las chicas sobre todo. - dije en... ¿tono divertido? Pude ver la rabia en sus ojos.

¿Sabes qué? No sé qué hago todavía aquí... - dijo retirándose y saliendo de mi habitación después de dar un fuerte golpe con la puerta al salir. Se lo merecía, alguien le tenía que decir la verdad, y eso es lo que he hecho, no sé por qué se ha enfadado...recogí el libro del suelo y suspiré, no podía sacar a Harry de mi cabeza, por lo que opté por tomarme un baño relajante. Después de eso me quedé completamente dormida.

*********

Me levanté de la cama caminando hasta la cocina como zombie, eran las 12 de la mañana, anoche caí rendida en la cama después de ducharme. Al entrar en la cocina pude ver en la encimera una libreta con letras de color rosa fluorescente "Estoy trabajando de guardia, te he dejado comida en la nevera por si no llego para comer, besos mamá", como siempre. Desayuné y subí a mi habitación, ya que no estaba mi madre me puse a limpiar la casa, me puse unos shorts cortos, más bien cortísimos que no me ponía nunca y una camiseta de tirantes. Puse música en la cadena de música y empezó a sonar Dance Again de Jennifer Lopez y Pitbull. Empecé por el piso de abajo por lo que puse la música más bien alta para poder escucharla desde el salón. Después de una hora con el amplio salón empecé con la cocina, sumisa en mis pensamientos me di cuenta de que la música no estaba sonando, ¿Por qué se ha parado? Subí las escaleras hacia mi habitación para ponerla de nuevo, pero quedé en la puerta de mi habitación sorprendida de lo que estaba viendo.

¿Pero qué haces aquí? - dije medio gritando.

La música, la tienes muy alta - dijo bajando la rueda del volumen al mínimo.

¿Cómo has entrado aquí? - dije con el mismo tono de voz.

He entrado por la ventana - dijo mirándome de arriba abajo. Yo le miraba amenazante.

¡Sal de mi casa ya! - dije empujándole hacia la ventana. Él se libró de mis empujones y con un ágil movimiento saltó hacia la ventana de su habitación también abierta. Yo me quedé mirándole sorprendida, y él me miraba sonriendo.

¿Sabes? Deberías llevar más a menudo esa ropa - dijo mordiéndose el labio inferior y mirándome de nuevo de arriba abajo. Yo rodé los ojos e ignoré aquel comentario de su parte, cerrando la ventana fuertemente, no sé cómo no se rompieron los cristales del golpe... Le miré de nuevo y él me lanzó un beso al aire divertido después de reírse, cerré las cortinas para que no me observase y seguí con la limpieza en mi habitación, esta vez con la música menos alta.

Nota: No dejar la ventana abierta.

La típica Nerd (Harry Styles y Tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora