The Legend of Zelda ♦ Aquel niño Hyliano ♦

Capítulo 2 - El primer encuentro con Link

Tras el encuentro con aquél pequeño niño Hyliano en la cima del monte trueno, la princesa de los Zora Mipha se dirigía sin perder más tiempo de vuelta a su hogar junto a su padre, su madre y su hermano Sidon, en cuanto llegó a la entrada fue sorprendida por el anciano mas sabio del consejo Zora: Muzun

- ¡Alteza...! ¿A quién lleváis sobre vuestra espalda?

- Es una larga historia Muzun, debo llevar a este pobre niño ante padre

Delicadamente la princesa Mipha apartó hacia un lado al anciano Muzun y entró en la cámara real donde se encontraba el soberano de los Zora: el rey Dorphan el cual no pudo evitar sentir curiosidad por el muchacho que llevaba su hija cargando en la espalda.

- Mipha, ¿Quién es ese joven con el que cargas?

- Se trata de un niño Hyliano Padre, os lo ruego preparad un remedio para hacerle despertar

En ese momento, el príncipe Sidon entró en la habitación de la mano de su querida madre la reina Zora y ambos se quedaron mirando al niño Hyliano sin decir una palabra.

- Padre... le encontré en la cima del monte trueno cuando subí para practicar con la lanza

La reina se acercó y tomó al pequeño en sus brazos, usando así su poder curativo para hacerle despertar de una vez por todas. El pequeño Hyliano en cuanto abrió los ojos comenzó a temblar de miedo pues sabía perfectamente que se había perdido y no sabía donde podía encontrarse en ese momento. Sidon con su carácter amigable no tardó en acercarse a él y sonreír mientras trataba de animarlo.

- ¡¡Es la primera vez que veo un Hyliano...!! ¿Dónde están tus aletas?

El rey, la reina y la princesa Mipha soltaron una pequeña risa pues los Hylianos no contaban con aletas en su cuerpo, solo los Zora las portaban.

- Hijo los humanos no cuentan con aletas como nosotros los Zora, aunque es bastante extraño. ¿Cómo ha podido llegar él solo hasta la cima del monte trueno?

La reina Zora miró seriamente ha su marido mientras se hacía la pregunta, como queriendo dejar algo en claro, a continuación hizo una señal a Mipha y Sidon.

- Mipha llévate a Sidon y al joven Hyliano fuera de la sala del trono, debo hablar a solas con vuestro padre

La reina dejó en el suelo al pequeño niño mientras que este observaba en silencio a la princesa Mipha, la cual se encontraba frente a el con el brazo extendido esperando así que este tomara su mano.

- No hay nada que temer, yo soy la princesa de los Zora: Mipha, y este aquí es mi hermano pequeño el príncipe Sidon

El niño miró una última vez hacia la reina Zora la cual asintió con la cabeza dando a entender que la princesa era inofensiva, de modo que avanzó hasta ella y tomó su mano finalmente. Mipha no pudo evitar volver a sentir una extraña sensación de calidez en su corazón, aun sin saber cual era la razón para sentirse así era una sensación realmente agradable. Sidon tomó de la otra mano al pequeño Hyliano y todos juntos salieron finalmente del salón del trono, dejando así al rey y a la reina a solas como habían ordenado.

- Y dime una cosa, ¿Cómo te llamas amigo humano?

Sidon preguntó su nombre al Hyliano y este, tras unos segundos en silencio susurró un nombre que quedaría grabado en las memorias de la princesa Mipha para siempre: Link.

Mientras Mipha y Sidon enseñaban toda la región al recién llegado Link, la reina y el rey mantenían una conversación importante en el salón del trono.

- Querido sabes tan bien como yo lo que significa que un joven niño Hyliano haya aparecido inconsciente tan cerca de nuestros dominios, solo puede significar...

- Lo sé, una premonición de que tiempos oscuros pueden llegar antes de lo que esperábamos

- No podemos esperar más, en cuanto el niño Hyliano regrese a su hogar me encargaré de enseñar a Mipha a despertar los poderes que heredó de mi... 

- Mipha es una chica maravillosa, no me cabe duda que aprenderá muy rápido 

La reina Zora comenzó a sentirse mareada cayendo hacia atrás, afortunadamente el rey Dorphan la tomó evitando así que cayera, la salud de la reina era cada vez más frágil y por desgracia no la quedaba demasiada vida por delante.

Tras un largo tour por toda la región Zora Link ya se sentía mas tranquilo en compañía de Mipha y Sidon de modo que ya se encontraba preparado para regresar hasta su hogar, sin embargo, fue detenido por Mipha la cual le agarró del brazo antes de que partiera.

- ¡Espera...! mira tu brazo

En cuanto Link dirigió su mirada hacia su brazo derecho comprobó como sin darse cuenta se había hecho una herida la cual sangraba. Mipha se sentó sobre una roca y le hizo una señal para que se sentase a su lado, Link la hizo caso y se sentó a su lado.

- Enséñame esa herida una vez más, antes de que te marches de vuelta a tu hogar... Me gustaría poder curarla... Si no es molestia

Negando con la cabeza y con confianza Link tendió su brazo y la princesa Zora lo tomó con cuidado, cuando colocó su mano sobre dicha herida su mano comenzó a brillar como si algo hubiese despertado en su interior. Sidon sintió curiosidad y se acercó para comprobar que era ese brillo.

- ¡Hermana, eso es lo que hace mamá cuando me cura una herida!

- ¿Cómo puede ser que posea los poderes de Madre...? No, esa no es la cuestión ahora, es primordial cuidar esa herida

Link sintió un gran alivio en su brazo tras la curación de la princesa Mipha pues la herida había desaparecido, en su rostro se dibujó una gran sonrisa la cual decidió dedicársela a su curandera. Mipha sonrió tímidamente mientras sentía como se sonrojaba.

- No eres de muchas palabras, sin embargo, eres un muchacho muy travieso. Si alguna vez vuelves a necesitar que alguien te cure esas heridas ya sabes donde puedes encontrarme

En cuanto el pequeño Link se marchó y Sidon y Mipha se quedaron a solas, Sidon tiró del brazo a su hermana con mucha curiosidad pues era la primera vez que la veía tan feliz.

- Mipha, hoy has estado muy extraña desde la llegada de Link. ¿A qué se debe?

- Sidon... Siento en mi corazón una gran alegría, es posible que yo me haya... ¿Enamorado de Link?

- ¿Como papá y mamá cuando se conocieron?

- Por favor Sidon no le cuentes nada de esto a Muzun, se que padre y madre lo entenderán pero Muzun jamás aceptaría que una princesa Zora como yo se enamorase de un humano

Sidon, muy energético asintió con la cabeza pues jamás traicionaría a su hermana Mipha a la que quería tanto como a su madre.

- ¿Qué te parece si volvemos a casa y seguimos con la historia que dejamos ayer a medias?

- ¡Me parece genial hermana!

Tomando la mano de Mipha, Sidon se sentía realmente feliz tanto con su familia como con su hogar lo que ninguno de los dos comprobó fue que entre las sombras una figura de lo mas sospechosa los observaba en silencio. ¿Qué podía ser aquella sombra? Lo que ninguno de los Zora sabía es que ahí empezaba una época de dolor para ellos.