Fantasía Corrompida.

26 2 1
                                    

hola!, un gran saludo departe del creador de esta historia,esta historia es algo hacia como una prueba si les llega a gustar mucho, dejen un comentario o simplemente voten,  así yo sabre que la historia le gusta  y así tendré ánimos para continuarla.

realmente agradezco el que lean gracias.





*me encontraba flotando, en un especie de vació, no sabia el por que, el cuando o el como, solo sabia que esta hay, sea donde fuera que me encontraba, en fin que podía hacer mas que explorar por mi propia cuenta el lugar para saber si por lo menos había algo, pero espera mi voz, no puedo pronunciar ni una sola palabra, pero ¿por que? este lugar se ponía cada vez mas extraño, la ultima cosa que recuerdo es que me encontraba durmiendo en mi cama cerré mis ojos, y pum!, de un momento a otro me encontraba aquí.*

-a lo lejos se podía escuchar una leve y reconfortante voz de alguien que no fuera la mía-
-este por alguna razón dejo de flotar y cayo de golpe al suelo haciendo que este quedara inconsciente del golpea fuerte que se había dado.-

*desperté en un extraño sitio parecía ser una casa, y podía escuchar sonido al fondo había alguien revisando una especie de bolsa medica o algo así, me levante sigilosamente tome lo primero que encontré para defenderme de el, me hacer que con cuidado, levante mi brazo para intentar golpearlo, pero antes de que yo pudiera ejecutar aquella injustificada acción desapareció, fue tan solo en un parpadeo no podía creerlo, luego empece a buscarlo con la mirada, mi sorpresa fue grata al ver que el seguía en la casa pero aparentemente en la cocina.*

???: chico sera mejor que vengas a a comer algo si es que no quieres morir de hambre!
-dijo aquel muchacho alto, delgado con perfecta melena pelinegra, dentadura perfecta, lindo rostro y trasero redondo y voluminoso.-

*es el chico de mis sueños pero que ¿por que alguien como el estaría en un lugar como este? ¿que hago yo en un lugar como este? bueno hay que ver el lado positivo, no es posible que alguien tan lindo sea alguien malo.*

-me senté en la mesa que se encontraba en aquel lugar podía ver a través de la ventana se veía como la luz del sol entraba por hay, aquel chico me había servido un plato de deliciosa comida casera aparentemente hecha por el, y sin dudarlo un poco empece a comer rápidamente me encontraba muy hambriento como si no hubiera comido hace días.-

???: vaya parece que si tenias hambre después de todo, ¿que hace alguien como tu en un lugar como este? no pareces de este lugar ¿tienes un nombre?.
-este recogió el plato en el que sucio que había quedado después de que yo termine de comer y empezó a lavarlo.-

*yo si tengo nombre me llamo armand, estoy perdido en este lugar y...es cierto no puedo hablar ahora ¿como podre hacerle saber lo que pienso?

-empece a balbucear pero no se podía escuchar ningún sonido mas que el de mis labios moviéndose-

ronex: vaya vaya un defecto, bueno si tu no puedes hablar sera mejor que yo te diga mi nombre, soy ronex, fantasía numero 3! y tu mi defectuoso amigo no deberías estar aquí deberías estar con los otros errores.

-este acaricia mi nariz de una manera dulce y amable como si supiera perfectamente lo que pasaba por mi mente-

*¿defectuoso?¿yo? ¿errores? de que esta hablando esto pasa de ser un lugar amigable a un lugar raro, pensé que los chicos lindo no acarreaban problemas, ¿pero que¡?*

-este sintió como aquel chico le tomaba de los hombros, para ante mis ojos ver como este se convertía en una horrenda masa deforme, quitando le todo la hermosura que tenia en si, en un esfuerzo desesperado por salir vivo de ese lugar, pude hacer que me soltara y como consecuencia este empezó a perseguirme y como reacción de aquello empece a correr, todo el lugar empezó a caer ante mis ojos, todo se desvanecía y parece que aquella cosa corría mas rápido para atraparme, de pronto algo paso, un gran sensación invadió mi pecho y me hizo fijarme en una de las puertas, al parecer la ultima de todas, corrí lo mas rápido que pude para alcanzar aquella puerta, pero en mi torpeza tropecé y caí al piso, aquella cosa se acercaba, pude pararme y abrir la puerta y al estar a punto de cerrarla esa cosas tomo mi brazo y empezó a jalarlo con mi mucha fuerza, suéltame! moco asqueroso!!!, solté un fuerte golpe en su gorda y verde cara alejándolo y cerrando la puerta. mi respiración estaba agitada. la adrenalina recorría mi cuerpo, no sabia que había pasado, pero no quería que volviera a pasar y algo reconfortante paso había pasado, en el suelo había hierba verde y un gran cielo azul, tal vez al fin pasaba algo bueno en este día extraño-

Goteras.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora