Love, Sweet Love - Jung Hoseok

-c u a t r o-

Me desperté por mi alarma y me senté en la cama. Al principio no entendí donde estaba, pero me acordé cuando vi otra cama al lado de la mía y en ella, un chico que todavía dormía.
Decidí acercarme y simplemente no pude no hacerle una foto a este angelito.

Se movió un poco y me aparté corriendo, temiendo que me descubriese haciéndole fotos y pensará que soy una stalker psicópata.

Al ver que todavía no se despertaba hice mi cama y me fui a prepararme para el día.
Me fui al baño y me duché, me maquillé un poco y me vestí.

Ultimamente me gustaba ir en faldas.
Es muy raro de mí, ya que siempre iba con pantalones anchos y camisetas iguales de anchas que los pantalones.
Mi pelo estaba siempre en la mismísima mierda, pero ahora me lo cuidaba más. No entiendo lo que me pasa. Nunca antes había sentido esto.

Cuando volví a la habitación, Hoseok ya se había levantado. Estaba sentado en su cama, rebuscando algo en su móvil y al verme me sonrió y me dijo:

-¡Buenos días, Polina!¿Dormiste bien?

Me quedé un momento callada pero le contesté de la forma mas adorable posible.

-¡Si! Y,¿que tal has dormido tu?

-Bien, he soñado que nos lo pasábamos genial en los próximos retos.

Me sonrojé ya que era la reina de mal pensar. Me giré mientras decía "Espero que así sea" con voz alegre para que no lo note.

-Deberías vestirte. Voy a salir ha saludar a mis amigas y vuelvo.

Salí del apartamento y escribí a Dasha. Me escribió que ya estaba despierta y que se aburría mucho porque Taehyung todavía dormía.

Toqué la puerta y Dasha me abrió de inmediato. El apartamento no se diferenciaba en mucho, solo que los colores eran más oscuros que en el nuestro. Taehyung todavía dormía como un bebé y le dije a Dasha que el siguiente reto iba a comenzar muy pronto y que debería despertarlo.

-Vale, pero tú cámbiate que hace mucho frío fuera. Ha comenzado a nevar.

-¡Bien, nieve!- grité y Taehyung se despertó.

-Buenos días, Dasha... - murmuró él y se tumbó otra vez en la cama.

Decidí dejarlos solos para que Dasha lo despierte y yo me fui a cambiar.
Como empezó a nevar no quise complicarme y me puse todo lo que creía lo que me quedaba bien.

Hoseok al verme con ropa de invierno, también se empezó a cambiar a algo que le calentara más.
Salimos del edificio Dasha, Taehyung, yo y Hobi. Nos pusimos todos una mascara para que no nos reconocieran, o mejor dicho para que no reconocieran a los chicos.
A Hoseok se le pusieron las mejillas muy rojas a causa del frío. En Rusia ya hacía frío casi todo el año, así que nosotras dos estábamos bien.
Como ya se había acumulado una cantidad aceptable de nieve en el suelo, cogí un poco e hice una bola de nieve y se la tiré a la cara a Dasha. Esta tenía pinta de estar enfadada pero yo solté una carcajada ruidosa y me dispuse a salir corriendo antes de que me pegara. Los chicos parecían divertirse y al cabo de un rato, los cuatro habíamos montado una guerra de bolas de nieve.
Cuando salieron los demás, los cuarto estábamos empapados por la nieve derretida y todavía tirándonos aún más nieve.
Me resbalé y me caí al suelo y me reí por ser tan patosa, pero Hobi se acercó y me ayudó a levantarme. Cuando me levanté,  accidentalmente los brazos de Hoseok me empujaron hacia él, le sonreí y le agradecí.
Nos sentamos en el autobús que nos llevó a un campo donde se organizará el siguiente reto.
Cuando nos lo explicaron, me interesó bastante la idea. Teníamos que hacernos fotos los unos a los otros.
Cada pareja tendrá una cámara para hacerse solo 1 foto por persona.
Hoseok salía increíble como siempre. Cuando Hoseok me iba ha hacer la foto, Dasha pasó por detrás de él y me hizo reír. Cuando Hobi tomó la foto, salió mejor que me esperaba.

Después de las fotos los managers nos dejaron un tiempo libre después de todo esto.

Decidimos ir a darnos un paseo rápido por la ciudad.

Cuando volvimos en autobús Hobi y yo nos dormimos otra vez en los asientos traseros.
Solo la parada brusca del conductor hizo que me despertara.
Hoseok seguía dormido al lado mío pero necesitaba despertarle. Así que le agité suavemente y le dije:

-Hobi, despiértate.

Solo con eso le bastó con despertarse y sonrojarse hasta las orejas.

-¡No hagas eso! Casi me das un infarto...

-Lo siento...

Se levantó de su asiento, cogió su abrigo y salió del autobús.
Salí yo detrás de él, cuando todos ya se habían ido.
Antes de entrar en el hotel me acordé que tenía que ir a comprar unas cosas a la tienda.

Cuando volví, Hobi estaba en la entrada del hotel mirando por todos los lados, buscando algo o alguien.
Cuando pasé debajo de una farola y me iluminó la cara, Hoseok se acercó corriendo hacia mi y me cogió por los hombros.

-¿Dónde estabas? Estaba preocupado....

-Estaba comprando algo en la tienda...- miré mi reloj, ya eran las 1:23 de la mañana.- Bueno, supongo que ya puedo felicitarte. -cogí aire, sonreí y le dije desde el fondo de mi alma.- ¡Felicidades, Hoseok! Espero que hoy sea otra vez el mejor día de este año. Y gracias a tus padres por traer a una persona tan genial como tu.
Saqué de la bolsa una tarta y se la entregué.
Hoseok estaba muy confuso. Miró el reloj y se rió. Unas lágrimas escaparon de sus ojos.

-¡Gracias, Polina! Tu eres aún más increíble haciéndome esto. - y me abrazó.
Me emocioné tanto que le besé en la frente. Él era el doble de alto que yo y tuvo que agacharse para que le besara.
Los dos entramos en nuestro apartamento y llamamos a los demás para celebrar el cumpleaños de Hobi.
Yo encendí música y todos bailamos y nos divertimos.
Nastya preguntó que donde estaba el alcohol y yo contesté que era demasiado pronto. Dentro de un rato saqué una dos botellas de vodka ruso y las chicas empezamos a beber un poquito.
BTS se cortó un poco pero al final cedieron y también nos acompañaron.

Al cabo de una hora, los chicos estaban borrachos, ya que nos acabamos las dos botellas entre 14 personas.

Jimin se acercó peligrosamente a mi y me empezó a balbucear algo que ni siquiera entendía. Luego me intentó besar pero me giré y me besó en la mejilla. Me empezó a oler el pelo.
Me estaba poniendo nerviosa.
Alguien empujó a Jimin para que yo estuviera fuera de su alcance.
Hoseok se acercó a Jimin y le cogió por el cuello y lo empujó contra la pared. Parecía enfadado.
Me acerqué a Hobi y le dije que parase, que le estaba haciendo daño. Él se giró hacia mi y me miró a los ojos. Sus pupilas estaban muy dilatadas. También estaba borracho.
Me dijo algo que no entendí muy bien. Jimin se intentó soltar, pero Hoseok se giró rápidamente hacia él y le grito algo que esta vez si que pude entender.

-¡Ella es mía! ¿Lo entiendes? ¡No te acerques a ella!

Abrí mucho los ojos y el mundo se paró a mi alrededor. Solo podía escuchar los latidos de mi corazón, que se fueron acelerando cada vez más.
Separé a los dos chicos y me llevé a Hoseok, dejando a Jimin un poco confundido.
Hoseok se estaba tropezando mientras me seguía. Lo llevé al baño y le mojé un poco la cara con agua helada. Se retiró al notar el agua fría con su cara que estaba caliente a mas no poder.

Dije que se fuese a dormir y me aseguré de que llegaba hasta la cama. Volví al salón y mes dije a todos que ya era hora de dormir y se fueron todos. Jimin me mandó un beso al aire, y yo cerré los ojos, sonreí y negué con la cabeza.
Él también sonrió y salió del apartamento.
Me cambié a mi pijama y me tumbé en mi cama. Me dormí en seguida.