Mingyu le había dado la razón a SeokMin en el hecho de que necesitaba ser claro con Wonwoo y decirle que le gustaba, sólo eso, expresar lo que sentía y si tenía suerte podía iniciar algo más profundo con él otro y terminar de conocerlo. Eso era todo, pero era muy difícil. Usualmente las palabras se perdían en su garganta cuando tenía que hablar con el pelinegro sobre cualquier cosa, así que reunir el valor para declararse le resultaba aún peor. El día martes no habían tenido clases debido a celebraciones nacionales y sólo el jueves habían retomado el horario. Ese día había asistido resuelto a decirle todo y le había pedido que se encontraran en la biblioteca luego de clases; era el lugar perfecto pues era solitario y tranquilo, pero al encontrarse con el mayor, su valentía había muerto, las palabras habían huido y su cerebro se había puesto a dormir.
—Minggu-ah, ¿estás bien? ¿Qué es lo que quieres decirme?
—Si, estoy bien, solo que... Olvidé lo que iba a decir —mintió.
El pelinegro entrecerró los ojos con pequeña desconfianza, pero afortunadamente lo dejó pasar y empezó a hablarle sobre cómo debía prepararse para la semana de exámenes y la extrema flojera que le daba todo eso. Mingyu le entendió completamente, ya que él tampoco era un estudiante ejemplo y sus notas las debía al estudio constante.
—¿Quieres estudiar conmigo por las tardes? Es decir, probablemente no estudiemos para lo mismo, pero podemos hacernos compañía.
—Vale, me encantaría Minggu, pero hoy no —dijo el pelinegro acomodándose la mochila en la espalda—, ¿Quieres acompañarme a hacer algo importante?
—Seguro.
Ambos salieron de la biblioteca en silencio, y caminaron por los pasillos casi vacíos uno al lado del otro hasta salir del edificio. Varios de los estudiantes que aun rondaban por las instalaciones se les quedaban viendo e inevitablemente se sentía algo cohibido por el asunto de ser tan observado, él no quería crear malos entendidos, no quería ser parte de los rumores que siempre rondaban por los pasillos. Sin darse cuenta había ralentizado el paso, quedándose atrás.
—¿Sabes? No hay que darle mucha importancia a lo que piensen otras personas, mi mamá solía decirlo —comentó el mayor alcanzándolo; le tomó de la mano y le dio un apretón mientras sonreía—, si dejamos que los comentarios ajenos nos afecten entonces viviremos aburridos.
Se sintió mal porque el otro notase su actitud y le devolvió una media sonrisa llena de pena. Se regañó a sí mismo por actuar de forma tan ridícula y apretó con más convicción la mano ajena, retomando el paso para salir del edificio. Varios cuchicheos y comentarios los siguieron en su camino hasta que perdieron de vista el edificio del colegio, no habían ido a la parada de buses sino que caminaban por el vecindario.
—¿A dónde vamos?
—Vamos a buscar a mi hermano menor, hoy es día de nuestra visita y bueno, tengo que buscarlo.
—¿Visita a donde?
—Verás, es algo complicado... —dijo Wonwoo y Mingyu le apretó la mano en un gesto de que podía contarle—, La custodia legal de mi hermano la tiene mi abuela y ella vive aquí en Seúl, yo como soy mayor de edad y puedo valerme por mi mismo, vivo en la granja de mi abuelo con él y mi padre en Changwon.
—¿Y qué hay de tu mamá?
—Murió, hace un año.
—Joder, no debí preguntar —bisbiseó el moreno—. Lo siento mucho...
El mayor le restó importancia con su mano libre y Mingyu dibujó círculos con su pulgar sobre la mano ajena que sostenía; Ni siquiera podía imaginar cuán duro podría ser perder a su madre, pero estaba seguro de que había sido difícil para el mayor.
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Se Dice de Ti ➳ Meanie
Fiksi PenggemarDe acuerdo a los rumores de la escuela Jeon Wonwoo es todo lo que Kim Mingyu debe evitar. Pero su curiosidad es más grande y quiere saber si todo lo que dicen sobre el mayor es cierto aun si eso significa dejar muchas cosas de lado. Y puede que tal...