UN ULTIMO ADIOS

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Era de mañana, desperté muy feliz, dispuesto a lo que me pidieran, mi celular vibro, lo tome rápido y note que era una amiga, me sorprendió lo temprano que me ha enviado este mensaje, lo tome muy feliz y se lo conteste, estuvimos hablando un largo rato por el llamado whatssap, pero ella iba a salir así que nos tuvimos que despedir, aunque yo no quería, y me limite a estarla reteniendo lo mas que pude, no se porque pero algo me decía que no la dejara ir, que algo malo pasaría, y aunque intente olvidarle, no podía, simplemente, no podía, al final ella llego a amenazarme y me dijo Tranquilo ni que me fuera a morir en el camino no entiendo porque pero esta frase, esta pequeña frase me hizo soltar una pequeña lagrima, me regañe por hacerlo, pero me desconcerté por aquello, finalmente le permití irse, y me sentí culpable cuando le dije Esta bien, ya te puedes ir, bay, cuídate mucho.

Ella se fue y a las pocas horas de esto me entere que ella había sufrido un accidente.

Al instante me sentí culpable, impotencia, me quería matar por haberla dejado irse, rompí todo a mi paso, no me importo nada, me sentía muy mal. Siempre creí que eso de que la gente llore porque pierde a un amigo era una tontería, pero ahora los comprendo, es un dolor muy profundo, difícil de superar, sientes que todo el mundo se te va abajo. Ha pasado un día, UN DÍA, desde que el accidente paso y ya no aguanto, no como, no me aseo, no limpio el desastre de mi alrededor, el sentimiento de culpa no se va, no recibo a nadie, le grito a todo el mundo, y aunque se que no es su culpa, se que quizá si sea la mía, por dejarla ir, lloro cada noche, lamento tanto que ya no existe en este mundo, que ya no la veré, que tendré que decir un simple Te quise mucho, cuídate del otro lado, pero se que no podre, no podre, estoy invitado a su funeral, es mañana pero no creo poder ir. 

Me niego a ir rotundamente, no quiero verla ahí en esa tumba tan fría, y a su cuerpo ahora tan frió como el hielo y sin una pizca de vida. Necesito aire, salgo por primera vez de esa habitación en la que he estado lamentándome y me dirijo inconscientemente al parque donde la conocí, me recuesto exactamente en el árbol donde siempre hablábamos y empiezo a hablar como un loco, solo, quien lo diría, he empezado a hablar solo, aunque no lo siento así, no me siento solo, en realidad, me siento bien, siento como si ella estuviera aquí, a mi lado, vuelvo a soltar una lagrima y sin saber porque continuo hablando.

Sabes que te extrañare......

Mas que ha nada......

Eras mi mejor amiga, perdón eres......

Se que llego tu tiempo, que te tienes que ir, pero porque así...... -volví a llorar-

Una extraña voz que nadie mas que yo escuchaba comenzó a hablarme, y la reconocí, reconocí que era su dulce voz, y miles de recuerdos invadieron mi mente, y me imagine a ella viva, mientras hablábamos.

Ya no llores por mi, 

al fin encontré mi lugar,

espero verte pronto, en un muy rejado tiempo,

te quiero lo sabes, 

Yo igual te quiero, quiero abrazarte y se que no puedo

pero yo te extrañare, tenlo por seguro

Adiós espero verte de nuevo -volví a llorar aun con mas fuerza de lo que ya estaba-

Ya no llores por mi

yo estoy en un lugar lleno de luz

quiero que seas feliz

que te valla bien

y que cuando nos volvamos a ver sea aquí

Ambos dijimos ADIÓS al mismo tiempo y mi imagen de ella desapareció. Deje de llorar, me sentía de cierto modo mejor, pero aun así la extrañaba. Nunca fui al funeral de ella, porque sentía que ya le he dicho adiós y no me hacia falta repetirlo porque ella ya lo sabia.

Los años pasaron. Mi vida siguió adelante y ella seguía en mis pensamientos y aun la extrañaba pero ya no me hacia llorar, solo recordaba buenos ratos que pase con ella, ahora cada noche la recuerdo muy feliz y la extraño dulcemente.

Un ultimo adiós ~TERMINADA~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora