Capítulo 29: ¿Dónde estás?

483 41 6
                                    


Nuevamente recomiendo escuchen la canción mientras leen, Gracias por el apoyo y Feliz Navidad a todos 

La mañana estuvo templada vestida de gris a causa del manto nublado que el cielo les regalaba sin embargo, pese al mal clima Camila se encontraba sumamente feliz por la hermosa noche anterior que había pasado con Lauren pero al entrar a su apartamento encontró desesperada y molesta a Lucy.

Lucy: ¿Dónde está? ¿Dónde?

Camila: ¿Quién? ¿De que estas hablando?

Lucy: Lauren...huyo, se fue, no sé dónde está, no volvió a noche a casa, pensé que estaría contigo.

Camila: No, ella volvió a la medianoche. –explicó-. Nos despedimos y quedamos en vernos hoy en la mañana.

Lucy: Te mintió ya que no volvió.

Camila: ¿Por qué se iría?

Lucy: Esta triste ¿Por qué crees que se iría?

Camila: Vamos, no sería capaz... ¿O si lo haría?

Lucy: Mejor vamos a decirles a las chicas que nos ayuden.

Pasaron días hasta semanas en su búsqueda pero no había rastros de ella en ningún lugar. Lauren había desaparecido por completo, nadie sabía de ella, nadie la había visto, las chicas estaban pensando lo peor ¿Lauren se habría alejado del mundo para poder irse sin nadie que la detuviera? ¿Estará bien? ¿Solo habrá buscado un momento de paz sin nadie que la interrumpiera? Nadie lo sabía y nada podía asegurarlo, el clima todo ese tiempo fue templado, no se notaba el sol, aunque era de día, no se veían las estrellas y la luna aunque fuera de noche, el manto que cubría la ciudad era uniforme de un solo color. El cielo lloraba cada noche junto con Camila mientras esperaban Lauren pudiera aparecer.

Días después de haberse rendido todos en su búsqueda Camila decide emprender una caminata más en su búsqueda por el centro de la ciudad y en eso termina encontrándose con Tyrone, quien a regañadientes termina mencionándole que vio a Lauren hace unos días por un motel de mala muerte de nombre Squeeze. Camila fue lo más rápido posible para el lugar pero no logro encontrarla aunque gracias a unos vecinos pudo confirmar que sí, Lauren estaba viviendo ahí, para la medianoche volvió con la esperanza de encontrarla en su habitación.

La noche estaba templada y bastante fría mientras unos pandilleros frente al motel hacían la atmosfera con la canción Gucci Gang no pudo evitar sentir miedo ante la noche capsulada bajo aquella vestidura tenebrosa entre el frio que rompía cada respiro, cada aliento de la joven Cubana por fin termina llegando a la habitación XVII al tocar varias veces y sin ningún resultado; da por necesario entrar sin su consentimiento y al entrar es espectadora de una triste escena, el hombre Tyrone se encontraba sentado en su cama sin camiseta y ajustando sus pantalones, no habría que hacerse idea de lo que había sucedido, era más que obvio el hecho de que habían dormido juntos, él le regalo una sonrisa malévola a Camila mientras tomaba su camiseta para salir frente a ella. –está en el baño, es toda tuya-. Le musitó al odio mientras Camila se encontraba fría y sin habla ante su presencia, el vello de sus brazos se erizó le era imposible creer que ella lo habría hecho lo cierto era que Camila no entendió nunca que ella sí lo hizo, pero solo porque se estaba perdiendo en su búsqueda de su despedida. Camila entro al baño temblorosa pensando en lo peor, pensando en que estaría tras esa puerta marrón cubierta de agujeros, manchas y residuos humanos; y justo ahí estaba en la bañera, completamente desnuda, hundida con sus brazos extendidos en ella, corrió agitada para sacarla de ahí, Lauren en su muñecas tenia notorias cortadas y en el agua flotaba un empaque de medicamentos para el sueño, lo que era de esperarse ella estaba buscando su muerte. Camila la seco, la curo, la limpio, hizo todo lo posible porque Lauren despertara después de varios minutos de intentos, despertó.

Lauren: ¿Camila? –musitó escupiendo algunas pastillas mientras brotaba de sus labios un poco de agua.

Camila: Si, aquí estoy. –exclamó peinando su melena con sus dedos.

Lauren: ¿Qué haces aquí?

Camila: Es bastante obvio, que hago aquí.

Lauren: ¿Por qué?

Camila: Porque tú no puedes morirte hasta que yo muera.

Lauren: Estas loca. –exclamó-. ¿Y si eso nunca sucede? –agregó.

Camila: Entonces, creo que seguiremos juntas hasta que la muerte lo decida. –explicó-. La muerte, no tú, Lauren.

Same Place IIWhere stories live. Discover now