Villa enamorado,oso amoroso, El Quebrantacráneos y una rubia a la fuga

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Le miré a los ojos. Su mirada apuntó a la mía. Había llegado el momento que temía: debía hablar con Villamil sobre lo que pasó esa noche.

-Yo...- Solté para iniciar la conversación.

-Laura, no hace falta que digas nada. Me he enamorado de una chica. Puedes ser feliz con Isaza sin remordimientos. Estábamos borrachos... Y tu habías fumado bastante...- Dijo Villamil.

-Vaya... Me alegro muchísimo por ti.- Le felicité.

-Mejor no volver ha hablar de esto en un tiempo... Un tiempo muy largo.- Sonrió.

-Eres alucinantemente idiota.- Objeté mientras le abrazaba.

Volvimos con los demás. Agarré a Yoru en brazos. Isaza intentaba descifrar si habíamos hecho algo con la mirada.

-Isaza, no hemos hecho nada.- Le dije cuando su mirada empezaba a incomodarme.

Isa lanzó un largo suspiro como si se hubiese sacado un gran peso de encima. Yo en cambio estaba preocupada: Dentro de un par de días empezaría mi gira por Latinoamerica junto a Morat. Y seguramente tocase el piano. Nunca he tenido miedo de tocar el piano: tengo dominado al 100% ese instrumento. Lo llevo tocando desde muy pequeña. Pero nunca he oído a Isaza tocar el piano en directo y no quiero sacarle esa labor del grupo. A él no parecía preocuparle mucho. ¿Hay algo que le preocupe a Isa? No creo... A mi, en cambio, me preocupaban muchas cosas. Sobre todo en el amor... Cuando le miraba veía a un joven sin preocupaciones ni problemas, simplemente es feliz. Y me duele que la única vez que le he visto llorar fue por mi culpa. De repente sentí que algo faltaba en mi vida... ¡Era María! Corrí hacia su habitación. Me encontré una nota de despedida:

"Hola, chicos

Lo siento mucho, pero no he podido aguantar más. Me vuelvo a Barcelona una época. No me vengáis a buscar por que no volveré. Decirle a Martín que amo con locura, pero necesito aclarar ideas. 

Besos, María" 


-¿María se acaba de ir?- Preguntó Villamil en shock.

-Una rubia a la fuga.- Añadió Simón.

-Con todo el trabajo que tenemos encima y esta se va...- Dije enfadada.- Yo la mato.

-Déjala... Que se vaya...- Soltó Martín.- Nos debemos concentrar en la música.

-Tienes razón, Marto.- Le dio la razón Isaza.

-Vamos al estudio....A cantar...- Dije mientras miraba la nota.

Fuimos hacia el estudio en la furgoneta. ¿Qué cojones acababa de pasar? ¿Mi mejor amiga acababa de volver a un sitio donde me dijo que ninguna de las dos sería feliz? Llegamos al estudio. Nos hicieron una especie de concurso para determinar quién tocaría el piano en la gira.

Ambos tocábamos prácticamente igual. Pasábamos los dedos por las teclas con fluidez. Nos pusieron la canción de Si tu te vas para ver quién tocaba mejor. Ambos tocábamos totalmente igual. Al final decidieron que tocásemos en un concierto cada uno empezando por mi. 

-Tiene huevos que una niña de 19 años toque igual que tú, Isaza.- Se rió Simón.

-Me vuelves a llamar niña y te meto el piano por el culo.- Sonreí.

-Tienes carácter, me gusta.- Dijo Pedro.

-Así empezó mi novio.- Solté.

-¿Tu novio también es un niño?- Se burló.

-Más bien te saca unas dos cabezas, va al gimnasio y en su barrio le llaman "El Quebrantacráneos"- Contesté sonriendo.

-Te lo estás inventando.- Dijo Simón.

Enamorada de ambosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora