Los Hijos de La Luz "El Cristal y la Cinco Espadas"

La Lágrima de Dios

Jhon al notar mi tardanza, sale de la casa en mi búsqueda. Al encontrarme me ve abrazando a Miguel y dice —Por un momento creí, que esta búsqueda había terminado —.

Volteándome hacia él le dije —y yo creí que nunca me volverías hablar —, aunque al mirarlo note que estaba celoso.

— Sera mejor que entremos, nos están esperando para cenar. Además tenemos que ir al hospital —dice Jhon.

— Es cierto hay que llevarle comida a Enrique y Dimitri —le dije.

Al entrar a la casa el Señor Zabat nos dice —Ya iba a enviar a Abdul-ah y Sed a que los fueran a buscar —.

— Disculpe si nos demorados —le dije, mientras me sentaba en una de las almohadas.

Durante la cena Miguel lo único que comía era fruta, el señor Zabat al observar que no le prestaba atención al resto de la comida le dice — Acaso no te gusta la comida —.

— No es eso, solamente yo como frutas —le dijo Miguel.

— Entonces eres vegetariano —le dice el Señor Zabat.

— Si —le responde él, para que no continúe con su interrogatorio.

Al terminar de cenar la Señora Amiry nos entrega una cesta con fruta y algo de comida. Entre tanto el señor Zabat nos dice —Los espero a fuera —. Al salir de casa subimos nuevamente al Jeep rumbo al hospital.

Al llegar en toda la puerta de la entrada del hospital nos esperaba Enrique y al vernos nos dice —Ya era hora, tengo hambre e igual Dimitri —.

Al ver a Miguel nos dice — ¿Quién es él? —.

— Te acuerdas que te habíamos mencionado a Miguel, te lo presento. Miguel – Enrique, Enrique – Miguel —le dije, entregándole la cesta de comida.

Enrique abre la cesta y dice —mamá Amiry si me quiere —.

— Entremos mejor—nos dice Alan.

Entramos al hospital y caminamos detrás de Enrique por todo el pasillo, cuando nos dirigíamos hacia las escaleras el Señor Zabat nos dice —Los esperare aquí —.

El Señor Zabat se queda en la sala de espera mientras nosotros subimos las escaleras para dirigirnos al segundo piso. Al llegar al segundo piso entramos en la primera habitación que se encuentra del lado izquierdo del pasillo.

Dimitri al vernos entrar en la habitación dice —Al fin llegaste —.

— Quiero pedirles disculpa por no haber estado, cuando todo esto sucedía.

— No te preocupes Miguel —dice el Padre Damián.

— ¿Cómo se siente?, Padre Damián —le pregunta Angelín.

— Un poco adolorido, pero feliz de verlos —nos dice él.

— Y ¿esa cesta? —pregunta Dimitri.

— Se me está olvidando, es nuestra cena —dice Enrique.

Enrique rueda la mesa de cama y encima de ella coloca la cesta de su interior saca frutas y algo de comida. Mientras Dimitri mordía una de las manzanas le pregunto al Padre Damián —No piensa comer algo de los que trajimos —.

— No, con la intravenosa tengo es suficiente —me dice él.

Cuando mes sentaba en la orilla de la cama del Padre Damián, Dimitri nos dice —Me imagino que aun anda asustado después de lo sucedido —.