Él (Segunda Temporada)[TERMINADA]

Capitulo 14

En cuanto llegaba Ignazio comencé a recordar lo que Sarai me había contado. Realmente Gianluca y ella sufrieron a causa de Pía, no comprendo porque los separó.
-Sin duda fui su primer amor- comentó Sarai mientras le ponía un cubo de azúcar a su té -Pía lo sabía, y lo amenazo con hacerme daño sino la dejaba en paz, la verdad no se porque se quejaba tanto lo único que hacia Gianluca era decirle todas sus verdes- dijo Sarai y después le dio un trago a su té.
-La verdad no peca...- dije pero no termine de hablar porque Sarai habló.
-pero incómoda ¿no es así? Supongo que eso le molestaba mucho. Gianluca siempre trató que su amigo abriera los ojos y se diera cuenta del monstruo que tenía al lado- comentó -no fue hasta la noche en la que me graduaba de la preparatoria, esa noche algo especial iba a suceder lo sabía, para ese entonces aún no era la novia de Gianluca sólo éramos amigos- añadió mientras me miraba fijamente.
-Supongo que te pediría salir con él ¿no?- dije mientras con una cuchara le quitaba un poco de merengue al pastel.
-Así es, Gianluca quedo de acompañarme al baile de graduación, todo estaba bien hasta que llegó la hora del encuentro...- comentó pero no término, sus palabras se escuchaban temblorosas seguro lloraría -recibí un mensaje suyo, donde me decía que nos viéramos en la pizzería de Ignazio y que me olvidara del baile de graduación, una sorpresa me esperaba y así fue- siguió hablando Sarai ya sin voz quebrada.
-¿Entonces que pasó?- pregunté intrigada como si fuera un capítulo de telenovela.
-No llegue a la pizzería porque...- un silencio comenzó a apoderarse de la mesa -me secuestraron- añadió Sarai, yo la mire impactada.
Entonces lo demás tiene sentido, Gianluca creyó que Sarai lo dejó plantado pero la verdad era que la habían secuestrado. Fue ahí cuando Pía entró en acción (según las palabras de Sarai), la muy descarada aprovecho el secuestro de Sarai para presentarle a su amiga que ahora es la novia de Gianluca. Después de haber concretado su plan dejo en libertad a Sarai y le dijo que se fuera lejos tal como lo hizo conmigo.
-Lo único que esa mujer quiere es hacer la vida de los chicos miserable- habló Sarai cuando término su té.
-Sin duda pero ¿cómo sabes que era Pía quien mandó secuestrarte?- hable después de terminar mi café.
Sarai sacó una pequeña memoria y la dejó sobre la mesa:
-Míralo tu misma- dijo y cogió su bolso -cualquier cosa marcame- añadió mientras me daba una tarjeta a lo cual agradecí, después de eso Sarai se fue.
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El momento había llegado, por el ventanal de la cafetería vi arribar la camioneta de Ignazio. Mi corazón empezó a latir tan fuerte que seguramente mis latidos se podían escuchar de lejos. Me quedé inmóvil, era como sí algo me impidiese moverme de donde estaba, seguro eran los nervios. En aquel instante entró Ignazio y se dirigió hasta donde estaba y me dio ánimos para seguir adelante ya no había vuelta atrás y tampoco había mucho tiempo, debía hacerlo ahora antes que fuera demasiado tarde.
Camine con el hasta la camioneta y subí en la parte de atrás, Piero iba al frente con Ignazio.
Cuando subí al auto la fragancia de Piero inundó mis pulmones haciéndome sentir más tranquila.
-Hola amiga de Ignazio- dijo Piero mientras giraba a verme.
-Ammm... Hola- dije nerviosa, Piero se quedó un buen rato mirándome, Ignazio aún no subía porque fue a comprar café para Piero y él.
-¿Nos hemos visto antes?- preguntó Piero mientras me miraba.
-Seguro, íbamos juntos a la escuela... Yo...- pero de repente me sentí asustada y pensé "¿Pía se enterará de esto? Ya no quiero que los lastime más".
-¿Tu que?- habló Piero mientras trataba de buscar mi mirada.
-Iba en otro salón pero te conocía por tu talento- respondí alzando la cabeza después sonreí.
-Estoy seguro que ya te había visto antes en algún lado- dijo Piero y en aquel momento entró a la camioneta Ignazio.
"Si realmente supieras quien soy" pensé después vi a Ignazio mirarme por el retrovisor también quería saber lo sucedido.
"Tengo miedo" moví suavemente los labios tratando de no hacer ruido con ellos. Él hizo una sonrisa y movió su cabeza en forma de "No tengas miedo, todo estará bien". Después de aquello encendió la camioneta y nos dirigimos a la pastelería.
Durante el camino no deje de ver a Piero, no había cambiado para nada aunque ahora era mucho más apuesto. La melodía de su risa era arte para mis oídos, su sonrisa era medicina para mi alma y esos ojos eran mi tesoro más preciado.
-Oye, haz estado callada todo el trayecto ¿ estas bien?- comentó Piero viéndome por el retrovisor.
-Si- hable tratando de ocultar mis nervios.
-Oye, ¿conoces más palabras además de los monosílabos?- preguntó Piero.
-Si- respondí sin darme cuenta que había usado un monosílabo otra vez. Ignazio se río discretamente sin apartar la mirada del camino.
-Lo siento, soy algo tímida- hable fuerte para que Ignazio me escuchara y dejara de lado su risa.
-Ohhhh, ya veo ¿ustedes se conocen de hace mucho tiempo?- cuestiono Piero mientras volteaba a verme.
-Claro Piero, íbamos juntos a la escuela- respondió Ignazio mientras estacionaba la camioneta.
-¿Cuál es tu nombre?- preguntó mirándome fijamente.
-Ammm... Bueno yo... Mi nombre es...- dije nerviosa. Inmediatamente recordé aquel día cuando conocí a Piero, era nuestro primer año y a pesar de ser el tercer día aún no había logrado hacer amigos como los demás, fue cuando él se acercó a mi y me preguntó mi nombre, a lo que reaccioné tartamudeando y él se río de mi, después de eso siempre se sentaba junto a mi y poco tiempo después nos hicimos amigos.
-¡Corran! Acabo de ver la tarta ideal para mi cumpleaños- dijo Ignazio muy fuerte. Piero y yo volteamos a ver de inmediato a Ignazio quien ya iba corriendo por la calle, ambos reímos al ver aquella escena.
-Vallamos, tenemos que ver esa tarta- dije mientras abría la puerta y después bajé. Piero bajó tras de mi y camino a mi lado hasta que llegamos al interior de la pastelería.

Cuando entramos Ignazio se encontraba de gustando algunas rebanadas de pastel, al darse cuenta que estábamos ahí nos invito a comer con él, ya que teníamos que ayudarlo a decidir el sabor de la torta.
-A mi me gustó más el sabor vainilla- dijo Piero cuando acabo de comer.
-Yo voto igual que Piero, no soy muy partidaria del chocolate- hable antes de meterme el último trozo de pan a la boca.
-Bien, entonces está decidido será de vainilla- dijo Ignazio mientras que el pastelero anotaba algo en una pequeña libreta.
El pastelero nos enseño varios tipos de decoración y nos mostró varios estantes con pasteles muy bien decorados, fue cuando me detuve a mirar un pastel, en ese momento se vino a mi mente el último cumpleaños que pase con Piero, el diseño que veía fue el mismo que elegí para ese día.
-Yo tuve uno de esos- comentó Piero quien estaba detrás de mi.
-¿En serio? Es muy hermoso- respondí girando para quedar frente a el.
En aquel instante un silencio profundo invadió la pastelería, Ignazio y el pastelero se habían ido así que estábamos solos.
-Se que lo eligió una amiga tuya, por eso es especial aquel pastel- dije mientras me alejaba un poco de Piero.
-Así es pero ella se fue- respondió Piero cabizbajo.
-Pero, ella regresó y ahora estará más cerca de ti- comenté mientras me paraba en medio del pasillo.
-¿Cómo es que sabes todo eso?-cuestionó Piero mirándome fijamente algo extrañado.
-Bueno porque yo la veo todos los días cuando...- hablé pero no pude terminar porque en aquel momento alguien entró a la pastelería, ambos giramos para ver quien era y para nuestra sorpresa vimos a Pía.
-Vaya, me terminaste para venirte con esta tipa- habló Pía mientras caminaba hacia nosotros -¿al menos ya sabes quien es esta mentirosa?- añadió Pía mientras se paraba a mi lado.
-¿De que hablas Pía? Tu no sabes quien es ella, déjala en paz- habló Piero mientras me tomaba del brazo y me ponía detrás de él.
-Espero sigas defendiéndola como ahora cuando sepas quien es- dijo Pía mientras me miraba con enojo -¡Mírala bien! Ella es...- añadió Pía pero no término de hablar porque Ignazio apareció antes de que pudiese hablar.
-No te atrevas, dejamos en paz Pía,  no te metas en este asunto- dijo Ignazio parándose frente a Pía quien estaba roja de coraje.
Los tres salimos de la pastelería dejando atrás a la malvada.
-¿Qué fue todo eso?- preguntó Piero cuando subimos a la camioneta.
-Ya sabes como es ella, ama destruir la vida de los demás- respondí mientras me ponía el cinto de seguridad.
-Incluso sabes sobre Pía, ya en serio ¿Quién eres?- comentó Piero girando para verme.
En aquel momento Ignazio puso en marcha la camioneta y Piero se acomodó en su asiento, por ahora me dejara tranquila pero sé que indagara más sobre mi y eso me asusta y si pasa lo que dijo mi tía sobre que todo esto molestará a Piero ¿será que es cierto?descubre que pasará en el siguiente capítulo de Él.
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Hola mis queridos lectores!

Al fin estoy de vuelta y les traigo nuevo capítulo. La semana pasada ya no pude subir capítulo ya que surgió una situación delicada en mi familia y tuve que dejar a un lado la escritura de la novela por algunos días.

Como siempre espero que les guste ya que lo hice con mucho cariño para todos ustedes.
Gracias a todos los que votan (y a los que no también),😁leen y comentan la historia, muchas gracias de todo corazón. 💕 Además quería pedirles un favor: ¡Compartan la nove con sus amigas y amigos!
Por favor. 🙏

Bueno si el capítulo te gustó espero tu valiosa ⭐️ y tu comentario en la parte de abajo. Gracias. 👍
Saludos y Ciao!  👋