Mi café de los martes

Martes 10

El día empieza como siempre, me levanto , me visto , desayuno ,y por último voy al restaurante a trabajar .
Lagony es un pueblo pequeño , por lo que los trabajadores como yo solemos conocer a todos nuestros clientes.
La primera que entra por la puerta es Priscila , era mi vecina cuando mis padres aún no se habían separado , y es como una abuela para mí.
Le sirvo lo de siempre, un batido de chocolate con dos rodajas de naranja.
—Buenos días muchacho!—Dice Priscila tan alegre como de costumbre
—Buenos días Priscila,que tal está hoy?
—Pues genial ,como siempre!
Se de sobra que me dice eso para no preocuparme más , dado que hace unos meses le diagnosticaron una enfermedad muy peligrosa para su edad.
Derrepente la puerta vuelve a sonar.
Ahora entra Max con un grupo de gente, entre ellos  mi hermana Stefy.
—Que hay Alex!—Me pregunta Max  tan repugnante como siempre.
Max fue mi mejor amigo en la secundaria , pero mi hermana Stefy nos separo cuando empezó a salir con el , de eso hace ya 3 años.
—Que queréis que os ponga?
—Un expresso para todos!—me pide Stefy
Cuando voy a servir los cafés me doy cuenta de que una chica ha entrado en el restaurante.
Esta sentada junto a un señor mayor , el cual parece su abuelo.