bad romance ; jm + yg III

0002 ; don't try

POV JIMIN.

Él había apretado mi herida. Me había hecho otra de tantas heridas más, pero esta vez, rebotó mi cuerpo mortal. 

Cuando había llegado de Ándem, mi cuerpo de descompuso. Jungkook, quién estaba conmigo, tuvo que llevarme a urgencias, ya que por mi cuenta, no podía hacerlo.  

—Te has deshidratado mucho, cariño...—habló Jungkook mientras acariciaba mi, ahora pálida, mano— Me tenías con el corazón en la mano. 

—Lo siento, pero...—pensé que era mejor no decir la razón— No sé exactamente qué fue lo que sucedió conmigo, Kookie, perdón.—acaricié su mano. 

—No tienes que pedirme perdón, bobo. Tienes que ponerte bien, nada más.

Sonreí, a penas por el tuvo que tenía en mi fosa nasal. 

—Gracias por estar aquí, cariño. En serio.

Él me regaló una verdadera sonrisa. 

Pero esta fue muy corta, ya que unas de las enfermeras llegó en dónde yo estaba para anunciar que el horario de visitas ya se había terminado y que en dos minutos todas las visitas tendría que dejar el cuarto. 

—Mañana vendré, te lo aseguro, amor.—me besó y tomó su mochila. 

—Espera, ¿ya es de noche? 

La última vez que estuve en este mundo era de día, y no creo que el tiempo haya pasado tan rápido. 

—Pues claro, tú has llegado muy tarde de la universidad.—respondió.

—Ah, c-cierto...—asentí y lo despedí cálidamente.

Luego de que Jungkook se haya retirado, la comida llegó. Pero era poco rico y nada aquel intento de comida, lo único 'safable' fue el alfajor de postre. 

Un enfermero llegó para llevar la bandeja de comida, y apagar las luces. 

Cerré mis ojos con sueño, por fin voy a dormir y dejar de vivir un poco. 

...

No puedo mover mi cuerpo, mis ojos estaban totalmente abiertos y mirando a mi habitación totalmente oscura. Sentía miedo por esta parálisis de sueño, no quería desesperarme porque será peor y si no hago nada pues apuesto que tiro la para en cualquier momento.

Visualicé a una sombre oscura que estaba sobre mí, y no sentía pavor.

Presentí que este no tenía intención de hacerme daño. 

—Amor...—habló— Vuelve conmigo.

—¿Para hacerme más daño de lo que ya estás causando..?—pregunté— No deseo eso. Lo siento, Yoongi.

—¡No intentas arrancarme de ti, Jimin! Juro que no te dejaré.

Eso fue lo último que escuché después de que despertara de golpe y viera a un mundo de gente alrededor de mi camilla. Estaba un doctor haciéndome reanimación cardiopulmonar con sus manos, y muchas enfermeras a punto de inyectarme cosas que no conocía. 

Estas personas suspiraron y sonrieron al verme despierto. 

—¿Qué pasó...?—pregunté. 

Qué pregunta estúpida acabo de hacer. ¿Y por qué me harán una RCP? Dejé de respirar, para qué más me harían eso. 

—De repente, tus latidos han disminuido demasiado...—respondió el doctor mientras sacaba su estetoscopio y lo usó en mí. 

Después de analizarme, me dejaron solo para que pudiera descansar.