Abie {Ron Weasley}

Capítulo 6

Me siento como si no hubiese dormido nada, puede que porque no lo he hecho en realidad. Me he pasado gran parte de la noche pensando en el baile, en Ron, y cuando no estaba pensando en él estaba pensando en qué va ha pasar hoy, cuando me encuentre con Ron o Harry, o se lo cuente a Hermione.

Es pronto, así que decido levantarme y bajar a desayunar, ya que seguramente todos estarán cansados y no bajarán a desayunar hasta tarde, por lo que las posibilidades de encontrarme con alguno de ellos por el camino son bajas.

Sigo pensando en lo mismo de anoche mientras desayuno, hasta que llega Seamus junto a Dean y Neville, y salgo de mis pensamientos. Se sientan a unos cuatro sitios de mí y me saludan al sentarse, todos menos Seamus.
Cuando ya he terminado de desayunar me levanto para volver a la habitación, ya que los demás alumnos ya están empezando a llegar. Cuando paso por al lado de Neville, veo que Dean le da un codazo a Seamus y él se jira en mi dirección.
- Oye Abie... Lo siento, de verdad -me mira a los ojos, y sé que de verdad lo siente-.
- Da igual, Seamus. En serio, da igual -digo con una pequeña sonrisa, para luego irme-.
Cuando estoy pasando por la puerta del gran Comedor me topo con el Trio de Oro, justo lo que estaba intentando evitar.
- Hey, Abie, ¿donde estabas? Cuando me he levantado ya te habías ido -me dice Hermione, que aun no sabe nada de lo que pasó anoche-.
- Eh, bueno... Me he levantado tarde y tenía hambre, así que he bajado a desayunar -digo evitando las miradas de mis tres amigos-.
- Ah, bueno. Aun no hemos abierto los regalos ninguno, habíamos pensado en abrirlos juntos, ¿te parece bien? Y por cierto, ¡feliz navidad!
- Ah, sí, claro, feliz navidad. Oye Herms, te veo en la habitación, que tengo... Bueno, tengo que contarte algo.
- Vale... -la oigo decir mientras salgo corriendo en dirección a las escaleras-.

Ya en mi habitación espero hasta que llega Hermione.
- Abie, ¿qué pasa?
- Bueno, veras, ayer en el baile... A ver como te lo explico yo... Bueno, resumiendo, Ron y yo casi nos besamos y...
- ¡¿Qué?!
- Sí, sí, y Harry lo vio, pero no paso nada...
- Vale, espera un momento, ¿Ron y tú os besasteis?
- Casi nos besamos -la corrijo-,
- Vale... Bueno, tarde o temprano iba a pasar.
- ¿A qué te refieres?
- Por dios Abie, no me creo que aun no te hayas dado cuenta -ve mi cara de desconcierto y añade- ¡Ron te quiere!
- ¿Qué? No, no, no, él no me quiere, que casi nos basáramos no quiere decir nada, somos solo amigos, muy buenos amigos...
- Vale, tú sigue diciéndolo hasta que te lo creas, pero a mí no me engañas.
- Bueno, ¿vamos ya a abrir los regalos o qué?
- Sí, voy a avisar a los chicos, están esperando en la puerta.
- ¡Hermione! Podrían haber oído algo -digo mientras ella abre la puerta-.
- ¿Oír el qué? -pregunta Ron-.
- Que a Abie le gusta mucho el pollo, ¿empezamos o qué? -dice Hermione rápidamente y yo la miro con odio y alivio a la vez-.
- Eso no es ningún secreto -dice Harry entre risas-.
Empezamos a abrir los regalos: todos hemos recibido una camiseta con nuestra inicial por parte de Molly, la madre de Ron (adoro a esa mujer); Harry y yo, casualmente, nos hemos regalado un kit de cuidado de escobas nuevo que sacaron hace unos meses; Hermione y yo nos hemos regalado ropa y libros, ya que a ambas nos gusta leer; Hermione les ha regalado a Ron y Harry plumas y pergamino nuevo, además de un libro de Quidditch, y ellos a ella más libros; Ron le regala a Harry barios dulces de Honeydukes, y él una bolsa repleta de ranas de chocolate, además de unos cuantos "Dulces Salta Clases" que están creando lo gemelos; y llega el turno de que Ron y yo intercambiemos regalos: yo le regalo una sudadera de su equipo de Quidditch favorito, los Chudley Cannons, que me costó conseguir ya que salieron hace apenas una semana, y él me regala un libro que me encanta del que le hablé hace ya bastante tiempo. Me sorprende que aún se acuerde.
- Muchísimas gracias, Ron, de verdad, gracias -digo mientras lo abrazo, y él me devuelve el abrazo-.
- Ejem ejem -Harry hace una tos falsa para que nos separemos, y lo hacemos, pero rojos como tomates-.

Pasan los días y todo va bien, los cuatro hacemos como si nada hubiera pasado (aunque no llegó a pasar nada), más bien los tres hacemos como si nada hubiera pasado mientras que Harry de vez en cuanto suelta frases con doble sentido que hacen que me sonroje.

Sin darnos cuenta pasan los días y llegamos a la segunda prueba del torneo. Esa misma mañana no encuentro a mis amigos por ninguna parte, hasta que finalmente encuentro a Harry, pero es cuando quedan apenas unos minutos para que empiece la prueba.
- ¡Harry! Al fin te encuentro. ¿Estás nervioso?
- Si te digo la verdad, sí.
- Pues no deberías, lo vas a hacer genial -digo con sinceridad- ¿sabes ya como vas a aguantar la respiración tanto tiempo?
- Lo cierto es que Dobby... -pero entonces llega Dumbledore, lo que hace que todos nos callemos-.

La prueba ya está por acabar, Fleur se ha retirado y Cedric ha sido el primero en llegar junto a "Lady Cho". De repente veo asomar a la superficie lo que parece ser la cabeza de un tiburón, a la que le sigue el cuerpo de un hombre, que agarra a una Hermione calada hasta los huesos.
- ¡Herms! -digo mientras voy corriendo a cubrirla con toallas- Por Merlín, estás empapada.
- ¿En serio? Creía que cuando acabas de salir de un lago estabas seca -dice Hermione sarcástica, y yo me río- ¿y los chicos?
- Aun no han salido, son los últimos...

Queda ya poco para que la hora acabe cuando veo como una cabellera pelirroja sale del agua.
- ¡Ron! -voy corriendo hacia él- ¿Estás bien? ¿Qué ha pasado? ¿Por qué habéis tardado tanto? Estaba preocupada, creía que os había pasado algo, y... -digo rápidamente mientras lo abrazo-.
- Tranquila, estoy bien, estamos bien -dice el pelirrojo mientras me corresponde el abrazo y... Espera, ha dicho estamos... ¡Harry!-.
- ¿Y Harry? -digo separándome de él, por lo que parece molesto-.
- Está por ahí, creo -dice señalando a los demás ganadores-.
Veo que Hermione también está allí, así que voy hacia ellos.
- Harry -él se gira y lo abrazo- ¿estás bien? ¿Como te ha ido ahí abajo? -le echo una mirada al lago-.
- Supongo que bien, al menos he conseguido sacar a Ron y a la hermana de Fleur -dice encogiéndose de hombros-.
Es verdad, a conseguido sacarlos, pero ¿por qué a tenido que ser Ron? Entonces pienso en la canción: "... Nos hemos llevado lo que mas valoras..." ¿Es Ron a quien Harry mas valora? Eso significa que Hermione es lo que más valora Krum... Ugh, amor...
- Harry, no me puedo creer que prefieras a Ron antes que a mí... -digo fingidamente indignada-.
- Sabes que yo te prefiero a ti, pero seguramente he tenido que sacar a Ron porque él se hubiera puesto celoso -Harry y yo reímos, pero Ron está a nuestro lado con cara de pocos amigos-.
- Claro, porque yo soy celoso... Pues os aseguro que habría preferido no tener que estar en el agua durante una hora.
- Y yo te aseguro que no. Estar viendo un lago durante una hora, sin saber donde están dos de tus mejores amigos y sabiendo que a uno de ellos le podría pasar algo no es lo mejorcito del mundo que se diga -Ron se queda callado, y al rato se le quita el enfado-.

❋❋❋

¡Hola! He vuelto, y aquí tenéis el sexto capítulo, que es un poco soso, al menos para mí. En los próximos capítulos la cosa se pondrá más interesante.

¿Os gusta? ¿Qué queréis que pase en los próximos capítulos?❤

Att; Dobby