Salí detrás de Tom intentando alcanzarle. Hacía un par de minutos que el bus había parado. Estabamos en un área de servicio de Castellón. A una hora y media de nuestro destino.
- Tom! - abrí la puerta desesperadamente después de haber cruzado el estrecho pasillos de las miradas de todos.
Él seguía su camino. No caminaba como siempre, no iba relajado como de costumbre. Sus piernas estaban tensas y sus puños apretados. Entró en el baño de hombres para evitar que pudiera atraparlo.
- ¡Tom, por favor! - grité al otro lado de la puerta. Él no contestó - deberíamos hablar, sal por favor - seguía suplicando - Como no salgas voy a entrar... -
Me cansé de esperar, necesitaba contarle el porqué de esa decisión. Entré.
- ¿Qué haces? ¡Es el baño de hombres! -
- ¿Te crees que una simple pegatina me va a impedir hablar contigo? -
- Sí - dijo apartándome e intentando salir.
- Joder, Tom! - lo cogí por la camiseta.
- ¿Qué coño quieres? ¡Me has estado evitando toda la mañana, y ahora que soy yo él que no quiere verte no dejas de molestarme! - gritó con rabia.
Me sorprendió que me dijera eso. No esperaba esas palabras. Lo solté y me fui sintiendo un nudo en la garganta.
- Venga, sí. ¡Hazme ver como el culpable ahora! - volvió a gritar mientras me alejaba.
Volvía a subir al bus. Todos habían salido a estirar las piernas un rato y comprar alguna revista. Apreoveché para esconderme, pero.. ¿Donde? No podía volver a la cama de Tom, tampoco a la de Bill.. El otro bus ya había estado convertido en transporte de material y la nueva cama de las dos proximas ayudantes... Bien, Janna. Bien. Opté por encerrarme en el baño.
Nada me salía bien. Solo servía para hacer daño a los que se preocupan por mi... ¿Por qué?
Empecé a rebuscar en los cajones en busca de algo que me hiciera sentir el dolor que yo misma causaba a los demás. No había nada. Ni tijeras, ni cuchillas, ni una sola pastilla. Solo había una solución. Meterme los dedos hasta la garganta. Estaba a punto de hacerlo cuando una imagen me vino a la cabeza.
- Ayúdame, por favor - Era yo. Llena de cables, tumbada en una habitación de hospital delante de Tom. Un Tom mucho más mayor. Ese Tom del que me enamoré. Esa imagen, ese "recuerdo jamás vivido" me hizo parar y salir de se baño.
Todos volvían a estar dentro. Estábamos a punto de volver a arrancar. Me arreglé el pelo y evité cruzar mi mirada con nadie. Subí a arriba para esconderme de sus miradas de falsa comprensión.
Me senté en un montón de cojines que había en la parte delantera del segundo piso. Me dediqué simplemente a observar las vistas. Me puse los cascos y la música empezó a sonar.
A los pocos minutos un sobre con un lazo me cayó encima. Lo cogí y miré hacia arriba. Tom me lo había lanzado y estaba ahí delante parado.
- Feliz cumpleaños - dijo forzando una media sonrisa donde se escondía dolor.
- G-gracias - dije medio cortada.
Abríe el sobre y... Eran dos entradas con meet&greet para Black Veil Brides. Mi otro grupo favorito.
- Deberías decirle a Bill que te acompañe, de todas maneras no me gustaban tanto -
No sabía que decir. Después de todo eso...
- Pensé que también te gustaban - dije para intentar que no se fuera. Él solo se encogió de brazos y se giró dispuesto a irse. - Tom, espera - se giró - podemos hablar? -
Se sentó delante mio. Fue fácil de convencer.
- Qué vas a decirme ahora? - dijo mirándose las manos.
- Lo siento - levantó su cabeza - pero creo que era necesario que nos dieramos un tiempo..
- No has olvidado a Bill, eh? - pasó a Tom comprensivo. Ahora era un amigo.
- La verdad... No - vi como eso le dolió - Pero eso no quita que no sienta nada por ti -
- Como? Eso no tiene sentido... -
-Sí, claro que sí! Me gustais los dos.. Por eso no quería seguir más.. Sentía que os estaba mintiendo a los dos, que esataba jugando a dos bandas... -
- Tranquila, ahora creo que te entiendo... No te guardo rencor mientras sea verdad eso de que también me quieres a mi... -
- Jamás te mentiría en eso.-
- La verdad.. me pasa algo parecido -
ESPERA, QUÉ?
- Qué? -
- Sí, bueno.. Nadie sabe esto porqué pensarían que soy un moñas o que solo me quedé con las ganas.. Pero no. Hace tiempo, en nuestro último concierto en España.. Había una chica en primera fila que, cada vez que la miraba... Su sonrisa me distraía. Había prometido que no me acostaría con otra fan y por eso no podía pedirle a nadie que le consiguiera pases para backstage así que conseguí que le llegara una nota... Le decía que hiciera cualquier cosa para que la llevaran a donde la ambulancia... Y... Se dislocó el hombro.
- Tom... - no me sentía preparada para escuchar lo que seguía pero pensé que era los mismo que con Bill así que dejé que siguiera.
- Qué? -
- nada, da igual. Sigue - inspiré profundamente y aguanté las ganas de llorar.
- Bueno, pues eso. La llevaron al sitio de la ambulancia y estubimos hablando un rato. Me pillé de ella en menos y nada.. Pero jamás volví a saber de ella. Solo sé que se llama Patricia y es de Galicia? Se dice así? -
- Sí.. Y eso que tiene que ver? -
- Bueno.. pues que nunca he dejado de pensar en ella, pero como sé que no la volveré a ver decidí olvidarla y pasar página. Pero hace un par de días volví a soñar con ella y.. Es una tontería, porqué no está aquí fisicamente pero.. Bff.. Ya me entiendes -
- Sí - dije seria.
- Deberías olvidarme y centrarte en Bill, se nota que él solo tiene ojos para ti -
- Sí, claro - ni siquiera había escuchado lo que había dicho. Me sentía mentida, engañada... Pero así debía sentirse también Tom.
- Oh vamos, sé que una vez has probado a Tom Kaulitz es difícil olvidar, pero.. Eres fuerte, tu puedes - dijo guiñándome un ojo y riéndose aun forzadamente. Si el pudo tomárselo bien, yo también.
Tragué saliba y le sonreí.
- Me alegro de que almenos hayamos podido hablar de esto - dije y le abracé.
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Let's Make A Pact Tonight 3a Temp.
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