Starboy ● Justin Bieber

Capitulo 13

"Hacía mucho que no hacían algo así por mi."

La puerta del coche se cerró e incrusté mi mirada sobre el cuerpo de Ariana mientras se dirigía hacia la entrada de su casa con paso apresurado para que a lluvia no le alcanzara. Las gotas de los cristales distorsionaban la imagen, y justo cuando escuché la puerta de su casa cerrarse solté un suspiró y encendí el motor del coche deslizándome por la calle.

Sin duda había sido una mañana muy intensa. La más intensa que había tenido en meses... no daba crédito a todo lo que había pasado en cuestión de un par de horas.

Todo había ido genial cuando le había recogido en la puerta de su Universidad. Se veía realmente increíble con aquel vestido y su chaqueta vaquera, le hacía una figura impresionante.

Poco después, nos habíamos dirigido hacia un restaurante que ella había elegido y me había sorprendido nuevamente. Me gustaba su sencillez, la forma en la que hablaba tan despreocupadamente de las cosas y el hecho de que pudiera hablar de absolutamente cualquier tema con ella... sabía con exactitud que no me iba a aburrir, ni la conversación iba a decaer. Al contrario, cada vez que abría la boca descubría cosas nuevas de ella.

Siempre sabía qué decir, nunca hacía un comentario fuera de lugar... y cada vez que hablaba, me miraba con curiosidad y atención en sus piscinas marrones oscuras.

Me sentía comprendido. Algo a lo que no estaba muy acostumbrado.

Y esa era una de las cosas que más me llamaban la atención de ella, ¿cómo una persona tan alejada de mi mundo, podía entenderme tan bien?

Me inspiraba tranquilidad.

Puse la radio justo cuando di la vuelta a una rotonda y salí a una carretera dirigiéndome hacia mi casa, y la voz de Coldplay empezó a sonar por los altavoces del coche.

Y fue entonces cuando mi mente empezó a recordar todo, haciendo un repaso a todo lo sucedido desde que se había levantado de la mesa para dirigirse hacia el baño, y yo le había ido a buscar porque tardaba demasiado, hasta el golpe que le había propinado a aquel gilipollas, que al parecer era su ex, y terminando con el beso que había surgido entre los dos en mi coche.

La situación era bastante tensa al principio nada más salir del restaurante, ya que no era plato de buen gusto ser protagonista de una pelea o tener que presenciarla. Ella se notaba bastante apagada y algo tímida después de las palabras que había tenido que escuchar por parte de aquel tío.

Incluso me sentía culpable por haberle pegado un puñetazo y que se armara el lío que se había formado al final, pero había sido un impulso. No entendía por qué le había dicho todo aquello. No se lo merecía. Nadie se merecía eso.

El coche de Nick estaba aparcado justo en frente de la acera de mi casa, yo miré a través del cristal y alcé mis cejas sorprendido para poco después bajar la ventanilla. —¿Qué haces aquí?—

Él me miró con sorpresa. —Habíamos quedado a las cuatro en tu casa, ¿no te acuerdas?—

Llevé mi mano a mi frente y miré instintivamente el reloj de pulsera que llevaba en mi muñeca, marcaba las cuatro menos cinco de la tarde. —Dios, se me había olvidado.—

Él rió. —Claro, nos tienes olvidados ya desde que sales con Ariana.— Negó con su cabeza haciéndose el ofendido.

Yo le miré frunciendo mi ceño. —Idiota. A ver si no te voy a dejar entrar en casa.— Comenté mientras él soltaba una carcajada.

—No serías capaz.—

Le miré manteniendo su mirada y su sonrisa desapareció.

—Porque no serías capaz, ¿verdad?—