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Después de todo Ryan había aceptado ir a la dichosa cita.

Amber había tenido que obligarlo a ir, fue difícil, pero no había nada que Amber no solucionara, bueno si había pero no estaba para contarse.

-Ryan llevo media hora esperándote, ni que fueras a ver la reina- dijo Amber ya fastidiada

Al fin Ryan había salido de su habitación.

-Amber nunca hay que perder el estilo- le sonrió coquetamente.

-¿Estilo?- Amber río- Ryan, usas lo mismo de siempre, unos vaqueros ajustados y tu camisa de manga tres cuartos, ¿ Dónde esta el estilo?

Ryan la fulminó con la mirada, pero noto algo diferente.

Amber se veía ¿Linda?, claro que si él le decía eso, ella era capaz de golpearlo, no le gustaban muchos los alagos.

Ryan siguió examinadola, ¿Cómo antes no noto cada centímetro de aquella chica?

Su cuerpo no era más que lo normal, su cabello era hermoso en ese tono casataño y largo, sus labios eran delgados pero no tanto, sus ojos eran sumamente hermosos, brillaban y como no notar esas mejillas, tan suaves y delicadas.

Era perfecta, pero ¿Por qué no podía verla con otros ojos qué no fueran más que su pequeña hermana?

-Ryan se que te gusto, pero deja de mirarme como un trozo de carne- le dijo bromeando.

-Vamos, se nos hace tarde- Ryan la tomo de la mano, claro sin entrelazarlas.

Iban sumamente sumidos en sus pensamientos, ninguno decía nada, no era incómodo, pero era raro no tener a Amber hablando como pájaro.

-Y dime ¿Qué tal las cosas con William?- soltó Ryan de repente

Amber fruncio el ceño.

William era un tema que no quería tocar, es más le hacía daño todo.

Después de regresar de Nueva York, William nunca la busco, solo veía fotos de el con Summer.

-Pues lo normal, casi no hablamos- le dijo Amber como si nada

-Oh entiendo- suspiro pesadamente-mira hemos llegado.

Los cuatro habían quedado de ir a la feria, un lugar espectacular.

-Mara- saludo Amber.

-Hola a todos- sonrió Drew

Se sentía la tensión, era incómodo.

-Hay que divertirnos- dijo Drew

Todos asintieron.

Habían decidido subir a la montaña rusa, como Drew era la cita de Thamara ambos subieron juntos, mientras que Ryan y Amber les seguían.

Así pasaron varios juegos, hasta que el estomago de Amber gruño.

-Creo que alguien tiene hambre- le sonrió Ryan a Amber, ella solo asintió.

-Así es, voy por algo de comer, ahora vuelvo- no espero respuesta y se fue.

-¡HEY TE ACOMPAÑO!- grito Ryan, dejando solos a Drew y Thamara

-¿Crees qué ellos se gusten?- soltó de repente Thamara

Drew río y negó.

-No lo creó, ambos se consideran hermanos, son muy raros, pero no se gustan y puedes notarlo en sus ojos-Drew se encogió de hombros.

Thamara los miró, en efecto se comportaban como hermanos celososo, mal humorados, payasos, de todo, pero nunca como novios o algo parecido.

-Drew ¿Alguna vez fuiste rechazado por una chica?- él la miró, obvio que Drew sabía que ella podría rechazarlo, y eso le daba miedo.

-Nunca- respondió con sinceridad

-¿Entonces por qué rechazas a las chicas que se te acercan?- era la imaginación de Drew o Thamara quería saber de él.

-Hay una chica que me gusta, no podría lastimar a alguien intentando algo que talvez no llegue a sentir- muy en él fondo Thamara sintió algo, Drew tenía razón, él no quería lastimar a nadie, sin embargo ¿Por qué el no busca o se le declara a la chica qué le gusta?

-Tienes razón ¿Quién es la afortunada?- Thamara codeó a Drew

-Pues ella...-Drew no termino de decir, gracias a  Ryan y Amber que aparecieron con dos enormes Hot-Dogs

-Esto esta delicioso, deberían provarlo-dijo Amber con la boca llena, saboreando cada parte del hot-dog

Drew y Thamara negaron sonriendo, al final Thamara le daría una oportunidad a Drew de conocerlo, talvez no era tan malo hacerlo, y aunque Drew sabía que no había posibilidad con ella, lo iba a intentar.

Ambos iban a tomar un solo camino, pero no sabían si eso era bueno o malo.

ThamaraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora