Me despierto con un sabor metálico en la boca, como cada vez que tengo una visión, solo que esta vez ha sido diferente. He sentido como la oscuridad llenaba mi corazón y el terror se iba acomulando en mis pulmones. Él iba a volver y sólo una persona podía evitar que el mundo se sumiese en la oscuridad; debía encontrar a Harry Potter.
Me incorporo y hundo mis manos en la maleza del suelo, inspiro el olor del bosque que me es tan familiar. Pronto oigo ruidos, se que me buscan y debo volver a huir, oigo pisadas y siento la magia oscura que rodea a esas personas, con un suave movimiento de varita me transporto a otro bosque, lejos de Albania; donde sospechaba que el que no debe ser nombrado se encontraba.
Decido seguir caminando hasta que diviso la fortaleza que es el colegio de Erythrina; sólo aquellos que poseen sangre mestiza y fueron dotados de magia podrán verlo y estudiar aquí. Se trata de un colegio que ha caído en leyenda tras siglos de secretos; un colegio oculto que cambia de localización constantemente y se instala entre los más frondosos bosques europeos. Un colegio donde no habita la magia oscura, sino la magia más pura y plena. No existen las casas ni los puntos; pero si que existen diferentes tipos de estudiantes: existen centauros que vienen a aprender el arte de las estrellas y las profecías; los licántropos y vampiros que nacieron brujos y han sido convertidos en contra de su voluntad, son bienvenidos y aprenden a controlar sus impulsos; y muchas otras criaturas que son bienvenidas sin prejuicios.
Pero yo soy diferente, siempre lo he sido. Me llamo Nereida y mi raza se encuentra en extinción. Soy una defensionem nemora, un tipo de ninfas que nos encargamos de proteger los bosques y a las criaturas que se internan en el. Pero yo teng un don, que me hace única y peligrosa. Puedo ver los diferentes futuros que conciernen a cada uno, tengo la capacidad de ver las diferentes posibilidades de vida de cada persona, pero más que un don, es una maldición ya que el futuro no se puede cambiar. Es algo que aprendí tras la muerte de mis padres.
Erythrina es única, se trata de un árbol mágico, que hospeda a miles de criaturas que ayudan a los bosques; tanto profesores, como cocineros, como hadas que persiguen a los alumnos castigados. Es más que un hogar para nosotros, no se puede explicar pero Erythrina forma parte de nosotros, nos da la vida y nosotros a ella. Por eso debo evitar que mi visión se cumpla, aunque tenga que arriesgar mi vida, el señor oscuro no debe volver a alzarse o me encontrará y ni el mismo Harry Potter podrá ayudarnos.
Corro a través de las ramas que componen los pasillos de la escuela, miles y miles de corredizos que buscan que los alumnos se pierdan y aprendan a entender el bosque y hallar con sus sentidos la salida. Pero no puedo perderme, debo hayar a la directora Ferth.
Por fín me encuentro frente a frente con los pétalos que cubren el despacho de la directora.
- Dilatat viam - Susurro, pronto los petálos se abren y me muestran la tenue luz que marca la siluta lejana de un centauro de dos metros de altura, con una larga y suave cabellera grisácea y con un rostro lleno de arrugas pero que siguen mostrando a lo que fue una bella mujer.
- Receperint meum consilium iuvenum, ¿qué es lo que te concierne mi joven estudiante?-.
- Mi señora, debemos salir a la luz y proteger al que derrotó una vez al señor tenebroso. - dije con la voz temblorosa pero con decisión.
- Lo se Nereida, y tú también sabes lo que eso significa; Darws, Khreu, Beghy y tú debéis participar en el torneo de los tres magos; mis cuatro mejores alumnos.
Mi cara se lleno de pavor durante un instante, y me atrevía a volver a preguntar:
- Pero directora, tras lo que sucedió en el último torneo y los tiempos oscuros que se avecinan, ¿porqué lo van a volver a convocar?
- Ambas sabemos la respuesta querida- me acarició la cara mientras una lágrima plateada de precipitaba por su mejilla-, el señor oscuro te busca, pronto se alzará y sabe que tu bondad te llevará a salvar al joven Potter, por ello ha decidido intervenir en las mentes más oscuras del ministerio y convocar el torneo de nuevo, y esta vez te juro, que no se derramará más sandre de ésta escuela - dijo Ferth con decisión.
Pero las dos sabíamos que eso no era cierto y que pronto las tres escuelas que nos juraron lealtad nos volverían a traicionar como en el primer torneo.
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Bueno, y ese es el prólogo, espero que os haya gustado y lo hayáis disfrutado tanto como yo escribiéndolo.
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Con amor, Mrs. Black
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Erythrina - Harry potter y el torneo de los cuatro magos
Fanfiction¿Qué pasaría si los tres colegios más grandes de hechicería hubiesen ocultado un cuarto colegio, cuyo paradero y existencia se desconocen incluso para el mismísimo Dumbledore, debido a un oscuro secreto? Sumérgete en esta trama, donde Nereida, un...