For you I bleed myself dry.⇨Larry OS

Parte única.

Era noche de fiesta para celebrar el final de los exámenes en el apartamento de Niall. No había muchas personas en el lugar porque era demasiado temprano y ni siquiera el alcohol había llegado así que no tenía mucho sentido estar en el lugar en ese momento.

Pero Louis estaba ahí porque Niall había querido que lo ayudara a mover los muebles para hacer espacio y no era lo que se podía llamar algo divertido así que estaba aburriéndose en una esquina mientras esperaba que el alcohol llegara en su salvación. Pero en vez de alcohol fue Harry quien tocó a la puerta. Hubiera sido fantástico si no hubiera llegado con su estúpido novio.

—Hey, Lou. — saludó Harry sentándose a su lado. Louis lo saludó de vuelta y esperó que la envidia no se notara demasiado en su cara cuando vio a Jason  (el novio de Harry) sentarse también.

— ¿Por qué tan temprano? — preguntó Louis, moviendo su cuerpo un poco para poder ver a Harry más directo. Se miraba hermoso.

— No teníamos nada que hacer así que pensamos que sería una buena idea venir un poco más temprano de lo planeado.

Si Louis estuviera con Harry de seguro no les faltarían cosas que hacer, pero no era momento de pensar en eso porque no había alcohol todavía. Estaba demasiado sobrio y sus ojos parecían no querer despegarse de la cara de Harry. Genial.

Como a eso de las once de la noche fue cuando la fiesta tomó vuelo y se salió un poco de control. Bueno, tanto como una fiesta universitaria en un pequeño apartamento se puede salir de control sin ser 'normal'.

Aun así los vecinos empezaron a quejarse, y el encargado les pidió amablemente que le bajaran un poco el volumen a la música y al ruido en general. Por supuesto, la fiesta acabó ahí porque no era la primera advertencia que Niall recibía por hacer una fiesta y aunque Louis no estaba seguro que podían hacerle, el encargado era algo aterrador.

Decidieron que seguirían la fiesta en uno de los bares que estuvieran cerca, porque ya estaban entrados, había el alcohol suficiente como para que durara unas cuantas horas más y porque no podía terminar el festejo tan pronto. Subieron las hieleras a los carros y todos se fueron al mismo bar en el centro de la ciudad que quizá era un poco demasiado grande.

Tomaron dos mesas VIP porque entre tantas personas juntas que iban una de ellas tenía contactos en el lugar y, en serio, Niall sabía con qué personas relacionarse.

El lugar estaba bien, un poco sofocado con tantas personas dentro sudando por bailar en la gran pista que había en el centro del lugar. Harry estaba en una de las mesas cercanas a él, con la mano de Jason asegurada en su muslo demasiado cerca de su entrepierna como para ser adecuado, aunque nadie parecía darse cuenta. Louis si se daba cuenta, porque no podía despegar los ojos de Harry.

—Lo estás mirando fijamente. — murmuró Liam en su oído haciendo que saltara un poco por la sorpresa.

No era la primera vez que él o Niall tenían que intervenir en uno de sus momentos de debilidad en donde sus ojos simplemente se rehusaban por completo a no admirar a Harry. En serio, era como naturaleza propia.

—No lo miro fijamente. — dijo Louis, tomando un trago de su cerveza, porque aún no había el alcohol suficiente en su sistema, y alejando sus ojos de Harry.

—Si tú lo dices. — Liam volteó su cuerpo para hablar con la persona que estaba de su otro lado y Louis quedó libre para poder mirar a Harry todo lo que quisiera. Excepto que no pudo porque él ya no estaba en su lugar.

Lo buscó con la mirada por alrededor de la mesa, no podía estar tan lejos si había desaparecido sólo unos momentos atrás, y lo vio bajando hacía la pista de baile con la mano de Jason entre las suyas.