Ahora mismo estoy más confundida que nunca, durante las clases he notado como Oliver me mira. Me pregunto qué quiere, sé que unos días atrás cuando hablamos por última vez no terminó de decirme algo. Pero tampoco creo que sea necesario mirarme constantemente, podría hablar conmigo y decírmelo, parece que esperar que yo hablara con él.
Durante el recreo, Josh se sentó con mis amigas y conmigo, decía que tenía un problema amoroso.
—Es que nunca me notaría —comentó.
Rodé los ojos.
—Tienes que hablarle, aunque sea por alguna red social. Hazlo —propuse y mis amigas estuvieron de acuerdo.
Amber puso una mano en su hombro y le sonrió, sus brackets centellearon.
—Ten confianza en ti, Josh —dijo y luego nos miró a Harper y a mí.
Alcé una ceja y miré a Harper, que miraba hacia el suelo. En mis labios formé una mueca. Aquí había algo de lo que no me estaba enterando. ¿Acaso a Harper le pasaba algo?
—Tienen razón —aceptó Josh.
Me encogí de hombros y sonreí.
—Además, es muy lindo —mencioné.
Josh me fulminó con la mirada.
—Es mío, perra. —Luego su expresión cambió a una pensativa y me miró—. Pero pensándolo mejor, él solo te podría ver como amiga porque también es gay.
Todos soltamos una carcajada.
Cuando terminé de reírme vi a Oliver a lo lejos haciéndome señas para que lo siguiera. Mi sonrisa se desvaneció y sentí que palidecía. Se ve que mi cambio de expresión fue muy notorio porque mis amigos me miraban.
—¿Está todo bien, Elena? —preguntó Harper.
Negué con la cabeza y luego asentí al darme cuenta de mi error. Todos me miraron aún más confundidos. Rodé los ojos.
—Ahora vuelvo —dije y me levanté.
Procuré que no me estuvieran mirando y caminé hacia Oliver. Lo miré con el ceño fruncido.
—¿Qué quieres? —pregunté.
Miró hacia todos lados y me pidió que caminara con él.
—Necesito decirte esto antes de que Isaac venga —comentó.
Me molesta tanto misterio. ¿Y qué problema había si venía Isaac?
—A él le gustas —dijo y me miró, probablemente esperaba una reacción de sorpresa por mi parte.
Alcé mis cejas.
—¿Eso es todo lo que quieres decirme? —pregunté secamente.
Él me miró desconcertado.
—Eso ya lo sabía, no me has dicho nada nuevo. Tampoco entiendo por qué me lo dices, no es que sea precisamente tu asunto —mencioné.
Estaba sorprendido, claramente. Me miraba con los ojos abiertos como platos y la boca entreabierta.
—Elena yo... —Suspiró y se preparó para decirme algo.
Pero una voz familiar nos sobresaltó a los dos.
—¡Baker! —gritó Isaac, que había aparecido de repente a mi lado.
Salté en mi lugar y acto seguido, le di una bofetada. Oliver soltó una sonora carcajada y Isaac lo fulminó con la mirada.
—¿Por qué hiciste eso, Baker? —preguntó Isaac mientras se tocaba la mejilla que ahora estaba roja.
Me encogí de hombros.
—Me asustaste —respondí.
Ahora notaba una pequeña competencia de miradas entre Oliver y Isaac. Puse los ojos en blanco.
—¡¿Por qué nunca me dejas hablar con ella?! —le gritó Oliver.
Isaac apretó sus puños.
—Porque sé lo que quieres hacer, Oliver —contestó Isaac.
Abrí mucho mis ojos, retrocedí unos cuántos pasos y me fui corriendo, lejos de ellos. Sea cual sea la razón por la que están peleados, no quiero estar involucrada.
. . .
Punto de vista de Harper
Ethan estaba hablando con Flo, la sonrisa reluciente no desparecía de su rostro ni por un segundo. Yo los observaba con los labios apretados. Aún no sabía cómo debía sentirme, todo esto era nuevo para mí.
La peor parte es que a Flo la quiero casi como a una amiga, ella me ha ayudado mucho con español, que es en sí, la única materia que me cuesta. Pero verla con él... no lo sé. No me gusta, siento que me estuviera robando algo que es mío.
Negué con la cabeza y me obligué a apartar la vista. Simplemente quería concentrarme en mis estudios, debía tener todo estrictamente aprobado este trimestre, necesito ser uno de los mejores promedios del curso para ganar unos cuántos beneficios, como saltearme algunos deberes.
Me senté con la espalda derecha, abrí el libro de matemáticas y comencé a hacer unos cuántos ejercicios para mantener mi mente ocupada.
Amber me tocó el hombro y yo la miré con los ojos entrecerrados, tanto tiempo mirando hacia el libro que mi vista se había quedado algo cansada. El cabello castaño de Amber estaba suelto y le caía por los hombros, ella casi nunca se lo recogía. En cambio yo, siempre me hacía un moño o una coleta.
—¿Cómo vas? —me preguntó con una pequeña sonrisa en sus labios.
Fruncí el ceño.
—Bien, supongo. Resuelvo... ejercicios —contesté mientras miraba mi hoja completamente arruinada de tanto borrar.
Amber se sentó cerca mío. La profesora había salido para hablar con una secretaria, así que no pasaría nada. Miré hacia Elena por unos segundos, estaba sentada en su lugar dibujando mientras Isaac le hablaba acerca de algo que le había pasado recientemente.
—Ya lo admites, ¿verdad? —dijo Amber con una ceja alzada.
La miré de reojo.
—¿A qué te refieres? —pregunté mientras un nudo se comenzaba a formar en mi garganta.
Ella rodó sus ojos y negó con la cabeza mientras murmuraba algo que no logré entender.
—Que te gusta Ethan. No me lo niegues, lo sé —aseguró mi amiga.
Sentía que palidecía y de pronto creí que iba a vomitar.
—No... no es cierto —intenté susurrar con un hilo de voz.
Amber hizo una mueca.
—Está bien. No te hablaré más del tema —dijo Amber en un suspiro y volvió a su lugar.
No pienso admitir esto, al menos no en voz alta.
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Only You
Teen FictionElena está en anteúltimo año de secundaria. Este año les tocaba juntarse con el otro grupo y así se quedarían hasta terminar la escuela. Ella conoce a dos chicos muy divertidos. Pero su relación podría verse afectada por diversos eventos que los lle...