Son 3:00 AM, la habitación se encuentra aturdida por un silencio perturbador, el único sonido que se puede percibir es el del ventilador del ordenador encendido que se encuentra a un costado del escritorio. El ordenador tiene un diseño un tanto angustiante para cualquier amateur de computadoras. El gabinete emite luces cambiantes y tenues de tonos rojizos que resaltan dentro de la oscuridad negra y profunda del cuarto. En la parte de arriba del escritorio negro se encuentran dos monitores expulsando una luz cegadora e intermitente de colores rojos y blancos, –algo muy parecido a el "glitch" que aparece en los displays de las pantallas dañadas–, La útima luz sin embargo es la luz más fuerte de la habitación, aunque aún así, ésta no logra esparcirse completamente. El espectro de luz fuerte y parpadeante deja percibir una sombra; un silla que sostiene un cuerpo jóven que parece muerto al dejar caer el cuello hacia atrás como una flor marchita, las manos se encuentran reposadas en los descansabrazos de la silla de aspecto moderno y se notan con algunos dedos rotos.
Un estruendo extraño mata aquel siseo mudo del ordenador y es seguido de una ruidosa bocanada de aire del antes cuerpo muerto. Las bocanadas son desesperadas como si el cadáver hubiese pasado años sin respirar. Las manos se agitan y se retuercen buscando recobrar sus movimientos naturales, a pesar de que esta acción haga parecer esos movimientos aún más aterradores. Los ojos del joven se encuentran desorbitados y desesperados por conocer que sucede a su al rededor pero no consigue divisar nada debido a que sus pupilas se encuentran saturadas de la luz de los monitores que ahora se ha vuelto más inestable.
El joven se retuerce al escuchar voces esordecedoras gritándole y ordenándole cosas extrañas. Las únicas palabras que el joven puede identificar son "Bórralos ahora", una y otra vez en diferentes tonos, timbres y niveles de volumen, creando un contraste auditivo intimidante y constante del que nacen susurros y mueren gritos alucinantes. Después de un par de segundos llenos de gritos y oraciones extrañas el joven escucha una vez más las instrucciones de las voces y se percata de un mensaje que aparece en la pantalla del ordenador con la leyenda "¿Seguro que desea borrar todos los elementos?" pero esta vez solo encuentra una opción: "Sí".
El joven aturdido y desesperado por liberarse de la pesadilla ubica con sus ojos el botón de "Delete" y mientras repentinamente busca aproximarse a él, descubre que sus brazos y especialmente sus dedos se resisten a la acción de presionar aquel botón que lo liberaría de aquella tortura. Mientras más se acercan sus dedos al botón, parece que el joven se llena aún más de un dolor que se incrementa cada que sus dedos se aproximan más a aquel botón que hasta ese momento se había vuelto uno de los botones más deseados de aquel teclado barato. A unos milímetros del botón el joven comienza a gritar de una forma descomunal provocada por el dolor que le producía el aproximarse a las teclas, la acción en este punto se había vuelto más complicada, tanto que parecía que el índice del joven y la tecla tuvieran implantados dos imanes gigantes con ambos polos positivos. Después de casi un minuto de insoportable dolor, el joven logra tocar la tecla y aplicando todas sus fuerzas sobre la superficie de aquel botón, a penas logra crear la presión mínima para accionarlo, de pronto la habitación antes parpadeante se vuelve completamente oscura y el ruido que hasta antes de haber presionado aquella tecla era constante, enmudeció repentinamente convirtiéndose en un silencio inquietante. Esta vez no se distinguía ningún sonido.
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Ruido Interno
Mystery / ThrillerLa historia detrás de mis próximos cortometrajes...