Ah, esos paseos nocturnos...

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ADAM:

Un mes y medio después...

—Él número al que usted marcó no se encuentra disponible o se encuentra fuera del área de servicio— dijo una voz mecánica al teléfono

Solté un resoplido y dejé caer el teléfono sobre mi escritorio. Sentí como un dolor punzante comenzaba a envolver mi cabeza.

Un mes y medio sin saber nada de Taylor, literalmente nada. No respondía a mis llamadas, ni mensajes, había ido a su casa un millón de veces y no la había encontrado, le pregunte a todas sus amigas donde podía estar y ninguna supo darme una respuesta lógica.

Era viernes por la noche, llevaba días sin poder dormir y no podía hacerlo hasta que viera a Taylor. Me recosté sobre la silla de mi escritorio y miré durante un largo rato el techo de mi estudio, si no sabía algo de ella pronto me volvería loco.

Tomé mi teléfono de nuevo, y esta vez llamé a Selena.

—¿Hola?— una voz ligeramente irritada respondió al instante

—Hola Selena, soy Calvin... espero que no te moleste que te haya llamado tan tarde— me disculpe, a veces creía que sólo porque yo no dormía las demás personas tampoco lo hacían

—¡Ay, Calvin! Claro que no, para mí nunca es tarde en realidad, el tiempo es relativo cuando cuidas a dos bebés al mismo tiempo— se quejó

—Me lo imagino, pero quisiera preguntarte, ¿Sí aun no has sabido nada de Taylor?— le pregunté, si había alguien que estaba en constante comunicación con Taylor, estaba seguro de que era Selena

—Oh, no... no he sabido nada de ella—respondió al instante

—¿Estás segura? Si sabes algo, por favor dímelo... estoy muy preocupado— repuse con voz mortificada

—Lo siento, Calvin... pero no sé nada. Estoy segura que este donde este, estará bien— dijo, y a continuación un chillido se escuchó. –Debo colgar, el deber me llama— se disculpó y cortó la llamada

Sólo quedaba una persona. Austin tenía que saberlo.

Llamé a Austin y espere a que este respondiera.

—¡Hey Calvin!— respondió en tono alegre

—Hola Austin, ¿Aún no tienes noticias de tu hermana?— solté, recargándome en mi silla. Rezando para que esta vez fuera diferente a las veces anteriores. Lo escuche dudar unos segundos. –Por favor Austin, si sabes algo dímelo... ¡Estoy totalmente desesperado! No he sabido nada de ella en casi dos meses, me preocupa de que si esto sigue así me pierda el nacimiento de mi hija...— dije esta vez, al borde del colapso

—Está bien... te diré lo que sé— cedió Austin, sentí como mi pulso se disparaba al instante en que escuche sus palabras. –Hace algunas semanas, mi mamá me llamó y mencionó algo sobre que Taylor estaba en Nashville con ellos...— dijo e hizo una pausa. –Por favor, si vas a Nashville... no escuchaste nada de mí— añadió con voz nerviosa

—No te preocupes, Austin. Todo quedará entre nosotros— respondí sintiendo una ola de emoción

Rápidamente llamé a mi agente y le pedí que me preparara el primer vuelo a Nashville.

[...]

—¿Cómo que te vas Nashville?— exclamó Eiza atónita mientras me miraba empacar

—Es un viaje de trabajo, muy importante— mentí, Eiza se había mudado hacía algunas semanas, no porque yo la hubiera invitado si no que, insistió en que estaría remodelando su casa y no tenía un lugar donde quedarse. Obviamente ambos estábamos conscientes de que ella tenía los recursos suficientes para rentar un apartamento temporalmente, pero no quise tener que darle una larga explicación sobre lo temprano que era vivir juntos.

Mine (TAYVIN) 2da temporadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora