DEMONS.

7.Mimos.

KAI:

-Ya sabes por qué estoy aquí- le dije a Mary mientras comíamos nuestra comida de Acción de Gracias.

-¿Qué tal si me dices por qué estás tu aquí? -Mary apartó su plato y se recostó en su silla.

-Ya sabes por qué estoy aquí-dijo. -Maté a gente. Sin embargo, esa no es toda la historia. -No me contaste toda tu historia.

-Bien, nací sin mi propia magia, así que tengo que sacarla de los demás, mis padres me llamaron abominación toda mi vida.-Suspiré. -Se suponía que debía unirme con mi gemelo, Jo, y gobernar el clan, pero me di cuenta de que habían tenido hijos , otro grupo de gemelos, porque no querían que alguien como yo gobernara el clan- Sólo pensar en ello me hizo enojar de nuevo. -Por lo tanto, tenía que matar a los gemelos, por supuesto.-Mary frunció el ceño.

-¿Por qué no matar solo a los gemelos? ¿Por qué matar a todos tus hermanos?

-Porque se lo merecían. Todo mi clan me había hecho sentir como una abominación desde que nací -dije casualmente.-De todos modos, no los maté a todos. Los gemelos se escaparon y yo sólo le corté el bazo a Jo. No podría matarla, sabes. Entonces no tendría a nadie con quien fusionarme.

-¿Cómo puedes ser tan informal con esto?

-Oh, vamos, rubita.

-¡No me llames así! -sonreí ante la ira de Mary hacia mí. Siempre enfadada conmigo por algo, pero me pareció divertido.

-Eres un monstruo.- Fruncí el ceño y me puse de pie, Mary hizo lo mismo, caminando alrededor de la mesa y dirigiéndose a la puerta de entrada.

-No soy un monstruo. Ellos merecían sufrir, al igual que me hicieron sufrir todos esos años.-solté mientras sujetaba su brazo.

Mary sacudió el brazo de mi mano.

-Eran niños -escupió ella.

-Bueno, ¿a quién mataste? -pregunté.-¿se lo merecían? Al menos en tu opinión, porque si dices que sí, entonces eres como yo.

-No soy como tú, los hombres que maté trataban de violarme porque pensaban que yo era mi hermana, se merecían lo que les pasó.

-¿Por qué quieren a tu hermana? - Le pregunté ,contento de que finalmente respondiera a algunas de mis preguntas. Mary apartó la vista y negó con la cabeza. 

-No sé, ella estaba en un lugar malo en ese entonces, pero no te preocupes, después de haber matado a los chicos que la querían muerta, ella me usó como una manera de regresar al lado bueno de nuestro padre, enviándome aquí.
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La habitación estaba oscura. Toda la mansión estaba oscura. Pero era enorme. Más grande incluso que mi casa vieja en Oregón. Y sólo una persona vivía aquí, mientras que alrededor de diez habían vivido en mi casa. Podría acostumbrarme a esto, aunque no estaba realmente de humor para estar solo. Había estado solo durante veinte años. La puerta principal se abrió y Tyler entró. 

-Creo que la ginebra tiene una mala reputación -dije con indiferencia-. Tyler dejó caer lo que estaba en sus manos y se acercó a mí. Rodé mis ojos, rompí la botella de ginebra sobre el borde de la mesa y la coloque en su garganta; dejándole congelado. -Preferiría no matarte -dije-.Pero lo haré.

-¿Qué diablos quieres? -preguntó Tyler con impaciencia.

-Esto va a sonar loco, pero quiero salvar la vida de Liv. ¿Te apetece hacer un trato con el diablo?

CAROLINE:

Levanté una ceja a Damon.

-No iba a decirte que tengo sentimientos por Bonnie-exclamó. 

-¡los tenias!-Respondí. -Bueno, Damon, tú y Bonnie siempre habéis tenido esa extraña relación y de repente  quedáis atrapados en un universo alternativo juntos, las únicas dos personas del mundo ... 

-Además de un asesino psicópata -insistió Enzo. 

-¿Y esperas que crea que ... no sienten absolutamente nada el uno por el otro?- Damon nos estaba mirando, sus ojos se movían entre Enzo y yo. Estábamos de pie en medio de la entrada de la casa y no dejábamos que Damon se fuera hasta que admitiera que sentía algo por Bonnie. ¡Era obvio! Incluso Enzo estaba de acuerdo, y el no se preocupaba para nada de los romances.

Antes de que Damon pudiera admitir algo, Stefan entró en la habitación. 

-Vamos -le dijo a Damon. 

-¿Ir a donde? -preguntó Damon escéptico.

-Tú, yo y Alaric nos vamos a Oregón a seguir una pista  del aquelarre Gemini.- Las cejas de Damon se confundieron al mirar el oso de peluche en la mano de Stefan. 

-¿De dónde sacaste eso?- preguntó. Mary lo encontró en el cementerio. 

-Eso era de Bonnie -dijo Damon y yo al unísono.

-Si envía a la señora mimos, debe estar viva -continuó Damon.

Sonreí. Damon me lanzó una mirada y se dirigió a la puerta. 

-Vamos, Stefan.

Cuando me volví hacia Enzo, él tenía sus brazos cruzados sobre su pecho y me estaba mirando.

-Lo hice por ti -dijo críticamente.

-¿Qué has hecho, Enzo? -Le pregunté.

-Maté a Ivy -apreté mis labios.

-¿Por qué matarías a Ivy por mi?

-Para castigar a Stefan por lastimarte y, por supuesto, porque renunció a Damon, pero sobre todo por ti.

Tratando de ignorar el hecho de que estaba un poco halagada y que Enzo me miraba como si fuera su próxima comida, intente salir de ahí pero se interpuso en mi camino.

-¿Que quieres de mí, Enzo?-le pregunte en voz baja.

-Quiero que te des cuenta de que Stefan no es bueno para ti.

-¿Y tu sí? Acabas de decir que mataste a una persona para vengarte de Stefan por lastimarme. Tú no eres buena persona.-Enzo apretó la mandíbula, pero solo suspiró. Se movió como si fuera a tocarme ,pero dejó caer sus manos a los lados.

-Tienes razón. No lo soy ,pero tampoco lo es él.-Después de sus palabras se marcho, dejándome sola y haciendo que me sintiera como una idiota.