Vidas Cruzadas

Capítulo 6

Pov. Keila

Al entrar escuche risas que venias de la Sala, me dirigi alli.

-keila- sonríe el chico de esos ojos verdes que me habian enamorado de niña.

-hola Erick- saludo tímida.

-¡hermanita!- grita el morocho levantándose de su lugar y acercándose a mi para rodearme con su brazos- te extrañe-

- y yo a ti- respondo envolviendo mis brazos en su cuello.

-¿y a mi no me extrañaste?- dice una voz detrás de richard.

-claro que si- digo separándome de mi hermano y yendo hacia el para abrazarlo.

-ya me estaba poniendo celoso- ríe ya conmigo entre sus brazos- ¿mi hermana?-

-Emma estaba preparándose su ropa antes de que me valla- respondo separándome de el-

- ah, hoy tenemos una cena importante- agrega richard- lo había olvidado-

-algo oí que dijo mi madre-sigue Erick.

-yo mejor me voy a preparar- camino hacia las escaleras.

-ponte mas hermosa de lo que eres- escucho que Erick grita.

Quise contener la risa, pero no lo logre.

Siempre sentí algo por Erick, y Emma decía que el por mi, nunca la cuestionaba, ya que el es su hermano y lo conoce como nadie; Pero estos años en Inglaterra ayudaron para olvidarme de el y de todo lo que me hace mal en esta ciudad.

-¿estas coqueteandole a mi hermana?- escucho decir a Richard.

- no... es que...- tartamudea Erick.

-si tu me das a tu hermana, yo te doy a la mia- lo interrumpe.

- ¡Richard, te escuche!- grito mientras comienzo a subir las escaleras.

-¡era una broma!-

Conozco a mi hermano como la palma de mi mano, se que lo que dijo en verdad era una broma. Desde que el llego a esta casa supo que me gustaba Erick, siempre nos mantenía alejados porque decía que era pequeña para novios.

-volví-

-si te veo- responde saliendo del baño.

- me encanta lo que me elegiste- digo acercándome a la cama, donde se encontraba el atuendo que me pondría esta noche.

- sabia que te gustaría. te conozco como si fuera tu madre-

Me adentre al baño para darme una ducha, luego de unos minutos sali, me aliste y listo, ya estaba lista para esta noche.

-estas hermosa- dice Emma.

-gracias-

-casi igual a mi-continua.

Estaba por contestarle pero unos golpes nos interrumpieron.

-niñas, ya están los invitados- dice abriendo la puerta de la habitación.-

-ya vamos zabdi- digo.

- cuantas veces te tengo que decir que no somos niñas zabdiel- contesta Emma enojada.

- para mi lo son- dice parado en la entrada de la habitación- por eso, las estaré vigilando si miran a los vecinos.

-¿vecinos?- pregunto.

-si, la cena es con ellos-

- genial.- respondo sarcastica.

- ¿aquí paso algo que no me entere?- pregunta.

- si. A Keila le gusto Christopher, uno de nuestros lindos vecinos- sonríe.

-Y a ti Joel- contesto.

-claro que...

-chicas- nos interrumpe- no es hora de que peleen. Bajemos.-

-vamos- dice Emma saliendo del cuarto detrás de Zabdiel.

Bajamos y todos comenzaron a mirarnos.

Esto es realmente incomodo, y mucho mas con la vista de Christopher clavada en mi sin disimular.

-hola- saludaron todos.

-hola- contestamos y saludamos uno por uno.

-cariño- llama mi padre- nosotros nos quedaremos aquí ¿porque no van a tomar aire al jardín?- recorre con la mirada a los hijos de los vecinos y a nosotras.

- no gracias, hace fri...

-vamos- interrumpe el chico mas irritante del planeta, tomándome de la mano y llevándome hasta el jardin.

- ¿¡que haces!?-

- hoy empezamos con el pie izquierdo ¿no te parece?... soy Christopher V...-

-no.- digo interrumpiendolo y dándome la vuelta para irme, pero antes de que comience a caminar, vuelve a tomarme del brazo poniéndome frente a el.

-no te voy dejar ir- dice sin soltarme, bajando de mi antebrazo a mi mano.

Si no fuera christopher el que me estuviera diciendo eso, me parecería hermosa esa oración.

-bien. Pero déjame ir por mi abrigo-

-no, toma- dice soltandome. Se saco su chaqueta para pasarla por detrás de mi espalda y ponerla sobre mis hombros.

Este gesto me pareció muy lindo, pero no quita lo arrogante que es.

-gracias- digo fria.

-keila ¿cierto?-

- si- contesto de la misma manera- ¿podemos llamar a Emma y Joel?-

-¿para que los quieres?- pregunta-¿te pone nerviosa estar sola conmigo?- dice con una sonrisa egocéntrica en el rostro.

-no- miento, su mirada fija en mi era lo que me ponía de ese modo- llamalos o entraré a la casa- lo reto.

-bien- dice algo molesto- ¡Joel!- espero unos segundos y volvió a gritar-¡Joel!-

-¿que?- contesta saliendo de la casa junto a Emma ¿¡tomados de la mano!?